Dicen que el primer amor nunca se olvida, el primer amor es un sentimiento incomparable. pero hasta el más enamorado se cansa. Sin embargo, se abre una nueva etapa, y se forma una amistad con una aparición que cumple deseos, junto con la llegada de...
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𝕟𝕒𝕣𝕣𝕒𝕕𝕠𝕣 𝕠𝕞𝕟𝕚𝕤𝕔𝕚𝕖𝕟𝕥𝕖 𝕆𝕔𝕙𝕠 𝕒𝕟̃𝕠𝕤.
Una chica de cabello azul estaba caminando de regreso a su casa desde la escuela.
Tenía 8 años pero sus padres eran algo despreocupados además la escuela no estaba ni a diez minutos de distancia.
Se detiene en medio del parque que está frente a su edificio al ver un grupo de chicos molestar a una chica que sostiene a un perro en sus brazos.
Sin pensarlo dos veces la chica se acerca al grupo de abusadores y se posiciona al frente de la pequeña niña la cual está en el suelo con lágrimas en los ojos.
-¡Dejenla de molestar! ¡Son unos cobardes por meterse con una niña!
-tu no te metas niñita.-el niño que solo era un par de años mayor que ellas se acerca a Mika con la intención de hacerla a un lado pero está le da una patada baja.
El niño solo empezó a llorar gritando que le diría a su mamá, los demás niños solo lo siguieron y así desaparecieron de la vista de amaba niñas.
-¿Estas bien?-la peliazul se acerca a la niña de cabellos morados y le ofrece su mano.
-ha... -La peliazul la mira sin comprender pero su expresión cambia a una sonrisa.-si... gracias.
La menor toma la mano de la niña y se pone de pie. La pelimorada deja en el suelo a su pequeño amigo peludo.
-¿Es tuyo?-Mika pregunta refiriéndose al perro café.
-no. Esos niños le estaban arrojando rocas, así que me enfrenté a ellos para ayudarlo pero no termino muy bien.-la niña estaba apenada al pensar lo ridícula que fue. O eso pensaba ella.-pero no podía salir corriendo abandonando lo.
La de cabellos azules mirada asombrada a la chica de ojos morados.
-¡Eso es genial! ¡Soy Mika!
-ha... Yo... Mi nombre es T-T/n Hayashi.
En ese momento Mika supo que quería estar con T/n, la admiraba por ayudar a los demás aún sabiendo el riesgo al que se enfrenta. Sin rendirse. A los ojos de ella T/n era genial aunque esta no lo creía. Aquel día, T/n admiro a Mika por su valentía, por su forma de ser, la alegría que esparcía a los demás se adueñó de ella. Desde entonces Mika siempre estaba para T/n y T/n para Mika. Aunque la pelimorada no lo veía así, Mika necesitaba de t/n, la admiraba y se sentía orgullosa de tenerla como amiga.
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