Destinos Alterados

31.- La tormenta que se avecina

3 de junio de 1943 - Hogwarts

Era una política del Ministerio de Magia desde hace mucho tiempo que los profesores estuvieran prohibidos en el área donde los estudiantes tomaban sus TIMOS y EXTASIS. El Ministerio consideró que el desempeño de los estudiantes se vería afectado por el estrés adicional de su presencia. Por lo tanto, no se permitió que ningún profesor estuviera a la vista del área de pruebas. Sin embargo, por una larga tradición, los profesores cumplieron con la letra de la política pero no con el espíritu.

Era un hermoso día de primavera en las Tierras Altas de Escocia. Los supervisores del Ministerio habían decidido trasladar la práctica de Defensa Contra las Artes Oscuras al exterior. Actualmente, los estudiantes de Ravenclaw y Gryffindor se estaban sometiendo a sus exámenes.

– Creo que la joven Srta. Bones logrará una O Defensa, profesora Merrythought –

El profesor al que se dirigía sonrió con aire de suficiencia.

– Creo que tienes razón, Filius. Creo que ya calificaría para una 'E' en su EXTASIS. Solo el Sr. Evans la supera en defensa práctica – La bruja se volvió hacia el tercer y último profesor que estaba viendo la práctica de Defensa Contra las Artes Oscuras. – Me pregunto por qué sería eso. ¿No es así, James? –

James sonrió ante su comentario, pero se negó a dejarse engañar.

– La Sra. Bones se mueve muy bien para esquivar hechizos. Creo que le irá bien en el entrenamiento de Auror –

Los tres profesores estaban parados bajo un gran árbol a la sombra observando a los estudiantes trabajando en su práctica de Defensa. Los encantos de Not-Me-Not impidieron que los estudiantes y supervisores se dieran cuenta de los observadores adicionales.

El profesor de Defensa se volvió hacia James.

– Debo admitir James, estaba preocupado cuando Albus propuso la creación de una clase de Duelo, pero me permitió concentrarme en Criaturas Oscuras y otros temas. Creo que esta es la clase de quinto año más preparada que he visto –

James le sonrió a la vieja bruja.

– Gracias, Galatea, pero realmente... – El rostro de James repentinamente perdió todo su color cuando una expresión de angustia cruzó su rostro. Sus manos volaron hasta su frente mientras caía de rodillas en un gemido atormentado.

Los otros dos profesores vieron con horror como James se dobló repentinamente y la sangre pareció brotar de entre sus manos.

– James, ¿estás bien? ¿Cuál es el problema? – Preguntaron los profesores preocupados.

James ignoró las preguntas para ponerse de pie. Un chorro de sangre todavía corría desde su cicatriz a lo largo de un lado de su cara. El dolor todavía se podía leer en sus ojos mientras miraba hacia Hogwarts.

– ¡Tweaky! –

El elfo doméstico apareció con un pequeño estallido.

– ¿El profesor maestro Evans llamó a Tweaky? –

Antes de que el elfo terminara su pregunta, James le ladró.

– ¡Tom está en problemas! Encuéntrelo. ¡Llévelo a mi oficina o al ala del hospital si está herido! –

Una expresión de miedo cruzó el rostro de Tweaky.

– ¡Tweaky se va! – Con un pop, el elfo se fue.

– James, ¿qué está pasando? – Preguntó Flitwick.

– Avise al director y a Albus, alguien está detrás de Tom – James se volvió y empezó a huir de los otros profesores. Después de tres pasos, el mago se fue, reemplazado por un gran lobo que corrió hacia el castillo.