[Capítulo 139/S4]

192 26 69
                                    

3 semanas después

Todo estaba... Cambiando. Luz, estaba cambiando, y Titán, eso Para Lucía, era mucho más qué un simple logro.

Lucía se atrevió a comprarle un hogar a Luz lejos de todos, ya qué así tendría tiempo de solucionar sus cosas y demás.

Aparte, de qué él hogar de Wilder, sigue en construcción.

Su ahora nuevo amigo, Alexander, le ofreció poderse quedar en su casa, pero Luz no quería molestar, y estando junto alguien qué la ayudó y apoyó mucho, no haría más qué estorbar un poquito.

No estorbar hacia las malas, sinó hacia buenas.

Christopher, recién salido del Hospital Noceda, fue inmediatamente trasladado a la cárcel de Bonesborough, ya sabiendo qué en las de las Isles, se le haría un poco más fácil para escapar y volver a dañar a alguien.

Aún sabiendo qué tenía qué descansar y no esforzarse demasiado, la Noceda sólo se enfocaba en ayudar a su hermana Viney.

Luz ha estado mejorando, pero todavía no se puede decir qué está bien psicológicamente.. Pero aún así, ella no se va a rendir, y no va a dejar sola a esa gente qué necesite de su ayuda.

Luz: Dime Jones, ¿Ya le llegaron las flores a Amity?- Pregunta interesada, queriendo saber la respuesta de Jones-.

- Sip; al principio dudé en ir, pero sabía qué debía ayudarte, y al final se las entregué.

Luz: Bien... ¿Le dijiste qué eran de parte mía?- Necesita un “No” de Alexander, sinó, es claro qué ella no dormirá a la noche-.

- Nope, obedecí cuándo dijiste qué no dijera tu nombre.- Niega él- Amity no se rindió en preguntarme de quién eran, así qué, nada más me fuí de allí, y la dejé con la duda; es súper imposible qué sepa qué fueron de tu parte-.

Luz, no evitando reír ante aquello, dejó su bolígrafo sobre la mesa, se recostó sobre su asiento, y dejó un brazo caer sobre su cabeza.

Está cansada, no durmió bien, pero de todas formas, ella quisiera ayudar.

Luz: De acuerdo Jones, hay cosas qué debería estar terminando, ¿Te parece si hablamos luego y me cuentas lo qué hiciste los últimos días?- Ofrece Luz, tampoco evitando jugar con su cabello-.

- No te preocupes Noceda, luego hablamos.

Tras eso, la llamada finalizó, y Luz suspiró, dejando toda la felicidad qué acumulaba hace rato, marchar.

La latina lanza una pequeña mirada un tanto agresiva al cajón junto ella; había algo dentro, qué todavía no se atrevía a abrir.

No sabe si aquella cosa qué Wilder la mandó a buscar contenía algo bueno, o algo malo... Todo ésto es bastante confuso.

Luz: Uhmm..- Su mano derecha, viaja hasta el cajón, y lo abre, sacando aquella carta, junto una pequeña foto- ¿Se puede saber por qué éste hombre es tan parecido a papá...?

Ella trató de hablar con Wilder, y qué él por favor le explicara de qué iba todo ésto.. Pero hace tiempo, más bien, desde qué salió de aquella cabaña, no ha vuelto a tener ningún tipo de comunicación con él, y es algo raro, no lo negará.

Luz: Ugh... Ya casi terminé de “arreglarme” a mí; ¿Por qué siento qué ésto me va a destrozar por completo..?

No sabiendo qué hacer, Luz dejó aquellas cosas sobre su escritorio, mientras alzaba su muñeca, y observaba la hora.

I won't hurt youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora