Palabras que no existen [Darry/Harco] Finalizada

Ceder

Por fin era viernes, un viernes que muchos habían esperado, Harry no. Sabía que estaba invitado a beber, y casi siempre que acudía a las reuniones de trabajo para beber lo intentaban drogar, o le metían mano; además estaba peleado con Draco, su única barrera protectora anti-pervertidos.

-...Harry-

-No iré-

-No había dicho nada... Aún-

-Neville, no quiero ir. Y no iré- Harry se levantó de su silla, rodeó el escritorio y pasó por el lado de Neville hacia el organizador que tenía, buscaba un folder azul y grande.

-Pero nosotros estaremos ahí, además nuestros empleados son diferentes... Ellos no harían tal cosa.- Neville estaba sentado en el sofá de la oficina con una tarjeta en las manos, era la tarjeta de Hermione, el agente asignado a Harry para poder visitar tiendas de manera legal. -Además estaría Hermione, ella no permitiría que algo así pasará-

-Neville, si necesito romperme un brazo para no ir lo haré- Respondió Harry sosteniendo la mirada con Neville.-Sabes muy bien lo tolerante que soy al dolor, romperme un brazo será pan comido-

-Hagamos un trato- Propuso Neville.

-No iré, bajo ninguna circunstancia beberé en una reunión empresarial y mucho menos soportaré borrachos gays con delirios de hetero. No otra vez- Harry habló con firmeza, nada lo haría cambiar de opinión.

-Es tu decisión no ir y no haré nada respecto a eso, pero me ofende lo que piensas de mis chicos. Estoy seguro que, con o sin Malfoy, no harían las cosas que en las otras empresas te hicieron.- Neville podía ser muchas cosas, menos estúpido. En su cabeza ya se encontraba la forma de hacer que Harry fuera a las reuniones, a la de ese día no, pero a las futuras de seguro iría.

-¿Cuál es tu trato?- Preguntó Harry sentándose en la silla frente a su escritorio con los documentos que había estado buscando en la mano izquierda.

-Se muy bien que eres seco con las personas que no conoces.- Harry inclinó un poco la cabeza hacia la derecha, no sabía a dónde quería llegar Neville.-Solo actúa como lo haces con nosotros, se amigable, no evites tanto el contacto y, en especial, no los trates de "usted". Es doloroso escucharlo.-

-¿Y qué gano yo de este trato? No es por presumir, pero no necesito nada en particular y puedo comprar lo que quiero.-

-Te daré tres piezas de mi colección de serpientes talladas- Dijo Neville con sufrimiento en su rostro, esa colección le había costado el alma, los artesanos no son fáciles de hablar y mucho menos si se trata de reliquias familiares; además eran seis piezas cada una diferente a la otra, únicas en el mundo.

-¿Las puedo elegir?-

-...Harry, no te daré mi clarión albina, tuve que beber babosas machacadas por ella-

-Bien, ¿Pero puedo escoger de las demás?- Harry quería con desesperación un ejemplar de boa albina, la clarión era una cosa pero las boas, ellas tenían un lugar especial en el corazón lastimado de Potter.

-Hecho, comienza hoy. Aprovecha, desde el lunes que llegaste no has salido de la oficina, y recibir domicilios no cuenta como salir.- Neville sabía muy bien que Harry había peleado con Draco, el martes siguiente no asistió a su reunión de bienvenida, sólo salió para firmar las actas de los formularios, ya habían llegado todos las "herramientas" que había solicitado. A Neville le parecía un poco raro que pidiera un sleeping, pero no dijo nada. El miércoles Harry le envió un correo con el reporte referente a la integración de estudiantes que habían hablado, y el jueves fue un desastre; cuando intentó salir influenciado por Theodore vio a Draco esperando en el pasillo y se devolvió.