¿Soy una villana?

25_ Guerra por el trono

La hermana de Cedrick Webster, Lucy, ahora estaba bajo el cuidado de Sofía, llevando reposo en cama hace un par de días, siendo cuidada por Lara.

-Le prometo que cuando me recuperé un poco y tenga fuerzas, ayudaré en la casa y no seré un estorbo.- dijo la niña, mirando a Sofía quien sorpresivamente la fue a ver.

La chica, luego de un par de días, por fin había logrado calmarse y ahora la podía ver sin tener ganas de matarla, bueno, ahora se podía contener.

-... ¿Lucy? Tengo que dejarte en claro algo.

La de ojos grises se acercó a la cama de la niña, se agachó levemente con sus brazos cruzados y la miró fijamente a los ojos.

-Quizás no me recuerdes ya que aquel día fue triste para ti, pero yo fui quien informó sobre la muerte de tu to... hermano.- dijo Sofía.

Lucy al oír éso se sorprendió ya que en verdad, no la recordaba, sólo recordaba la mala noticia que le fue dada aquel día en el que su vida comenzó a ser peor de lo que ya era, pero por suerte, ahora estaba mejorando gracias a ésa amable señorita.

Ahora tenía una cama suave donde dormir, un techo sin aberturas donde pueda ingresar viento o agua en los días de lluvia, alimentos todos los días y una sonrisa amable de la señora que la cuidaba, no podía estar más agradecida en ése momento.

-Bueno, la cosa es que yo tomé la responsabilidad de informar sobre su muerte ya que me pareció lo mínimo que podía hacer, después de todo, yo fui quien lo asesino.- exclamó Sofía y la sonrisa de la niña se borró, quedando su rostro pálido.

No era verdad lo que estaba oyendo, una mujer tan amable no podía ser la asesina de su hermano.

-Fue en un duelo, no era necesario que muera, pero yo quise hacerlo y no me arrepiento de haberlo hecho.
Quiero que lo sepas desde ya, porque no habrá jamás una forma de que lo descubras por tu propia cuenta.
Ahora me puedes odiar cada día de tu vida si así deseas, no me importa.- dijo la chica antes de pararse firme, con la mirada inexpresiva, darse media vuelta e irse.

Lara que había estando oyendo todo éso en silencio, miró a la pequeña que tenía el rostro pálido y su cara llena de asombro y dolor, no sabiendo que hacer luego de oír éso.

La persona que ahora le estaba salvando la vida, es la que acabo con la vida de su hermano y dice haberlo hecho de manera intencional y no tener ningún arrepentimiento.

Mientras Sofía se alejaba con la mirada calmada, pronto sintió un gran gritó seguido de un doloroso llanto, no dándole importancia.

Podía vivir tranquilamente toda su vida sin que Lucy descubra la verdad, ya que ella era la única que sabía todo lo que pasó, pero no tenía ganas de guardar tal cosa como un secreto.

Ésa niña podía crecer odiandola hasta la muerte, con el deseo inalcanzable de matarla, pero a ella nunca le importaría, además, no podía pasar tal cosa.

Sofía fruncio levemente el ceño, viendo como Ella recién iba llegando, cansada y algo sucia, mientras bostezaba y abría la puerta de su habitación.

-¿Otra vez estuviste toda la noche, buscando algo sobre ésa?-preguntó la de ojos grises.

La chica bestia que no le había dado atención previamente por el cansancio, la miró con sorpresa y luego fruncio el ceño.

-Se llama Naomi, es mi amiga y si, estuve buscando información sobre ella toda la noche otra vez.- exclamó Ella, algo molesta por llevar varias noches en ésa búsqueda, sin éxito.

-No te impido que lo hagas pero no te sobreesfuerces, necesitas cuidar de ti.- dijo la chica.

Ella la miró con sorpresa y luego agachó la mirada.