INDELEBLE✔️

Capítulo 24-Final.

Todo en su lugar

Dos semana más en este hospital y Seth saltará por la ventana, no deja de ser un jodido intenso que no obedece a los doctores. Por suerte su recuperación al igual que la de Maximilian va de lo mejor, los disparos que recibieron no fueron perjudiciales y pronto volverán a casa.

Lucienna corre hacia mientras Belle trae un lindo vestido en su mano. Lo mejor de esto es tener a mi hija de nuevo a mi lado, la tomó en brazos con gran dificultad ya que ha crecido demasiado.

—Mami todo está listo, ¿Tu lo estás? —pregunta besando mis mejillas.

—Si mi amor, estás hermosa dime quien te peino.

—Mi tía Belle, aunque mi nonna se puso celosa porque ella siempre me peina. Yo no se como hacer con mi nonna celosa, mami.

Rio por lo bajo y la abrazó con fuerza. Mi felicidad y mayor regalo de vida es la mujercita de cabello negro que trae una tiara con ondas que le caen en su espalda.

—¿Mila y Derek están listos? —pregunta Belle.

—No sé, vamos a verles.

—¡Sii! Yo quiero conocer a mis primos mami.

Entramos al hospital el cual las últimas semanas se ha vuelto nuestro hogar, ya que aquí están Seth, Maximilian, Mila, Derek, Emiliano y América. Cada uno con sus propios asuntos pero como siempre una familia unida.

Pasamos por la recepción y vamos al elevador hasta la segunda planta donde está la habitación de mi mejor amiga. Entramos y está riendo con su esposo mientras amamanta a uno de los bebés, ambos son enormes y fuertes con una pequeña melena castaña clara como la de su padre y ojos oscuros como los de Mila.

Mi hija salta de mis brazos y corre subiéndose en la cama de su tía con poca delicadeza mientras mira al bebé.

—Tía se parece mucho a Derek.

—Lo sé amor.

—¿Cómo que Derek? Soy tu tío favorito el mejor de los mejores.

Habla el castaño de casi dos metros saliendo del lavado con el otro bebé en sus brazos. Besa la mejilla de Belle y la mía. Con delicadeza me entrega a mi sobrino a diferencia de su hermano este es más tranquilo.

Derek corre a la cama y toma a Lu en brazos besándola y abrazándola. La risa de mi hija llena la habitación de alegría tanto o más que mi alma, no hay nada como la sensación de tenerla con nosotros.

—¡Tío Derek bájame ya! —pide entre risas— ¡Ya soy grande no necesito que me carguen, tío!

—Paga la cuota y te libero bella princesa de ojos azules y vestido rosa.

Deja de hacerle cosquillas y sonríe cuando le da un beso y un abrazo muy animada. Una vez en el suelo sacude su vestido y lo mira cruzando los brazos.

—Me arrugas te mi vestido.

—Perdón princesita.

—Está bien, te perdono —vuelve a la cama y mira a Mila—. ¿No te pondrás un vestido tía?

—Si amor, cuando acabe de alimentar al niño.

—Y cómo los van a llevar si son tan pequeños.

—Amor deja a tu tía tranquila, solo venimos a saludarlos y a decirles que tienen media hora para arreglarse. —intervengo.

—¡Mami, mami, mami! Déjame cargar a Tim ¿Si? —corre hacia haciendo un puchero.