Alfa Helena

17.

Embarazada! Bebé, corazón... Las emociones se acumulan dentro de mi. Ahora mismo me siento como un volcán a punto de erupcionar.

Cómo ha podido pasar? Cómo hemos llegado a este punto, todavía me faltan meses para cumplir los veinte y ya voy a ser madre.

Que grande me queda la palabra madre! Sabía que había medios para no quedarme embarazada y aún así no pensé en ellos. De verdad que estupida me siento.

Podría culparlo a él, pero aquí ambos somos culpables, y si lo hizo a propósito? No creo que no, el estaba igual o más sorprendido que yo.

Cómo va a crecer este niño, en que tipo de ambiente se va a criar? el Inframundo no es sitio para un niño pero tampoco lo puedo alejar de su padre y criarse con unos padres sumidos en una relación tan tóxica tampoco será bueno para el? Siento como si mi cabeza quisiera explotar, tengo tantas cosas por asimilar.

Hace un rato que estoy sola en la habitación, Belfegor ha salido, no se a donde, ni cuando volverá. Nunca me dice nada de sus asuntos, aunque yo tampoco pregunto. Hay cosas que prefiero no saber.

Ojos que no ven corazón que no siente.

Esa frase es la favorita de mamá, hay mamá cuanto te echo de menos, que voy a hacer ahora? Cojo el teléfono se que es tarde pero necesito de su amor en estos momentos.

- Hele cariño, estás bien? Que ha pasado? Para que llames tan tarde.. dice mamá al otro lado del teléfono.

- Mamá te echaba de menos, solo necesitaba escuchar tu voz.

- Helena hay algo más! Se que me ocultas algo, venga dímelo ya, si no lo haces no tendré más remedio que ir a buscarte! Dice mamá en tono amenazante.

- Mamá, no es nada, solo que yo.. yo estoy embarazada. Suelto la bomba, ya está lo que pase que pase ya. El silencio es notable, miro una y otra vez mi móvil esperando que no se haya cortado la llamada.

- Mamá, estás ahí? Yo creo que se ha cortado la llamada...

- No Helena, no es eso, simplemente trato de asimilar tus palabras.. bueno lo importante es que el bebe y tú estéis bien, reconozco que no me lo esperaba, aún eres muy joven pensé que eso tardaría unos años más en llegar. Dice mamá algo triste.

- Mamá estoy asustada, yo.. yo.. soy cobarde eso está mal como voy a ser una buena Alfa si me asusta traer al mundo a un bebé. Le digo para después comenzar a llorar.

- Bueno mi niña, lo harás bien, nadie nace sabiendo, iréis aprendiendo el bebé y tú. No tengas miedo por eso. Y lo de Alfa no lo cuestiones serás una buena Alfa, es normal tener miedo. Hasta tu padre lo tiene. Lo peor sería no tenerlo. Lo importante es saber enfrentarte a él...

Después de un rato hablando, nos despedimos, me ha venido muy bien hablar con mamá, no sabía lo que la echaba de menos hasta que la he llamado, espero que papá se tome bien la noticia de ser abuelo.

- Helena tenemos que hablar? Dice asustandome y haciendo que de mi boca salga un grito. Nunca me voy a acostumbrar a esto.

El se sienta en la cama y yo junto a él. Hoy no veo rabia, ni odio, más bien parece asustado.

- Helena, déjame hablar, por favor no interrupas hasta que haya terminado, es muy importante y quiero que me escuches antes de responder. Yo asiento con la cabeza.

- Se que los embarazos de los licántropos duran aproximadamente cinco meses, por lo que dijo el doctor tú tienes aproximadamente mes y medio. Si tú quieres podrás permanecer aquí dos semanas más. Después de eso volverás a la Manada allí nacerá nuestro hijo. Después de que haya nacido volvereis a casa. No estoy pidiendo tu opinión en esto, más bien es una orden. Tengo demasiados enemigos aquí,no dudarían en matarte, nunca antes ha pasado que un rey tenga a un hijo bajo su mandato.
Siento que si permaneces aquí, os pueda pasar algo y es algo que no podría perdonarme nunca. Una última cosa deberás mantener tu embarazo en secreto, solo podrás contárselo a las personas de tu mayor confianza. En cualquier lugar puede haber alguien acechando. Promete que no te expondrás? Qué no os pondreis en peligro? Por favor prometemelo?

He escuchado cada una de sus palabras, creo que tiene razón, pero no quiero alejarme de él, no quiero o no puedo reconocerlo pero este demonio se ha hecho un hueco dentro de mi corazón.

He visto que a medida que hablaba un nudo en la garganta se le formaba, si no supiera como es él, hasta diría que ha estado a punto de llorar. Después de un rato en silencio, hago algo que quizás no debería hacer. Me lanzó hacia el lo abrazo y lo beso, beso y abrazo que corresponde.

- Está bien, te lo prometo! Pero ahora prometeme tú, que vendrás a verme y sobre todo que te cuidarás? Se que no puedes morir pero tampoco quiero que tengas que sufrir.

- Te lo prometo. Dice él mirándome a los ojos.

**

Hoy es mi último día aquí, he venido a ver a las chicas, ya tengo un pequeño bultito adornando mi vientre, nadie parece haberlo notado y ahora mismo quiero que todo siga así. A las chicas les he dicho que durante unos meses estaré fuera, tengo asuntos en la manada por resolver, no me ha gustado tener que mentirles pero no podía hacer otra cosa.

También me perderé el nacimiento del bebé de Margaret, pero después se que será un buen compañero de juegos para mi hijo.

Me he hecho a la idea de que tendré un hijo, ellas me han dicho que solo nacen niños así que estoy feliz. Se que él será feliz y no permitiré que a los seis años se lo lleven y lo alejen de mi. Antes de que eso pudiera llegar a suceder nos marchariamos muy muy lejos de aquí.

Ya he terminado mi maleta, echo un último vistazo a este lugar, se que es un lugar horrible pero este ahora es mi hogar. Aquí encontrado el amor, la pasión, el odio y también la amistad...

Me dirijo con Belfegor y varios guardias a la Manada, una sensación extraña recorre mi cuerpo cuando poso mi mirada sobre la suya. Qué me ha hecho este hombre, para que me duela solo mirarlo? saber que hasta dentro de tres meses estaremos separados.

Esto parece una broma, primero me lo otorgan como mate, después el bebé y ahora la separación. Me apena que vaya a estar solo, si el tan solo tuviera a alguien, yo tengo a mis padres, a mis hermanos pero y él.. no tiene a nadie solo a nosotros, pienso mientras acaricio mi vientre.