My Wattpad Love "Growing Up" (Finales Alternativos)

• 1 5 • Vuelve a Casa

De camino de vuelta a la motocicleta cuando
la lluvia ya se había calmado ambos nos encontrábamos más callados que antes.
Shane me dijo que iría un momento al baño,
y cuando volvió en su mano habían dos cafés pequeños con nuestros nombres escritos en ellos.

Vi como salía de la tienda. Era casi de noche, el cielo casi se veía gris con la boca de la noche a sus pies. Su cabello estaba despeinado, con el cuerpo alto y caminando con pasos firmes de sus botas negras y vaqueros ajustados.

Me tendió uno de los cafés.

Minion.

Luego me fijé en el suyo.

Idiopido.

Sonreí sin poder evitarlo, pero sacudí mi cabeza.

—Deja de pagarme cosas por hoy. —luego, tomando un sorbo me di cuenta del tiempo que ya llevábamos fuera, y de que probablemente ya era hora de regresar y enfrentar la realidad— Vamos a casa, ¿vale?

Asintió simplemente mientras nos tomamos el café en silencio. Me preguntaba por qué estaba tan callado, aunque si era sincera no era algo que me incomodaba. Al contrario, se sentía bien. Nunca pensé que el silencio con Shane podría existir, pero aquí estaba.

Cuando llegamos a casa, vi que se detenía en frente de mi jardín. El viaje había sido pacifico, mientras que en mi mente me dedicaba a pensar en todo y nada.

¿No era extraña esa sensación? Tienes la obligación de pensar en muchas cosas, pero cuando cierras los ojos es cuando comienzas a darte cuenta de que solo quieres respirar el momento sin importar el después.

—¿Jules? —la voz de Shane me despertó, y me di cuenta de que tenía los ojos cerrados. Aún abrazada a su espalda, mi cabeza estaba recostada suavemente sobre el calor que me brindaba su cuerpo.

Mis manos estaban aferradas a su regazo.

Aclaré mi garganta, —Perdona, —me alejé lentamente— Te dije que estaba cansada.

—No te disculpes, te cargaría si hace falta.
No pesas nada.

Hice una mueca. —No, gracias. —me bajé de su moto con un salto sintiéndome como ganas de llegar a casa y tener una conversación con mi manta.

—Jules

Me giré, y alcé una ceja con curiosidad. Parecía un poco incómodo, aunque más que eso, pude ver una clase de conflicto en el rostro de Shane. Cosa que no había visto en toda la tarde.

Cuando habló, parecía cauteloso. Mirándome fijamente.

—Sé que no es mi lugar, lo he aprendido, créeme —me advirtió, y me tensé. Sus ojos me seguían mirando, con una mano sobre las llaves de su moto. De repente hizo una pausa y se acercó a mi luego de apagar el motor. Tomó mi brazo con suavidad, apenas un roce— Independientemente de cuánto puedas amar a alguien escucha lo que tienes que decirte a ti misma. Porque a veces no concuerdan ambas cosas, y eso esta bien — se alejó.

Parpadeé, observando por segunda vez su rostro bronceado. Me vino de repente de nuevo esa ola de atractivo que me había golpeado esta tarde cuando lo vi en la puerta de mi universidad.

Pero, lo que de verdad me golpeo fueron el peso de sus palabras y el tiempo que habíamos pasado esta tarde.

—No tienes que preocuparte por mi —le dije recordando sus palabras.