Epilogo

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LUKA

Cuando Amy sale de la sala de juntas siento un dolor en mi pecho que jamas había sentido, ni cuando vi a mi madre con su otra familia, es un dolor que conozco y que jamas habría pensado que volvería a sentir, un corazón roto.

Usar a Amy fue la cosa más estúpida que he hecho, no debí hacerlo como sucedió, el destino te paga el dolor que has causado y yo lo estoy pagando siendo rechazado por la mujer que amo locamente.

Salgo de la sala de juntas y tomo el ascensor, pero en lugar de bajar, subo, debo dejar claro todo con el señor Sting, jamas fue mi intención herir a su hermosa hija y mucho menos robar sus millones, debo hablar antes de irme, debo ganar el juicio contra Lorenzo en una semana, sé que así será, pero hasta entonces, debo arreglar mis relaciones para poder volver.

Llego al piso de Quentin Sting y me siento un poco nervioso, pero aun así, entro cuando me dejan, lo más curioso de todo, es que su secretaria se llama Hanna.

-Hola Luka -dice el señor Sting y me siento frente a él. -¿En que te puedo ayudar?

Respiro y de mis labios sale la verdad, la más agria que he tenido que contar, pero al ver la expresión seria de Quentin Sting siento miedo, pero me repito una y otra vez que debo superarlo como un hombre y termino, le cuento todo, bueno, no todo, pero si las partes importantes que tiene que ver con su hija y el dinero.

-Solo tengo una pregunta muy importante -dice y se levanta. -¿La amas?

¿La amo? ¿Amo a Amy Sting?

-Es imposible no hacerlo -digo viéndolo a los ojos y me doy cuenta que son miel, pero lo iguales a los de su hija. -La amo y ese es el problema, ella dejo claro que no quiere nada más conmigo.

-La entiendo, pero dime, ¿estás dispuesto a luchar por ella?

-Si, he venido a luchar por ella, pero me temo que tengo que ir a Roma, es un asunto legal, ella debía venir conmigo.

-Ahora mismo no me agradas mucho, Luka -dice y se pasea por su oficina. -Pero eres el único con el que he visto realmente feliz a mi hija, si vas a luchar por ella, tienes mi permiso y mi apoyo, pero con una condición.

-La que sea.

-No la vuelvas a herir.

Asiento y salgo de la oficina y edificio Sting, una vez sobre mi moto pienso en todo, no herir a Amy, claro que no, ahora solo quiero recuperarla y hacerla feliz, ella merece ser amada y ser feliz, y seré yo quien lo haga.

Amy, te amo y luchare por ti.

Conduzo a mi casa y termino de preparar mis maletas, no puedo seguir aqui, asi que adelante mi vuelo, entiendo el dolor que cause, pero Amy me ama y sé que al volver de Roma, ella estará mejor y yo podre luchar por ella sin que nada se interponga entre nosotros.

Until You Love MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora