35

849 47 4
                                    

James

Observo desde la escalera los hombres apostados alrededor de mi despacho y también a los tiradores que están desde lo alto por si Russo intenta pasarse de listo

Aprieto los puños sobre el barandal viendo como Cristóbal acaricia a Violet y sin poder hacer nada solo observo, preparado para todo, la puerta es abierta por Violet y sonrió por lo bajo

Tengo la vista perfecta para saber qué ocurre dentro de ese lugar y la vigilancia satelital para escuchar también, enarco una ceja al ver la expresión aterrada de la rubia y me apresuró a bajar las escaleras y entrar a mi despacho, Violet está en el piso escondiendo la cabeza en sus rodillas

Mientras Russo solo la mira como si fuera un espanto

—¿Violet estás bien? — pregunto en un susurro y trato de tomar su brazo pero ella grita y lo aparta con miedo, vuelvo a ver a Russo y aunque no entiendo una mierda que está pasando me levanto y avanzó hacia el

—Creia que estabas muerto — murmura con la voz tensa y los ojos asustados, pero no por mi, está asustado por Violet

—Volví del infierno solo para atormentarte — expreso tosco — Ese maldito no sale de aquí — señalo a Russo y entre varios de mis hombres lo someten, vuelvo a acercarme a Violet, pero ya Cristóbal la lleva en brazos y procuro en seguirlo, escucho los gritos de Russo pero los ignoro preocupado por la rubia que va a en brazos de mi mano derecha

🔪🔪🔪

Me mantengo en silencio, Marie revisa a Violet ya que Isaac aún no está disponible ese viaje lo atraso de más, Cristóbal merodea de un lado a otro, ruedo los ojos revisando la bodega desde mi teléfono, donde encerraron a Russo, el cual grita que lo suelten y no entiendo como no pierde el ánimo estando atado y gritando

Marie se aclara la garganta y suspira

—Esta bien dentro de lo normal, al parecer fue un ataque de ansiedad provocado tal vez por un trauma, algo en ese señor desató el ataque y al no podrr conectar con la realidad se desmayó — anuncia — despertara pronto, pero puede aún estar disociada de la realidad, así que tratenla con cuidado, llame a su psicóloga y estará aquí pronto

Asiento y suspiro más relajado, Cristóbal se sienta a un lado de la cama, mientras yo me mantengo en el sillón, gruño y me levanto de la silla para salir y confrontar a Russo pero la pequeña en la cama se remueve y mira a su alrededor confundida

—¿El... El se ha ido? — pregunta con voz temblorosa, y creo que se refiere a Russo, Cristóbal asiente, esta no es la Violet que me ataca mientras entrenamos, no es la que me disparo por petición de su hermana en un plan para hacerle creer que estaba de su lado

No es la Violet que conozco, es un manojo de nervios, como cuando estaba encerrada en mi bodega, pero aún así comparándola con ella, es otra persona porque se que aquella fingía sufrir, este es un dolor real, el que expresa con sus manos temblorosas y sus ojos llenos de lágrimas

—Recuerda que aquí estás a salvo, Violet — susurro, la psicóloga de Violet aconsejo decirle eso cuando se presentará un ataque de pánico o algo parecido, creía que no era necesario dado la persona con la que convivimos y que parece ser de acero pero no lo es, es una chica rota

Y aunque creía que ya su último verdugo había muerto en aquel bosque de Estados Unidos, me doy cuenta que no es así, tal vez tiene más fantasmas que la atormentan y Russo puede ser uno de ellos, aún cuando no entiendo porque

—Yo llame a papá esa noche después de que despertara de mi insconsiencia, pero el jamás llegó, solo se fue a beber como siempre lo hacía mientras yo me desangraba y lloraba — murmura y rehuye del toque de Cristóbal, volviendo a la posición en la que estaba antes de desmayarse —pero a mí me dolía el vientre, la entrepierna, todo... — solloza y veo como cierra los ojos

—Aqui estás a salvo — repito aún cuando me siento ridículo

—Momentos atrás yo estaba intentando dormir, porque teníaun cólico insoportable y a papá no le gustará que me quejara — murmura de nuevo, y yo suspiro acercándome me lo permito aún cuando está tensa, Marie abre la puerta y Violet se asusta soltando un pequeño grito, se acerca a ella y esta la rodea con sus brazos

—Sigue conmocionada, fue un gran trauma — murmura Marie acariciando la espalda de Violet — ¿Quieres contarnos que paso para que podamos ayudarte? — pregunta en un susurro a Violet

—Tenía 14 años — susurra — y mi papá jamás llegó — susurra — quiero que se vaya, dile que se vaya... Por favor — Marie nos hace una seña y aún cuando no quiero salgo de la habitación y camino rápido hacia la bodega, no entiendo nada

Pero Russo desencadeno lo que sucede con Violet y necesito respuestas aún cuando no se las sacaré a fuerza a Violet, pero si a ese maldito, entro a la bodega y lo veo sigue atado, furioso pero ya no está gritando

—¿Esta es la hospitalidad que muestran los fantasmas? — sonrió cínico mientras avanzo hasta el, saco un cuchillo de mi bolsillo y lo entierro en su clavícula, suelta un grito de dolor, viendome todavía más furioso

—Y te estoy tratando con la mayor hospitalidad posible — murmuro sarcástico — incluso hay juegos en este lugar vip, ¿Te parece si jugamos? — pregunto con diversión, Russo se mantiene estático mientras saco el cuchillo y lo vuelvo a meter con más fuerza que la anterior — yo pregunto, tu respondes, y la respuesta que no me guste será un dedo que partiremos en tu manita

Traga en seco, y aún cuando no quiere mis hombres le obligan a mover la cabeza con afirmación

»—Pregunta número 1, ¿Donde esta tu pequeña princesa bastarda? — murmuró seco, el sacude la cabeza, y ruedo los ojos — vamos tienes otra oportunidad, ¿Dónde mierda está la psicópata de Victoria?

—No lo sé — arrugó la nariz y hago una seña, le estiran la mano sobre una mesa de metal que se hunde por la presión de un martillo sobre el índice derecho de Russo

Repite el nose y golpean con más fuerza el martillo hasta lograr que este cruja

»—Te juro que no lo sé, ella llegó a casa recogió sus cosas y se fue, se sacó el chip de rastreo y no se dónde mierda se está ocultado — murmura con rabia mientras mi hombre da otro martillazo y su dedo ahora está hecho completamente añicos

—Muy bien, fingire que te creo, segunda pregunta, ¿Que mierda le hiciste a Violet Anders? — murmuró tosco apretando el dedo que acaban de golpear logrando que grite más no que abra la boca para decime lo que quiero — está bien, el corazón de la mano izquierda muchachos — expreso aburrido

Cambian el martillo por uno más grande y después de abrirle la mano lo sueltan sobre el dedo que acabo de mencionar, Russo aprieta los labios con fuerza pero sus ojos delatan lo mal que lo está pasando

»—Segunda oportunidad — murmuró, el vuelve a negar y digo otro dedo, haciendo que hagan la misma función

Es tan obstinado que ya tiene 4 dedos partidos y sigue negándose a dar información...

»—Meñi...

—Yo... Yo la viole — habla en un susurro que apenas su alcanzo a oír pero que oigo, no digo nada más solo me levanto mientras el cuenta la historia que solo aumenta mis ganas de matar, que hincha la vena de mi cuello, queriendo venganza

La Equivocada ¥ [LM#0] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora