Una Black y Un Malfoy || Draco Malfoy

Capitulo veintiséis

Olivia Black

Esa mañana del 25 de diciembre, frote mis ojos acostumbrándome a la luz que salía de la ventana.

Me pare de la cama quedándome sentada mientras me acostumbraba, ví la cama de Fred para después ver la George, dónde aún seguían dormidos. Debía ser muy temprano para eso, pero no lo suficiente para que el sol ya saliera.

Me levanté con cuidado intentado no hacer crujir el suelo, coloque bien mis calcetines que me llegaban hasta los tobillos y salí de la habitación hacia las escaleras, baje cada piso hasta llegar a la sala. Todo estaba como anoche, a excepción de unas tasas de café sobre el fregadero.

Tome una taza limpia y hice un café con leche, camine hasta la sala sentándome y tomando un sorbo de mi café. El silencio era prominente en la habitación hasta que fue interrumpido por el crujido de las escaleras, ví como un cabello color azabache despeinado bajaba. Era Harry. Al darse cuenta de mi presencia, tomo una taza, la relleno de jugo y se sentó en un sillón frente a mi.

Había un silencio incómodo, solo se escuchaba cuando bebíamos un sorbo y suspirábamos.

-¿Por qué me odias?-pregunto Harry sacándome de mis pensamientos.

-Tu sabes bien que no lo hago-dije dejando la taza sobre la mesita del centro.

-¿Entonces que fue lo de ayer?-cuestiono imitando mi acción.

-Fue un error, yo no quería decir nada de eso, supongo que exploté.

-Lo lamento-dijo.

-¿Que se supone que lamentas?

-Que te hayas sentido así y que lo hayas pasado sola. Nadie lo merece, y también lamento lo que pasó con tu brazo.

-Lo del brazo es algo superficial, sanará-Harry asintió- mira Harry, son momentos difíciles dónde no puedes confiar en nadie. Entiendo muy bien tu punto, ahora lo primordial es que estés a salvó, eres el único que puede terminar con todo esto. Lo único que me queda por hacer es cuídate.

-Pero eso no implica que debes descuidarte tu.

-Harry, te cuido por qué mi padre ya no está para hacerlo, se lo debo. Además, no eres tan detestable cuando estás de buen humor-dije burlona, Harry soltó una risa.

-Creo que es buen momento para decir, feliz navidad.

-Feliz navidad Harry- poco a poco, los weasley empezaron a bajar, tenía entendido que Remus y Tonks se habían ido en la noche.

Todos parecían haber olvidó lo que había pasado la noche anterior, ahora solo queríamos una navidad tranquila y buena.

-Bueno, es hora de abrir los regalos-anuncio la señora Weasley caminando hacia el árbol. Tomo algunos paquetes de este y los empezó a repartir.

-Este es para ti de nosotros-La señora weasley me sonrió, agradecí tomando el paquete y lo desenvolví, era un suéter de color verde esmeralda con una "O" en el centro. Giré hacia Fred y George que de igual manera tenían la inicial grabada, como todos los años, éramos los únicos que tenían su inicial en el famoso suéter weasley.