Desde niños, Yoongi siempre lo cuidó y protegió de todo, así que cuando este le confiesa sus gustos, Jungkook decide compensarle tantos años de protección, volviéndose su guardaespaldas personal
-Si alguien le pone un puto dedo encima, se lo rompo...
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Yoongi y Jungkook salieron al receso mientras hablaban de trivialidades que ayudaban al menor a ignorar las miradas ajenas, y a Jeon a evitar querer golpearlos por quedarse viendo.
-¡Hey, chicos!-
Ambos se voltearon al oir el grito de Seokjin tras ellos, mientras este se acercaba corriendo.
-Compramos un rulero- Dijo Jungkook ganando una mirada de reproche de su mejor amigo, a lo que respondió alzando sus hombros.
-Como sea- Dijo Seokjin confundido. -Este fin de semana haré una pequeña reunión en mi casa-
-¿Que hace una semana no hiciste una fiesta?-Preguntó Yoongi haciendo a Jungkook reír entre dientes.
-Sí, pero fue por el partido con todo el turno- Dijo rodando los ojos. -Esta vez es solo de tercero-
-¿Todos los cursos?- Preguntó Min.
-Sip- Respondió Kim alzando los hombros. -Tercero A, B y C ¿Ustedes irán?- Preguntó guiñandole el ojo a Yoongi. -Me abandonaron la vez pasada-
-Estuvimos celebrando nuestra luna de miel- Dijo Jungkook mostrandole el anillo de su mano izquierda haciendo que Min lo golpee en las costillas con su codo, y Seokjin ría. -¿Quieres ir?-
