La Equivocada ¥ [LM#0]

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Violet

Las luces parpadean mientras me dirijo al sótano, el castillo tiene una inmensa sección donde hay varios calabozos, que Murphy restauró y ahora son unas bodegas de torturas

En la peor de todas y la más favorita para mí, encuentro un rostro igual al mío, los ojos verdes aún con los requicios de la pelea que tuvimos dos meses atrás

Sus pies no llegan a tocar el suelo, sus brazos cuelgan de la barra del techo, mientras su cuerpo desnudo me muestra algunas cicatrices que antes no sabía que tenía

Una sobre una de sus tetas, mientras otra más blanca sobre su pubis

La observó en silencio mientras llevo una hamburguesa a mi boca

—¡Mataste a Cristóbal! — grita queriendo liberarse de las cadenas, sonrió sin dejar de comer mi hamburguesa

Ella grita mientras la hamburguesa termina, limpio mis manos y me acerco a mi gemela

—Si, lo hice mientras metía su lengua en mi garganta — expreso en un susurro pero se que alguien más lo oye, cuando gruñen en la puerta y rápidamente soy llevada a la pared

Sonrió viendo a James que me obliga enrollar las piernas en su cintura mientras me va dejando sin la parte baja de mi ropa, gimo al sentir sus manos tocar mi cuerpo como si fuera suyo, y tal vez lo sea porque yo lo permití

Y fue una de las cosas que más extrape estos meses lejos de el y de su presencia

De su aura helada, que me hace calentarme, el también se baja el cierre para sacar su polla y empezar a follarme, no la importa que Victoria nos vea, no le importa más nada que demostrarme que soy suya con cada estocada que da en mi interior

—¿Acaso no recuerdas que eres mía? — gruñe — ¿Cuantas veces tengo que decirtelo?

Sonrió atacando su boca con la mía, queriendo borrar el amargo recuerdo de la última acción de Cristóbal

»—¿De quien eres, maldita sea? — gruñe sobre mi boca y abro más las piernas mientras arrastró las uñas por su cuello

—De Dios — gimo recibiendo una estocada aún más fuerte que las anteriores — y probablemente del diablo, al ganarme un pase directo al infierno

Gimo más fuerte, importando me nada de lo que sucede a mi alrededor, y recordando que decidí pertenecerle, y que eso me hace una jodida reina, la reina que pondrá arder al mundo mientras cada uno de los secuaces de Cristóbal y Victoria empiecen a caer

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El calor de Miami me recibe mientras mis tacones se mueven por el asfalto donde el avión blanco con la M al final acaba de aterrizar, miro el alrededor con curiosidad

Victoria sigue en Londres y se que la única forma que salga de la bodega donde está es en una bolsa de cadáver que me asegúrare de conseguir para ella, pero tenía asuntos en Estados Unidos que no podían esperar

La tensión en medio del aeropuerto es evidente pero no me importa mientras avanzo

—¿Hacia donde vas, Violet? — murmura Jared a mi lado y sonrió entrando al aeropuerto bajando los lentes de sol y quitando el abrigo que use en el vuelo para mantenerme con el calor de Miami

—Hamburguesa — murmuro la respuesta, que lo hace maldecir

—Camino a la base podremos conseguir tu preciada hamburguesa — expresa — se ve que aquí pasa algo, y no puedes ponerte en riesgo, ¿Sabes cuántas balas tienen tu nombre?

Sonrió, ignorando lo que dice

—Si no consigo una hamburguesa en cinco minutos, tu cabeza tendrá una bala — expreso como una amenaza sutil que se que no llegaré a cumplir

Dylan le toca el hombro, haciendo que Jared maldiga y avance unos pasos por delante de mi furioso, mientras Dylan ríe, buscamos en la plazoletas de comidas, sintiendo cada ve el aire más pesado

Encontramos un puesto de hamburguesas y dejó a Dylan, esperando junto con varios hombres que se ubican en puntos estratégicos para mantener un ojos sobre mi y mi seguridad

Encontrando la causa del ambiente denso dentro del hospital

»—Jared, dile al piloto que cargue combustible y mantenga el motor caliente, tal vez nos regresemos a Londres — expreso la orden, el asiente sin entender mientras me acerco despacio a la chica escondida en la última fila de sillas

En el abordaje de clase económica

Sus ojos se levantan al sentir la presencia de alguien más y se ponen a la defensiva, mientras acomoda más la capucha y baja de nuevo la cabeza, veo a hombres correr examinando el lugar y le hago una seña a mis hombres para que no generen sospecha

Se que la buscan a ella, aún cuando ella trata de esconderse

»—¿Puedo ayudarte? — le pregunto mientras me inclino a su altura, ella da un paso más atrás, evasiva y revisando que los hombres que corrían ya no estén cerca

—Señorita, por favor, váyase y déjeme tranquila — expresa en un susurro mientras sus ojos café empiezan a llenarse se lágrimas

—Solo quiero ayudar — murmuró, reconociendo su rostro después de pensar de donde la conocía — se lo que es querer huir, lo que es verse rodeada de peligro y no tener a nadie que te tienda una mano, no tienes que decirme quién eres o porque te escondes, solo debes tomar mi mano y confiar en mí

Ella duda pero se pone de pie de un salto, y empieza a seguirme a la salida, voy a la zona donde está el avión privado esperarme, y subo con ella siguiendo mis pasos

—Tu hamburguesa — murmura Dylan dándome el paquete y sonrió dejando que se acomoden en sus respectivos puestos para que el avión empiece a elevarse

Mientras escucho por el auricular a Jared decirme que la chica a quien llevó conmigo es Camille Flyn y que todo Estados Unidos unidos la está buscando

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El trayecto es largo y se quién me acompaña pero no sé la razón por la cual claramente quería huir, ella sigue en medio de una nebulosa de pensamientos que no he interrumpido porque la hamburguesa se hace agua en mi boca mientras la observó

—¿Hacia donde vamos? — pregunta de la nada, limpio mi labio inferior observándola ansiosa esperando una respuesta como si dudara que tomo una mala decisión al subirse al avión de una completa extraña

—Londres — murmuró la respuesta, y le doy otro mordisco a mi hamburguesa

Ella suspira en alivio

—Tienes dudas, así que te diré quién soy pero tú también me dirás algo de ti para que mi cerebro asimile que tome una buena decisión — expresa en un susurro y asiento

—Tengo una hermana gemela — hablo primero, — que desde que sabe de mi existencia no ha hecho más nada que ponerme a sufrir y ahora está sufriendo en una de las bodegas de mi marido en Londres

Sonrió al recordar cómo quedó Victoria antes de subir al avión

Ella hace una mueca mientras asiente sin entender pero no daré más explicaciones

—Mi padre me vendió — susurra abrazando sus brazos ante la mención del hombre que se supone debe protegernos y cuidarnos — el lo hizo porque sus hoteles estaban en líneas rojas y necesitaba el dinero con urgencia, me vendió a un hombre cruel que me daño la jodida vida y huyó de ambos, de hecho iba a Londres que ahí está mi abuelo

Asiento sin comentar nada más, y ella tampoco lo hace, yo solo sigo comiendo mi hamburguesa hasta acabarla mientras el viaje de regreso se hace eterno y ya hay autos que esperan por nosotros

O más bien por ella que parece estar lista para defenderse y huir de los hombres que la buscan con desespero