Desde niños, Yoongi siempre lo cuidó y protegió de todo, así que cuando este le confiesa sus gustos, Jungkook decide compensarle tantos años de protección, volviéndose su guardaespaldas personal
-Si alguien le pone un puto dedo encima, se lo rompo...
-¡Yoon!- Llamó Jungkook cuando entró al cuarto del mencionado. -¡¿Me prestas tu ducha?!-
-¡Dame un minuto!- Respondió desde el baño.
Jungkook se quitó la sudadera y la camiseta, sentandose en la cama del menor y quitandose las medias para comenzar a desabotonar su pantalón, cuando del baño salió Yoongi usando unas bragas rosadas y una pequeña y entallada camiseta de tirantes.
-Neceito un favor de tu parte antes de que te duches- Dijo dandole la espalda para buscar entre sus zapatos un par adecuados.
Jungkook trago duro cuando vió el redondo trasero del castaño al agacharse, haciendo más notorio el bulto en su entrepierna.
Yoongi dejó los zapatos a un lado y se acercó a donde guardaba su peluca, poniendosela con cuidado y atención antes de voltearse a ver al azabache.
El mayor tenía una dura erección apresada en sus boxers y su vista fija en su cuerpo casi desnudo dandole la espalda.
-Justo eso era lo que quería- Sonrió acercándose a él.
-Juro que normalmente no me excito con tan poco- Susurró dejando que se suba sobre sus muslos y pase sus manos por sus brazos.
-No sé si creerte- Susurró rozando sus labios. -Por experiencia propia, si lo haces-
-Solo me pasa contigo- Murmuró subiendo sus manos a su trasero. -Me rompiste-
-Estoy dispuesto a hacerme cargo de eso- Rió antes de unir sus labios en un save beso bien correspondido por el mayor.
-¿Que planeas hacer con esto?- Preguntó acercandolo más, clavando su miembro contra el otro y provocando que Min muerda su labio inferior excitado.
-¿Has hecho el sesenta y nueve con un hombre?-
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-Tengo un rato más si quieres- Dijo Jungkook dejando de lado el teléfono para ver a Yoongi besando su vientre hasta llegar a su entrepierna.
