La Equivocada ¥ [LM#0]

4

Violet

Veo mi reflejo cansado sobre el espejo, las ojeras de varias noches sin dormir, puedo ver cómo trabajan en mi cuerpo como tratan de mantenerme con vida aún cuando yo quiero irme, solo quiero quedarme aquí, dormida mientras lentamente me conduzco a la muerte

¡¿Por que no pueden entenderlo?!

—Esta mujer quiere morir — murmura alguien, es así, quiero hacerlo, por favor déjenme hacerlo— subanlo a 300 — vuelve a hablar la voz, y sollozo queriendo que dejen de intentarlo — a un lado, ¡Despejen!

El ardor en mi pecho es inmediato tanto como el constante ritmo de un latido que es apenas audible pero que hace a las personas que me rodean suspirar con alivio, sollozo de nuevo, buscando la forma que el latido deje de atormentar mis oidos y pueda estar en paz

—Subanla a cuidado intensivos con monitoreo constante — murmura, siento como me arrastran, veo como curan las heridas que dejaron de doler para ser solo moretones de un cuerpo gastado a pesar de tener 21

O estar cerca de ellos

La adrenalina que fluye por mi cuerpo me impide sentir dolor, así como los analgésicos que inyectan para que deje de doler

Pero no duele, y quiero que siga así para siempre, por eso quiero irme, por eso quiero dejar este cuerpo cansado e irme a otro lugar uno más cálido, donde me reciban con amor y no con más golpes...

El ambiente cambia, y ahora estoy en otra habitación con más máquinas, con mejores cosas y sin ganas de despertar, solo quiero quedarme aquí fuera de mi donde el dolor no llega

—Le inducimos el coma señor Murphy — murmura la misma voz de antes, que ahora me hace poner una mueca porque el solo se aferraba a mi vida como si yo la quisiera —su cuerpo está tan maltrado que requiere un largo descanso y el coma fue la mejor solución, tuvo un paro pero logramos reanimarla aún cuando ella no se aferraba a la vida

Se que tengo los ojos cerrados pero veo mi cuerpo laxo ser revisado, veo cómo tocan heridas, cambian las vendas y demás, siento cómo esas cicatrices sanan, suspiro y camino viendo la alta ventana que tiene la habitación y el paisaje que se cierne coloreado de naranja por el atardecer que lo baña

Una sonrisa se coloca en mi rostro al verlo, porque es lo más lindo que he visto y ni siquiera estoy dentro de mí cuerpo para obsevarlo

Alguien toca mi hombro y me giro para mirar de quién se trata, los ojos grises de mamá me dan un calor que deje de sentir hace más de 10 años y la abrazo tratando de recuperar esos pedazos que me han arrebatado tantos años, esos pedazos que solo ella podría juntar

—Mi pequeña —su voz fina tal y como lo recuerdo y la abrazo viendo sobre su hombro su característico tatuaje de R enrollada sobre una serpiente, nunca supe que significaba, supongo que era por su nombre o no lo sé, ya nada me importa solo estar en sus brazos como aquella niña de 5 años que no sabía porque su papá no la quería

—Mamá... —susurro, no la suelto aún cuando quiero volver a ver sus ojos, pero necesito que este momento dure más de lo que de seguro durará

Porque así son los sueños, cortos y más sin son hermosos, sobretodo para alguien como yo que vive completamente rodeada de pesadillas

»—Estoy exhausta, quiero estar contigo — expreso despacio, mi voz sale seca, agotada tanto como me siento, queriendo que ella entienda que no quiero volver a irme de su lado

—Aun no es tu momento mi pequeña florecita— murmura acariciando mi espalda, sollozo, no quiero, quiero que sea mi momento, quiero irme ya

—Ya no puedo más, no es justo, ya estoy demasiado cansada — mamá me separa para sostener mi rostro y limpiar mis lágrimas

—Lo se, pero aún no es tu momento porque estoy segura que mejores cosas vendrán — acaricia mi mejilla con suavidad —y tú vas a triunfar, vas a salir adelante, y serás esa pequeña florecita que siempre supe que serías

⛓️⛓️⛓️

James

Violet Anders

20 años

Londinense

Huérfana

Releo la información que me confirma que tengo a alguien que no debería, aprieto los puños viendo de nuevo los vídeos que no dejan de torturarme mientras espero en la sala de esperas que hagan lo que tengan que hacer

Mientras Rodrigo entra, y se queda a un lado asimilando la rabia que crece con cada segundo dentro de mi pecho

—¡¿Cómo mierda paso esto?! — escupo cada palabra con más rabia que la anterior, Rodrigo se muestra impasible, me conoce mejor que nadie y sabe que a los estúpidos que se acobardan les doy de baja en seguida

—Victoria planeo esto detenidamente —responde confirmando lo que dice estirandome una tablet que tomo con rabia, en el vídeo se ve a la mano derecha de la perra Russo entra al edificio donde sacamos a la mujer que ahora está siendo atendida por los médicos

Se ve que tiene un paquete de mi merca, y luego sale como si nada hablando por teléfono y sonriendo, le aplaudo a la perra que supo jugar sus cartas pero ahora es mi turno y no le va a gustar el desenlace de este maldito juego que ella misma inicio

* * *

Avanzó por el hospital hasta que ingreso a una habitación especial donde tengo que colocarme protectores, el médico que revisa la piel pálida que resalta en la cama, se gira para verme, suspira y avanza hasta donde estoy tomando una inhalación profunda

—Le inducimos el coma señor Murphy — explica a mi pregunta, — su cuerpo está tan maltrado que requiere un largo descanso y el coma fue la mejor solución, tuvo un paro pero logramos reanimarla aún cuando ella no se aferraba a la vida

No digo más asimilando cada palabra que sale de su boca, es mi maldita culpa pero yo me hago responsable de mis malditas decisiones y ahora también de mi primer error

—Estan adecuando una habitación en mi mansión - hablo, más bien ordenó — cuando esté lista, usted vendrá con nosotros

Enarco una ceja cuando quiere replicar

»—Dijo que le indujo el coma, la tratara en mi casa donde pueda vigilar la — el asiente aunque igual no puede refutar

Me acerco a la cama y obsevo cómo se mezcla con el ambiente, sin saber que pasará ahora que he cometido el primer error en mi puta vida