Parte 43

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|Tom|

"Ni siquiera preguntaste si quisiera irme" Sus palabras solo resonaban por mi cabeza.

Tomé la carta en mis manos como si esperara que hablara por si sola y me dijera que debía hacer. Me levanté de la cama y me senté en mi escritorio junto a mi computadora.

Abrí la pantalla y comencé a redactarle un e-mail a Clark Mac-Millan, aunque exactamente no sabía que escribir. No pude pasar de tres renglones diciendo que agradecía su oportunidad.

Me recosté en la silla reclinable de mi escritorio, me crucé de brazos y cerré los ojos. ¿Por qué me costaba tanto decirle que si?. Era una decisión mia y solo mia.

La actuación es mi vida, pero también lo es ella, ahora.

Me quedé en un tipo de estado somnoliento. Luego, escuché unos golpes en mi ventana. Abrí los ojos y me levanté para acercarme.

________ estaba agachada en el techo recostada al marco de la ventana. Fruncí mi ceño y la miré con confusión.

—¿Quieres abrir ya? Está helando aqui afuera — Le quité el seguro a la ventana y la abrí.

—¿Qué estas haciendo aqui? — pregunté ya una vez estaba adentro

—¿No es obvio? Quiero hablar contigo

—Tal vez deberiamos hablar de eso otro dia cuando estemos más...

—No, quiero hablar ahora. — interrumpió — No haré como tu y esperaré dias para hablar y solucionar las cosas

—Yo no me escondo de ti, así es facil — ella me miró ofendida pero luego soltó una risita. Algo que me hizo reír también. — No hablaremos de eso ahora, solo quiero hablar sobre lo que piensas hacer.

—¿Qué crees que pienso hacer?

—No lo sé. — ella giró su vista a mi computador y luego me miró de nuevo — Tom no quiero detenerte. Si sentiste que estaba dándote a elegir entre lo que amas y yo, te pido perdón, no era mi intención. 

—Está bien, creo que es algo que ni yo mismo puedo definir. — me senté en la cama con pesadez

—Debo admitir que si me tomó por sorpresa. — se sentó a mi lado

—También a mi

Hubo un silencio un tanto incómodo.

—Tom, debes tomarlo. Tu mismo lo dijiste, esta podría ser tu única oportunidad y para cuando te gradues la vas a necesitar. Es un paso muy grande y no podría permitir que no lo aprovecharas por mi culpa.

—Si, pero lo que tu dijiste tambien es verdad, ¿qué pasará con nosotros? No creo estar listo para esa conversación.

—Bueno, yo seguiré aquí, por lo menos hasta la graduación. Sabes donde encontrarme.

—Tu sabes muy bien que no me refiero a eso. Tu tampoco te referiste a eso cuando lo preguntaste — ella guardó silencio y bajó la mirada a sus manos. — No es como que podamos darle una pausa y simplemente regresar cada vez que venga.

Otro silencio.

—_________, yo no quise insinuar que debías dejarlo todo por ir detrás de mi. Pero, fue lo mejor que se me ocurrió, no quiero estar lejos de ti. Pero tampoco podemos hacernos esto con el futuro del otro.

—Hay que esperar. Todo a su paso.

—No podré vivir con esta incertidumbre. Quiero saber si te tendré a mi lado, no importa dónde esté.

—¿Me amas lo suficiente para seguir de esa forma? — la miré fijamente, ella solo seguía espectante a lo que pudiera decir.

—Por supuesto — sonrió

—Yo tambien. Y si tu te lo tomarás en serio, yo puedo esperarte. Es decir, no es como si no volviera a verte, existen las video llamadas. Pero, hablo muy en serio cuando digo que debemos tomarnos esto en serio, ¿tu me esperarías?

—Toda mi vida. — ella volvió a sonreír y se acercó para besarme. — Pero, quiero que pienses en eso, ¿si? Es una propuesta. Tu, yo, Nueva York. Tienes un año y medio para pensar.

Ella esbozó una sonrisa, casi como un suspiro cerrando sus ojos.

Tomé su cuello y la besé con fuerza.

—Hijo, ¿que... — nos separamos y nos giramos de inmediato a la puerta, dónde papá nos miraba con un ceja alzada muy seriamente.

—Dom, te juro que no íbamos a hacer nada malo

—Solo, sal de aquí — papá señaló con su dedo pulgar hacia afuera de la habitación por arriba de su hombro.

Ella se levantó de la cama y salió de inmediato, mientras papá la seguía con la mirada. 

—Papá no quiero empezar un drama — comenté antes de que pudiera decir cualquier otra cosa.

—Mis reglas son muy claras, Thomas

—Lo sé, no es lo que crees

—¿Entonces que es? Explícamelo

—Me voy, papá — el cambió su expresión de enojado a confundido — Me salió una oportunidad para actuar en un teatro de Nueva York después de la graduación.

—Hijo, eso es asombroso — papá se acercó para abrazarme — ¿Por qué no nos dijiste antes?

—Me enteré hace unas horas. Debo responder rápido o sino podría perderla.

—¿Y ________ como lo tomó? Tom yo te advertí que estas cosas podrían pasar. No puedes desaprovec...

—Papá — interrumpí — Tranquilo, todo está bien. Ella lo entiende y todo está bien — papá relajó su rostro y cerró los ojos en suspiro.

—Bien, entonces te dejaré con tus asuntos. Oh, y debemos ir a celebrar.

|____|

Entré a mi habitación apresuradamente y cerré la puerta. Esperaba que esto no se convirtiera en un problema, ya tenía muchos. Decirle a Tom que estaba bien irse había sido lo más valiente que había podido hacer.

Me dolía el hecho de que no lo vería en mucho tiempo y de que muchas cosas podrían pasar en ese transcurso de tiempo.

En cierta forma su idea de irme a Nueva York junto a él sonaba atractiva, precipitada pero atractiva.

Si bien, la vida es una montaña rusa.

...

A prueba de amor (Tom Holland y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora