side story

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─¡Christian! ¡Chris!

─¿Mmh? ¿Qué sucedió? ¿Quién eres tú? ¡¿Donde están mis niñas y Gianluca?!

─¿Qué mierda hablas? Primero. ¿Qué niñas? Segundo. ¿Quién es Gianluca?

─¿D-donde estoy?

─Estás en el hospital. Te desmayaste ayer mientras jugábamos en la feria. Soy tu amigo. Me llamo Arturo. ¿Me recuerdas? No puede ser que te hayas olvidado de mí por un golpecito contra una casa.

─No sé quién eres. Y tampoco me desmayé. Ayer estuve con mis hijas y mi esposo. No pudo pasar eso.

─¿Esposo? ¿Qué te fumaste? Si en Perú no es legal el matrimonio igualitario.

─Pero Castillo dijo...

─¿Castillo? Nuestro presidente es Soto.

─No es cierto. Él perdió en la primera vuelta.

─Él ganó con el sesenta y tres porciento.

─Como digas, dormiré un poco. Seguro esto es un sueño. Adiós.

Claro que durmió. Lo hizo. Pero cuando logró darse cuenta de que en realidad no era un sueño fue demasiado tarde. Se encontraba en lo que parecía una clínica. Mientras que el tal Arturo explicaba el golpe que supuestamente se dio. El médico mencionó que el golpe dañó una parte de su cerebro haciéndolo olvidar algunas cosas e imaginar otras. 

No podía ser cierto. Él sintió todo. Todo fue real. Cómo cuando fue su primera vez con Gianluca. O cuando sus bebés le daban pataditas. 

Fue a terapia durante un tiempo. No pudo recordar nada pero sí tratar de superar aquel "sueño".

Había estado viviendo junto a su supuesto amigo. Pasaron unos cuatro meses o incluso más. Habían salido a comprar juntos. Fueron a Tottus mientras Chris veía con dulzura una cajita de besos de moza. Le recordaba a Gian. Ambos comían eso cuando podían. Claro dejando de lado el suspiro a la limeña que tanto le gustaba a su "esposo". Una voz que reconoció al instante le llamó la atención, provocando que se voltee rápidamente.

─¿Cholito?

─¿Gian? 

Ambos se abrazaron sin pensarlo más veces. Luego de eso hablaron un poco. Parece que tuvieron el mismo "sueño". Seguían amándose. Se amaban. Intercambiaron números y se despidieron con un pequeño beso a través de las mascarillas.

─¡Arturo! No vas a creer esto.

─Tremendo huevón que eres. Estuve que busque y busque. ¿Qué hiciste?

─Encontré a Gianluca. Él se acordó de mí. Él aún me ama. Él me reconoció.

─Fua. Felicidades entonces. Pero aún me tienes que pagar todo lo que te presté.

─Ya pe' relaja la raja. Te dije que te voy a pagar. 

─Seguiré esperando mi plata.

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─¿Recuerdas nuestra boda?

─Claro que lo hago. Fue hermoso.

─Más hermoso te veías tú con ese velo que te pusimos a la fuerza.

─Tampoco olvides que para la luna de miel modelaste lencería.

─En mi defensa. Se me veía bien.

─Claro. Como la vez en la que por comer esos brownies raros terminaste haciendo que te meta la pija.

─Eso yo no recuerdo.

─Yo sí.

─Bueno. Entonces. 

─Gian.

─¿Sí?

─¿Quieres ser mi gil?

─Pérate que sigo siendo italiano y no me sé algunas jergas en todos sus sentidos.

─Hay Dios. Entonces. ¿Quieres ser mi flaco?

─Ahh. Habla bien pe'. Acepto. Ahora chapemos.

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─Cariño. Cariño. Cariño.

─¿Que sucedió?

─Logré conseguir información acerca de nuestra "otra vida".

─Waa. ¿Qué descubriste?

─Al parecer hemos tenido nueve vidas contando esta. Dos comenzaron a transcurrir al mismo tiempo. Entonces nuestros recuerdos se juntaron o algo así. Esta es nuestra vida número nueve. Eres mi precioso número nueve. Estuvimos nueve vidas juntos. Mi hermoso nueve.


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Lectura terminada.

14/09/2021

/ᎦҺ𝖏ʈ𝑒ʈ𝖟Ⴘ ßშ𝑒/

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Una side story que dejé en el olvido ;)

Número 9 | LapacuevaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora