I won't hurt you

[Capítulo 45/S2]

Residencia Wilder Noceda

Wilder: Okey... Casi me matan y, destrozaron la mitad de mi casa...- Él se refería a todo el estruendo que hicieron ambos Jones en la residencia Wilder tras probar unas armas- Pero, estoy seguro de que están listos.

Axel: Ummm, yo voy con las manos, no soy de armas y menos de ver a una probé peliverde desangrarse.

Alexander: ¡Yo tampoco! Si es así, vaya usted por Amity nosotros nos ocupamos de Lucía y compañía.

Wilder y Axel miraron al menor; él realmente tenía razón en eso.

Era buen plan hacer que fueran dos contra dos y, que el mayor fuera a por la menor. Nada podría salir mal, todo iría bien.

Axel: Tiene sentido pero, ¿A qué hora iremos por ellos? Nada más para ir calculando el tiempo de la cena.

Wilder: Déjame recordar... O si. El otro día fuí pasando por allí y me enteré de que mi pequeña Luz embarazó a la Blight, así que... Puede que hoy vayan al hospital para hacer no sé qué. Tendríamos que ir por ellos ahora.

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Residencia Noceda- Entrada

Luz: Lucía, muchas gracias por ofrecerte a llevarnos al hospital.- Agradecía saliendo del hogar-.

Lucía: Hey, de nada. Quiero ser tía, tengo muchas, muchas, muchas ganas de ser tía así que, es lo único que puedo hacer.

Las tres salieron del hogar acompañadas de un aura muy tranquilo y bonito.

Caminaron un poco hasta el coche de Lucía. Pero se escondieron tras el coche ya que una de las ventanas de Lucía se rompió de la nada.

Los pequeños trozos de cristal cayeron junto a esas tres hembras que andaban muy confundidas ante esto.

Wilder: ¡Vamos niñas, salgan de una vez para que pueda terminar con esto de una puta vez!

Lucía: Okey, me temía esto... Amity, entre al coche, Luz, vamos tú y yo por ellos, ¿De acuerdo?

Luz: Hecho.

Dejaron que la Blight ingresara primero al coche y luego salieron de su escondite. Allí estaban. Alexander y Axel Jones trabajando para Wilder Noceda... Esos tres no tienen escrúpulos.

Alexander: ¡Hasta que salen chicas!

Lucía: Hermano, yo soy tú y me callaba si no quiero terminar en el hospital de nuevo.

Tras esa frase el ambiente se tensó y las miradas eran las que mandaban sobre el terreno ahora mismo.

Wilder: Okey... Vayan por ellas, ya sé dónde está Amity, yo iré por ella. No dejen de pelear hasta que la Blight muera, ¿Entendieron?- Quería dejar claro todo este tema-.

Ambos hermanos Jones asintieron y se colocaron al ver qué Luz y Lucía se acercaban con amenaza.

Ambas Nocedas estaban demasiado cegadas por saber que Wilder se atrevió a presentarse aquí y, no para pedir un perdón por abandonarlas en el pasado, sino que vino para matar a una chica que ambas latinas aman con todo su ser.

De tanta atención que le Lucía y Luz brindaban a los Jones, jamás se dieron cuenta de que su padre las rodeaba y se marchaba hacia el carro de Lucía.

Lucía: Vamos, los Jones contra las Noceda, chavos contra chavas, feos contra hermosuras. Veamos que podéis hacer, niños.

Axel: Oh, eso no, pequeña, a mí no me llames, ¡NIÑO!