•La ayuda de un amigo• Honghwa/Seongjoong Ateez

Cap.10

Al principio, las estocadas eran lentas, esperando a que el mayor se acostumbrara. Pero, luego comenzó a aumentar el ritmo. Las uñas de Hwa se clavaban en la espalda del contrario, mientras cerraba sus ojos tratando de asimilar el extasis.
Sus cuerpos ardian ante cada toque. El sonido de ambos chocando, mezclandose con los gemidos era la melodía más bella que podía existir.

- ¿Lo disfrutas?- preguntó el menor de ambos.

-No me hables maldito.

- ¿Con esa boca me besas?

-Y hago más cosas aparte de eso......Dios, Joong, no puedo más.

-Estás tan estrecho Seonghwa. No puedo dejar de moverme dentro de tí.

Se unieron en un beso desesperado, pero dulce a la vez. Era como si dos universos colapsaran en ese preciso instante, como si dos corazones se unieran, como si todo rastro de maldad en el mundo dejara de existir, y solo quedara amor. Solo eran eso, amor.

Un par de embestidas más y Seonghwa se vino entre ambos y Hongjoong dentro del mayor. Se abrazaron mutuamente hasta quedar dormidos, cosa que sorprendía del mismo peligris amador de la limpieza. Pero ambos estaban exaustos, de la mejor manera posible.

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-Pareces un arandano ¿te dijeron ya?

-Ja ja ja, que chistoso eres. ¿Desayunaste payasitos?

-No, pero la honestidad se aprende. Aun que tu no sabes eso, ¿verdad?

-¿Disculpame? ¿Quién fue el que me mintió para ir a un puesto de teobokki y ahora habla de honestidad?

-¿Un favor no me podías hacer? Bien Hongjoong, no te molesto más.

-Perfecto.

Ambos viajaban en el auto, peleando.... pero con las manos entrelazadas. Yunho y Mingi que iban en los asientos de atrás no sabían si reirse o llorar. Era sorprendente ver a sus mayores.

Una seción de fotos comenzaría dentro de pocos minutos, y Hongjoong estaba terminando de ser arreglado. El ahora peliazul estaba feliz de como le quedaba el atuendo, asi que con energía miraba su reflejo en el espejo.

Primero fueron fotos grupales, y luego en parejas. Llegando a sentarse al lado del lider, un Seonghwa radiante lo saluda -Buenos días Mr. Blueberry-shi.

Risas fueron las respuestas del menor. Trabajaban muy bien juntos. Tanto así, que el fotografo les indicó otra pose que no habían intentado todavia.

-Wow, se ven muy bien juntos.

-Lo sé! Por lo que sé son mejores amigos.

-Quizas ¿por eso tienen esa conexión entre sí?

-Podría ser. Deberiamos contarle de esto a los demás estilistas.

Entre cuchicheos y cuchicheos, la voz se fue pasando. "LOS MAYORES DE ATEEZ TIENEN ALGO" se decía.
De allí empezaron las teorías. "Amistad o algo más" era el tema de tendencia.
Al grupo, la verdad no le importaba. Desde el momento en que Hongjoong y Seonghwa dicidieron estar juntos, se lo habían comunicado a la empresa. Ellos se habían estado preparando para cualquier represalia hacía ellos mismos y los demás miembros.

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-Si en algún momento no estoy yo y no está Seonghwa, el encargado del grupo será Mingi. Confio en el como mi mano derecha, y sé que tiene la cabeza de un lider.

- ¿Lo has pensado bien?- preguntaba serio Eden.

-Lo vengo analizando hace meses.

-Joong sabes que la empresa te apoyará en todo momento, a ambos- sentenciaba el Ceo de KQ.
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(A partir de aquí, comienza el drama y temas sensibles como violencia y ataques. Si no les hace bien leer estos, PASEN de largo).

Sangre. Gritos y pasos se escuchaban por el edificio.

Un paquete con una rata muerta había llegado.... para Seonghwa.

-Estoy aquí, mirame Hwa estoy aquí- decía Hongjoong tomando entre sus brazos al mayor.

-Estoy bien, estoy bien- repetía el peligris.

-¿Quién dejó entrar esta porquería?-gritaba el manager.

-No lo sabemos. Cuando llegamos nosotras, la caja ya estaba ahí. Creimos que era un regalo de algun fan- respondía una estilista.

-Es lo mismo que lo del vidrio.

Días atras, una piedra había rotado la ventana de los dormitorios. Una piedra, con la palabra "Basuras" escrita. Los ataques habían comenzado.

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Un pequeño descanso, eso se tomarían. Un fín de semana para pasarlo con sus miembros, sin agenda de por medio.

Joong asaba con Yunho la carne, mientras Hwa, San y Woo preparaban los acompañamientos. Yeongsang, Mingi y Jongho preparaban la mesa.

-¡¡La carne llegó!!

-Al fín, creí que me haría viejo esperando.

-Jung Wooyoung tén más respeto por tu lider- dijo Hwa con los brazos a sus costados.

-Oh hyung, dejamé molestarlo- respondio el nombrado con pequeños pucheros.

-Ay dios, quiero golpearte- dijo el menor de todos al ver tal aberración ante sus ojos.

-Ya ya, se enfriará la comida- decía Yeongsang dispuesto a comer sin los demas de ser necesario.

Un almuerzo tranquilo, lleno de risas y anecdotas. Se resumía así: el Woosan molestando a Seonghwa, un mayor enojado exigiendo una separación de grupo; Yunho y Mingi sosteniendolos para no tirarse a los golpes, Yeonsang tratando de separar a los involucrados y un Hongjoong explotando de la risa.
Pero quizas nadie se dió cuenta del maknae, aquel que desde el costado del lider grababa a todos, hasta enfocarse precisamente en el peliazul. Una risa genuina, felicidad sincera era lo que emanaba de él. Un día maravilloso que nadie olvidaría y, que sín saberlo, lo necesitarían para un futuro cercano.