•La ayuda de un amigo• Honghwa/Seongjoong Ateez

Cap.8

-"IM BEGGIN, BEGGIN YOU!!!
-"WHEN I WAS KING!!"
-"RATATA"!!

Beggin sonaba por los dormitorios mientras uno por uno los miembros entraban al cuerto de los mayores. Sus "Buenos días" eran así....

-Que demonios ocurre?- un adormilado y muy malhumorado Hongjoong abria sus ojos.

Una almohada salía volando directo a la cabeza de Mingi, desde lo que parecia un Seonghwa aún dormido.

-Hyung's son las 7 am. Eden llamó, quiere que vayamos a ensayar para Firework.

-BULNORIYAAAAA!!- gritaban Woo y Yunho subidos a la cama de Seonghwa.

-Hyung no los quiero seguir escuchando asi que levantense porfavor- decía el maknae luciblemente de mal humor.

Mingi y San hicieron el amague de sentarse en la cama del lider, pero al recibir una mirada sería de este ni siquiera llegaron a posarse. Si, el daba miedo cuando quería.

-Ya vamos, dejennos despertar tranquilos primero- dijo Hwa quitandose de encima a sus menores.

-Los esperamos abajo, no tarden- les avisó Woo con un tono y una mirada picara.

Los demás lo miraron confundidos, excepto por el mayor de todos que para sus adentros pensó -Boca suelta tenías que ser.

Se prepararon lo más rapido que podían y, antes de subir a la camioneta, Seonghwa le preguntó a Hongjoong si había comido algo de lo que los menores habian dejado en el desayunador, recibiendo un "No, estuve hablando con el manager y se me fué el tiempo" como respuesta.

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Era ya el medio día cuando todos se tomaron un descanso, todos menos Hongjoong. Era costumbre del sudodicho, pero todos sabían que lo hacia sin darse cuenta. Mientras tanto, Eden estaba en los estudios controlando el rap del lider.

-Intenta darle un un toque de fuerza en la última parte Joong- le indicaba por el parlante.

-Permiso, hola sumbae- dijo Hwa al inclinarse en forma de saludo. -¿No han terminado todavia con Hong?

-Casi estamos Seonghwa. ¿Qué tal les esta yendo a los chicos?

-Bien, ya estan todos almorzando. Por eso quería ver si Hong ya estaba listo.

-Lo dejaré libre en unos minutos. Pero no creo que quiera irse, ya sabes, siempre se queda arreglando algo.

-Si, lo sé.

-Eden ¿crees que quedó bien?- inquirió Hong en el microfono.

-Si, ya puedes salir de la cabina.

-Pienso que en el arranque me falta practica por que... Oh Hwa, estas aquí. ¿Pasó algo con la canción?

-No no, solo venía a preguntarte si vas a almorzar con nosotros. Ya es medio día.

-Ah, es cierto. La verdad es que no planeaba comer ahora. La canción tiene unas partes que necesitan revición. Quizas comeré un snack más tarde.

Seonghwa asintió, dirigiendose a la puerta. Pero Hongjoong no habia desayunado tampoco, lo que significaba que hasta la cena no comería ninguna buena comida -Hong, solo serán 30 minutos. Debes comer. Ven con nosotros- le dijo el mayor con un pequeña sonrisa en la cara.

Hongjoong lo pensó y luego de unos segundos aceptó. Se fueron hacia donde los demás miembros estaban almorzando, a la vez que un Eden los miraba pensativo.

-Interesante.

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Pequeños jadeos se escuchaban en la habitación o, mejor dicho, cabina de grabación. Lo que comenzó con un Hongjoong guiando a Seonghwa con sus lineas, termino con ambos besandose. Ya habián tirado el atril con las lineas del mayor, y la silla que habían dejado para él.
Un peligris era apricionado contra el vidrio de la cabina por un pelinegro sediento de besos y caricias. Habian pasado tres semanas desde la última vez que habián tenido un beso decente. Desde ese último, siempre estaban ocupados, yendo de un lugar a otro, y cuando por fín tenían un momento para ambos, eran interrumpidos por terceros. Se necesitaban, se extrañaban.

-Dios Joong, besas como el cielo.

-Y tu sabes como el cielo cariño.

Decir que eran apasionados quedaba corto. Un poco más, y terminarían sin ropa. Claro que los dos sabían hasta donde llegar... ¿verdad?

-Extrañé tus besos, tus abrazos, tus caricias- decía un Seonghwa despeinado mientras Hongjoong se encargaba de repartir besos por su cuello y acariciar su fina cintura.

-Yo también te extrañé Park. Estos días que solo podía mirarte, y no tocarte me estaban matando. Menos mal que viniste a mi estudio hoy.

-Era una emergencia. Te necesitaba.

Y así, terminaron el día juntos. Lo agradecían inmensamente, por que no podrían volver a hacerlo por mucho tiempo.