(Portada hecha por: @Fporel)
Luz Noceda, una doctora de 19 años que reside en las Boiling Isles, está tratando de resolver un asunto de su nueva paciente; Amity Blight. Va a necesitar mucha ayuda, mucho café y tiempo para resolver este asunto.
Amit...
Luz: ¡Liam baja de allí! ¡Azura, deja ese cuchillos allí! ¡AHGGG!- La pobre latina estaba ya muy cansada de todo esto.-.
Tras el fallecimiento de su madre, Amity regresó a su trabajo de modelo y, no anda mucho en casa por las sesiones de fotos que tiene cada día. Pero, aún así siempre busca la manera de escaquearse para volver y estar con su esposa e hijos.
Pero, ¿Hoy? Amity no pudo hacer mucho para evitar aquellas sesiones de fotos y firmas; y Luz estaba triste y frustrada por ello.
Ahora mismo, los niños no paraban de causar destrozos, y, se le hace difícil hacer que Azura deje ese cuchillo.
Azura: ¡No! ¡Pillame si puedes!- Vaciló ella saltando sobre la cama de su madre-.
Liam: ¡Muy buena esa, Azura!- Apoyaba el varón juntándose con su hermana a saltar-.
Luz: Okey, ¡Vengan para acá ustedes dos!- Trataba de sonar enojada, pero, mientras que Azura no hiciera daño con ese objeto, Luz encontraba esto divertido y bonito-.
La mayor saltó sobre la cama y trató de perseguir a los hermanos.
Ya por casi unos buenos momentos, Luz atrapó a ambos Noceda-Blight y los agarró en cada brazo.
Estaba cansada y, no tenía tiempo ni ganas para lo que vendría ahora.
Lucía: ¡DIOS! ¿¡ES QUÉ NADIE PUEDE TENER SEXO CON SU ESPOSA SIN QUE USTEDES ANDEN HACIENDO RUIDO!?- Espetó Lucía entrando a su cuarto con casi toda la camisa rota-.
Luz: ¡Lucía, los niños!- Contestó dejando los niños sobre la cama mientras le arrebataba el cuchillo a la pequeña-.
Lucía: Oh sí, perdón... Niños, la señorita Blight anda en la habitación de invitados dormida, vayan a buscar rotuladores y jueguen con ella.
Liam: ¿Mami Amelia nos daría permiso?- Le encantaba llamarle a Amelia mamá-.
Lucía: ¡Pues claro! Nada más tengan cuidado para que no se despierte, ¿De acuerdo?- Ve a los niños bajando de la cama, corriendo felices por los rotuladores-.
Lucía miró muy seria a su hermana en cuanto sus sobrinos abandonaron el cuarto.
Lucía: Yo... Yo te dejé estar en pleno acto con Amity cada vez que vengo aquí, ¿Se puede saber por qué ahora me tienes que hacer esto?
Luz:- Se sienta en la cama y Lucía se apoya en la puerta- ¿Tengo que recordarte que esta es MI casa? Digo, ¿Por qué no te llevas a Amelia a tu PROPIA casa? Allá podrán tener intimidad.
Lucía: ¿Y yo tengo que recordarte que Luca invadió mi casa para ver una película ella sóla?
Luz: ¿¡Y por qué hizo eso!?
Lucía: Luz... Yo que sé, ¡Yo que sé!, ¿¡Yo que sé!?
Luz suspiró ya que estaba apunto de gritar pero, todavía no quería. Alzó la vista y se encontró con los castaños tonos que posaban sobre ella. Los ignoró y dejó que el tiempo pasara hasta que los niños volvieran.
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Sesión de fotos
Amity: Hey Dave... ¿No crees que ya fue suficiente? Llevamos más de 400 fotos. Y lo digo en serio.
El flash de la cámara dejó de alumbrar a Amity y eso le dió esperanzas de que ese fuera el final.
Dave: Ya, creo que me pasé un poco. Le diré a los demás que vayan recogiendo las cosas... Sé que querrás y a casa e ir a ver a tu familia... Puedes irte, Amity.
La felicidad brindaba en la mirada de la Blight, y eso era algo que se notaba.
La chica, que ahora mostraba su color de cabello natural, recogió sus cosas y se dirigió hacia la salida en busca de su carro.
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Café Clawthorne
Eda: Y aún con esta edad, sigues trabajando, ¡Ya déjalo!
Lilith: Nope. Este Café es de papá y mamá; yo no dejaré el local desamparado por tu culpa, ¿Si?
Eda: Sí, sí, lo que tú digas hermana... Oye, ¿Supiste algo de Odalia?
Lilith: Odalia... Oh, ella se tomó unas “vacaciones” lejos de Alador y los niños. Supuestamente anda estresada por el trabajo y reuniones que tuvo últimamente...
Eda: ¿Sí te estás escuchando? Por favor, estamos hablando de ODALIA BLIGHT. Ella es una Blight; los está manipulando a TODOS.
Lilith: ¿Y tú cómo estás tan segura de esa estupidez? Tú y ella fueron pareja en el instituto, tú más que nadie debería saber que ella está realmente cansada.
Eda: Guau... Cómo se nota que solo la tuviste de novia 4 meses...
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Amity: ¡Mis amores, ya llegué!- Avisaba cerrando la puerta principal-.
Dejó su cartera en el piso y se adentró más en su hogar. Todo estaba oscuro, a penas se veían los rayos de Luz colarse por las persianas.
La castaña suspiró y se dió cuenta de lo que pasaba.
Sonrió tiernamente y se dirigió corriendo a su habitación compartida con Luz. Se paró junto la puerta de invitados cuando escuchó voces cansados y fatigadas.
Ya dispuso quiénes eran; pasó de ellas y se dirigió a su cuarto.
Abrió la puerta y no evitó derretirse de ternura; los niños y Luz yacían sobre su cama de matrimonio viendo dormidos.
Estaban literalmente esparcidos por la cama, pero eso lo hace aún más tierno todavía. Volvió a sonreír y comenzó a quitarse lentamente los tacones tan molestos con los que cargó todo el santo día.
Cargó a Azura en brazos y se hizo un hueco en aquella cama; se acostó y dejó yacer a su hija cansada sobre ella.
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