A prueba de amor (Tom Holland y tú)

Parte 44

|Meses después|

—¿Ya viene?

—¡Shhh!

—¡Pads! Estás pisándome

—Todos silencio, ya viene. — todos nos quedamos callados y comenzamos a ir a nuestrar posiciones — A la cuenta de tres. Uno...

—¡Sorpresa! — todos salimos de detrás de sofá apenas escuchamos al puerta cerrarse.

Tom se sobresaltó gracias al grito que pegamos todos. Siempre asustadizo aunque no lo quisiera aceptar. 

—¡Subiré esto a todos lados! Mi hermano y su grito de niña — comentó Harry sosteniendo su celular en el aire, mientras Sam colocaba "Party in the U.S.A" de Miley Cyrus.

—¡Harry! — lo golpeé en el hombro

Dominic y May entraron después de él con una sonrisa en sus rostros. Dominic cargaba el diploma de Tom muy orgulloso, mientras Tom vestía un traje muy elegante.

—¡Wow! Esto se ve increíble — Todos fuimos a abrazarlo — ¿Qué esa no es la bandera de Liberia? — señaló la gran bandera que teníamos como decoración en la casa.

—Si, al parecer Sam no sabe que la bandera Americana tiene cincuenta estrellas en lugar de una. Pero era tarde para cambiarla así que...

—Voy a estudiar cocina, no banderología

—Y con razón

Todos pasamos a la sala mientras May cortaba el gran pastel con el estampado de la bandera de Estados Unidos y la estatua de la libertad.

Todos hablábamos de cualquier cosa, los amigos de Tom también estaban allí, así que era un ambiente muy agradable.

Por todo lo que quedaba de noche, tratamos de hacerla eterna.

Por supuesto y como era de esperarse, Tom había aceptado la proposición de Mac-Millan, quién le había pedido que a penas pasara su graduación se fuera de inmediato a Nueva York.

Tom y yo habíamos aclarado nuestra situación, estaríamos juntos a pesar de la distancia y una vez me graduara, tomaríamos decisiones más radicales sobre nuestro futuro.

Harry había decidido contarle a Dom sobre la academia de Arte y Fotografía en España, al principio no estaba muy convencido, pero gracias al esfuerzo de todos, logramos convencerlo. Así que si, Tom no iba a ser el único en partir.

Sam había decidido estudiar cocina en el Chef Academy of London. En cierta forma, la partida de su gemelo no le resultaba tan dolorosa, ya que ahora dispondría de un cuarto solo para él.

Hombres.

Por otra parte estaba yo, intentando pasar el mayor tiempo posible con Tom antes de su partida. Aunque a veces no resultara como lo esperamos.

La mujer del motel de aquel semáforo se había memorizado nuestros nombres ya que íbamos más frecuente que nunca.

¿Cómo no? Pasaría mucho tiempo para la próxima vez que estuvieramos juntos.

También solíamos ir mucho al mirador al que Tom me había llevado cuando llegué a Londres. Si bien eran los últimos días cerca de Tom, los estábamos viviendo al máximo.

|Tom|

—¿Ya tienes todo listo? — preguntó ________ recostada en el marco de la puerta. Yo estaba terminando de empacar lo último que me quedara por empacar.

El vuelo saldría en varias horas.

—Si, eso creo — la miré con una sonrisa — ¿No deberías haberte ido ya? — pregunté mirando el reloj de mi muñeca

—La clase se canceló — levanté una ceja — Yo la cancelé — se encogió de hombros, solté una carcajada mientras negaba con mi cabeza.

Ella se acercó a mi me tomó por el cuello para besarme. Sujeté su cintura y la besé de vuelta. Un beso suave y lento. Dios, como la extrañaría.

—May y Dominic se fueron al trabajo, Paddy y David a la escuela y con los veinte dólares que acabo de darles a Harry y Sam, no estarán en la casa por un rato — comenzó a besar mi cuello.

—¿Veinte dólares? — pregunté divertido

—A cada uno — comenzó a desabotonar mi camisa mientras daba pequeños besos en mi pecho, a medida que soltaba un botón.

—¿Entonces no queda nadie en casa?

—No. Solo Tessa, pero no creo que a ella le importe — me sonrió traviesamente

—Más me vale aprovechar — ella me empujó a la cama y se sentó encima de mi.

Definitivamente, sería la mejor despedida de todas.

...

—¿Pasaporte?

—Listo

—¿Boleto de avión?

—Listo

—¿Male...

—¿May? — ella levantó su vista a mi y yo le sonreí — Tengo todo, no te preocupes — Ella me devolvió la sonrisa reconfortante y me abrazó.

Todos se fueron a dejarme en el aeropuerto. El auto solo se escuchaba un murmullo inentendible de todos hablando al mismo tiempo.

Por última vez, ________ iba sentada en mi piernas. La tenía abrazada por la cintura mientras ella estaba recostada en mi pecho, hablando de cualquier cosa con todos.

Debo admitir que sentía nostalgia de dejarlo a todos.

El viento golpeaba mi rostro, este era uno de esos momentos que quisieras que nunca se acabaran.

Al final llegamos al aeropuerto y la hora de abordar mi avión llegó. Los abracé a todos nuevamente y me despedí. La besé con todas las fuerzas de mis labios y la pasión de mi corazón 

—Tom, te quiero — dijo casi en susurro en mi oido, aún la tenía abrazada con fuerza.

—Te amo — solté. Nos separamos y ella me miró sorprendida pero luego sonrió y se acercó para besarme suavemente.

Me despedí de todos nuevamente y entré por el pasillo.

A comenzar una nueva vida.