Amigos

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-Entonces ¿Cuál fue el milagro que te trajo ante mi humilde presencia? Para ser sincero tenía una cita programada contigo.-

-¿En serio?-

-En tres meses, tu agenda está casi tan llena como la mía. Le pedí a tu secretario la cita hace dos meses.-

-Oh.- Tom bebió un largo sorbo del "té negro" que Harry había preparado, demasiado amargo pero en la boca de Riddle era un sorbo de agua cristalina luego del desierto. -Lo siento, si hubiera visto tu nombre en la lista habríamos hablado el mismo día.-

-Tengo que usar un nombre diferente si no voy con Hermione, cosas del oficio.-

-¿Cómo te llamas?-

-¿Cómo crees que me llamo?-

-Apostaré por el joven Hedwig, en alguna parte pensé haber escuchado ese nombre.- Harry sonrió, sus músculos estaban tensos, casi lo suficiente para causar calambres pero solo evitaban que se vislumbrara el temblar de su cuerpo. Su mente estaba tranquila, había trabajado mucho en superar aquellos traumas con otros peores.

-Correcto.-

-Obviamente, te conozco Harry.- Mencionó Tom dejando su taza en la mesa de centro, acercándose a Harry con lentitud. -Mejor que cualquier otra persona.-

-Lo sé...- Harry suspiró y bebió por primera vez en la tarde un sorbo de su té, amargo y dulce. Tal como Riddle. -Entonces, ¿Qué puedo hacer por ti? Ya intenté como diez veces hablar con la policía para quitar tus restricciones pero no pude hacer mucho.-

-No te preocupes por los pequeños detalles Harry, sé que haz hecho todo lo posible. Vengo porque traigo buenas noticias.- El estómago de Harry se retorció, sus últimos tres meses de libertad estaban por desaparecer. Se obligó a mantener la compostura, bebió un poco más de té y calmó su corazón, de nada serviría resistirse.

-¿Buenas noticias?-

-Exacto. Recibí un reporte de unos investigadores, de alguna manera Remus y Sirius están en los laboratorios experimentales de congelación.- El rostro de Harry se contrajo, sus ojos se llenaron de lágrimas y sus labios comenzaron a temblar al igual que sus manos. Justo como antes.

-¿Estás seguro de que...?-

-Yo mismo fui a confirmarlo. Son ellos.- La taza rebotó tres veces contra el suelo antes de romperse en infinitos fragmentos, Harry respiró profundo, cubrió su rostro con ambas manos y se dejó caer de lado, justo donde Tom estaba. -¿Estas bien?-

-...Si...- Harry se hizo pequeño y como si le atacara un recuerdo se estremeció, levantó el rostro con desesperación, buscando los ojos de Tom. -¡¿Ellos están bien?!-

Tom se mantuvo en silencio mientras abrazaba el cuerpo de Harry, lo recordaba más grande, más pesado... Más Harry.

-No les falta nada, solo que siguen inconscientes... Todavía no puedo interferir en los negocios de preservación vital.- En el suelo brillaban pequeñas gotas, todas caían sin arrepentimientos, sin esperanzas.

-¿Qué tengo que hacer? Si necesitan sangre les daré toda la que tenga, tengo un bonito rostro y puedo grabar porno. Haré cualquier cosa Tom, cualquier cosa para que ellos despierten y sean libres.-

-Harry, sabes que no te dejaría hacer tal cosa, solo quédate a mi lado y todo se resolverá a su tiempo-

-¡No quiero que sea a su tiempo, los quiero ahora!- Exclamó Harry con su voz cortada, levantó el rostro y jaló de la ropa a Tom para verlo a los ojos. -He estado más de mil años buscándolos, los necesito Tom, ahora que sé donde están ¿Por qué me impides encontrarlos? ¿Acaso ya no te sirvo? ¿He perdido mi valor? ¿Otra vez seré desechado?-

-Harry... Cálmate ¿Si? Vamos a encontrarlos juntos, solo necesito tres días... Después podrás estar con tu familia todo el tiempo que quieras, hay una cabaña al norte de Italia muy linda, la compraré para ustedes.-

-Nosotros Tom, nosotros.- Riddle sonrió satisfecho, todo había salido tal como le habían dicho; podía presumir que él era quien más conocía a Harry pero era mentira, mientras los Malfoy estuvieran vivos él siempre estaría en segundo lugar, por eso era mejor tenerlos como aliados, tal como el joven Draco.

Juntos hablaron toda la noche, Harry llamó a Hermione para avisarle que Tom estaba de "visita", llamó a Cedric para despedirse, dejó un mensaje en la empresa y habló con Blaise y Pansy; lloró amargura mientras dejaba su ultimo mensaje a Draco y escribió poesía en las paredes. Al llegar Tom con la cena comieron juntos, vieron películas y actualizaron sus vidas.

Harry durmió profundamente, vio todo tipo de sueños, algunos considerados pesadillas, otros no tanto. Al despertar Harry se estiró, intentó levantarse pero no pudo, intentó abrir sus ojos pero no pudo, intentó gritar pero no pudo. Se mantuvo calmado, conocía la sensación de ser monitoreado, conocía la picazón de los electrodos en su cuerpo, conocía el olor de ese lugar.

El laboratorio de los Riddle.





Chaaaaan, por fin xd

Lamento la tardanza y lo corto... Los siguientes capítulos también serán más cortos que los primeros peeero espero poder escribirlos más rápido. Espero les guste.
Cualquier sugerencia, duda o critica los leo en los comentarios~

Palabras que no existen [Darry/Harco] FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora