CONSANGUINIDAD

1.1K 174 18
                                    

CAPÍTULO ONCE

Consanguinidad,

Yune abrió la puerta de su casa, entrando al sitio en silencio. Las luces se encendieron sin que ella tocara el interruptor, sabiendo de inmediato que no estaba sola.

— ¿En dónde estuviste todo el día? — Preguntó Ran, buscando molestar a su hermana. Yune se giró hacia el lado contrario, evitando que el chico observara su rostro o nudillos destrozados. — Yune ¿Vas a ignorarme?

— Déjame en paz.

Ran se sorprendió, girando su rostro para mirar a Rindo, quien se encontraba sentado en el sofá, observando todo, el chico de lentes solo se encogió de hombros.

Ran bajó la mirada, frunciendo su ceño al notar unas pequeñas manchas rojizas en el suelo. Agachándose, Ran de inmediato supo lo que aquello era.

— Rindo. — El mencionado asintió, colocándose de pie y caminando tras su hermano mayor hasta la habitación de la menor de los tres. — Yune, déjanos entrar.

— No estoy de humor, Ran.

— Botaré la puerta si no abres en tres... Dos... — La puerta se abrió. Ambos hermanos entraron al sitio, notando a Yune de espaldas, observando como parecía vendar su mano. — Hermana ¿Qué sucedió?

La peligris finalmente se giró, enfrentando a sus dos hermanos. Las expresiones preocupadas de ambos pasaron a ser molestas, era por esa razón que Yune intentó evitarles, conocía perfectamente la clase de hermanos que tenía.

— No es nada, solo peleé por diversión con Draken.

— Entonces ¿Por qué estuviste llorando? — Rindo se acercó a Yune, tomando su mentón para observar su rostro.

Su piel no estaba destrozada como Takemichi después de una pelea, pero podían notarse los moretones en sus pómulos y su labio roto manchado con sangre seca. Rindo soltó su mentón para tomar su mano, la cual estaba a medio vendar. Quitando los vendajes, el mayor notó los nudillos rotos y sangrantes de su hermana.

— Esto no fue por pelear con Draken ¿Cierto? — La oji-violeta bajó la mirada ¿Cómo les podía explicar a ambos chicos todo? Desde su rompimiento con Baji, hasta su encuentro de hoy con el mencionado. — Siéntate.

Yune hizo lo que ordenó su hermano, sentándose en la cama. Rindo se retiró por unos segundos de la habitación, al volver traía consigo una pequeña caja, de la cual sacó alcohol, cremas y vendajes.

— Puedo hacerlo sola, Rindo. — El chico no respondió. Ran se acercó a los dos, sentándose al lado de Yune, observándole por unos segundos.

— ¿Nos contarás qué pasó aparte de pelear con Draken? — Hubo un corto silencio entre los tres.

— Yo... — Yune apretó sus labios, bajando la mirada en un intento de retener las lágrimas que se acumulaban rápidamente en sus ojos, a veces le era difícil ocultar lo que realmente sentía frente a sus hermanos, especialmente cuando ponían sus rostros de "hermano mayor preocupado".

— Mi pequeña... — Ran abrazó a la chica, quien dejó escapar las lágrimas finalmente.

— Keisuke decidió traicionar a la Toman... Y... Yo quise detenerlo, pero él dijo que lo nuestro se acabó y que ya no estaba interesado en alguien como yo... — Yune se aferró a su hermano, quien no dudó en abrazarle con más fuerza. — Ran... Realmente lo quería ¿Sabes? — Rindo terminó de vendar la mano de su hermana, siguiendo con su rostro.

Con delicadeza, el hermano de en medio limpió las lágrimas regadas de su hermana, mirándole a los ojos.

— ¿Qué más? — Yune sorbió la nariz.

𝑶𝒖𝒓 𝒎𝒆𝒎𝒐𝒓𝒊𝒆𝒔 [𝑩𝒂𝒋𝒊 𝑲𝒆𝒊𝒔𝒖𝒌𝒆 𝒙 𝑶𝒄]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora