Las esponjosas nubes cubrían el cielo celeste de la tarde, bloqueando lo suficiente la luz y los rayos del sol, la brisa fresca propiciando un momento perfecto para realizar actividades físicas al día libre, o en el caso de los estudiantes, realizar las actividades de los clubes deportivos como entrenar el día restante que les quedaba, aprovechando los últimos momentos finales que tenían antes de la tan esperada fecha de la competencia interescolar.
Estaban ahora mismo, tanto los chicos como las chicas pertenecientes al equipo de atletismo, en un pequeño descanso, tomando agua con los músculos palpitando por el cansancio y secándose algunos individuos el sudor del cuerpo con toallas pequeñas que traían consigo mientras el profesor iba por las vallas y objetos que se encontraban en la pista para recogerlos después de las horas de extenuante ejercicio en que las habían ocupado, otros más, como Zenitsu por ejemplo, estaban sentados en las gradas o medio recostados sobre la madera al recuperar el aliento porque el entrenamiento impartido por Tomioka Giyuu era intenso, pero se podía lograr, además de que el profesor observaba el estado de sus alumnos para darles descansos cuando lo necesitaran.
"¡¿POR QUE DEMONIOS ACEPTÉ ENTRAR A ESTO?!"
Pero bueno...Zenitsu era Zenitsu después de todo, y si alguien se iba a quejar por entrar voluntariamente a un club y entrenar dos horas en promedio al día durante tres días a la semana, era él.
Tanjirou soltó un bufido divertido volteando a su izquierda para ver a su dramático amigo, dejando de tomar agua para reír divertido y negar con la cabeza en su dirección.
"¡Es en serio Tanjirou!" reiteró el rubio lleno de indignación al ver al pelirrojo reír mientras él sentía como si sus extremidades se fueran a caer "¡Me duele todo el cuerpo!"
"Estas exagerando" Él también estaba algo cansado, pero sus extremidades ya se estaban recuperando por el descanso otorgado por su pareja y, bueno, ya estaba básicamente perfectamente acostumbrado a este punto.
"¡No, no lo estoy!" gritó, los demás miembros del equipo ya acostumbrados para este punto a sus quejas, ignorando los reclamos al seguir charlando unos entre si, un par más riéndose de la escena "¡EN DEFINITIVA NO LO ESTOY!"
Kamado suspiró, negando suavemente con la cabeza. Tenia que admitir que sus arrebatos habían disminuido en cantidad a la semana, pero su amigo iba a ser el mismo después de todo, y eso incluía quejarse de forma dramática de las cosas de vez en cuando. Simplemente suspiró dispuesto a darle la respuesta a su amigo por solo Dios sabia que numero de ocasión.
"Querías ver como le iba a Nezuko en el inter, pero no quisiste entrar a baile porque tienes dos pies izquierdos-" empezó a recordarle de sus propias palabras y también de lo que todos sabían.
"¡Oye!" intentó interrumpirlo, pero Tanjirou lo ignoró y continuó como si no hubiera abierto la boca en primer lugar.
"Tampoco querías entrar a básquet porque estaba Inosuke allí y en tus palabras casi todos son unos titanes, para lo mismo con vóley"
"¡No es mi culpa ser el más bajo de los tres!" se quejó, maldiciendo a la genética que le habían heredado sus progenitores que no conocía en lo absoluto y no le importaba conocer. Hasta Inosuke era más alto que él, y el Kamado de pendientes hanafuda ni se diga.
"...Y como eres rápido, pero no quisiste tampoco entrar a futbol ni a tenis, te aconsejé atletismo y aceptaste....eso fue hace como 5 meses" terminó de hablar sin importarle como unos compañeros a su lados soltaban unas pequeñas carcajadas mal ocultadas y tomó otro pequeño sorbo de agua de su botella.
Su rubio y cansado mejor amigo pareció desinflarse sobre la madera y las mochilas que había acomodado convenientemente como almohadas.
"Uggh..."
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"CONTRA LAS REGLAS" (GIYUUTAN)
RomanceUna relación de alumno-profesor nunca era aceptada, la diferencia de edad y la moralidad de las personas se aseguraba de ello, pero habían ciertos individuos que estaban dispuestos a ignorar estos estatus que la sociedad había creado, habían ciertos...