62

577 31 1
                                    

Victoria

Parpadeo, llevando dos dedos a mis sienes, la cabeza me duele, y los ojos me arden al momento que trato mantenerlos separados

La habitación de la cabaña parece una sala de hospital, con las diferentes máquinas a mi alrededor, y con el sonido molesto que hace aumentar mi dolor de cabeza

Hago una mueca intentando sentarme, la cabeza me da una punzada que me recorre el cuerpo entero, a tientas busco un vaso de agua y por fortuna encuentro uno a mi costado, mientras intento abrir los ojos de nuevo para adaptarme poco a poco a todas las máquinas que me rodean y al ensordecedor sonido que maltrata mis tímpanos

Llevo a mis labios resecos el vaso de agua, mientras rememoró todo lo que pasó, desde la emboscada en el bosque, hasta el sótano donde libre una batalla casi a muerte con Violet

Que prácticamente perdí

Hago nuevamente una mueca, escuchando la puerta abrirse, Cristóbal me ve de arriba a abajo, antes de suspirar

—Por poco no despiertas — murmura y yo suspiro, el espejo que siempre está frente a la cama me da una imagen de mi reflejo

Los ojos verdes están cubiertos por dos parches negros debajo, ojeras que cubren el final de un ojo morado, ladeó la cabeza para ver el lugar donde más me duele, y noto los puntos ya cortados de una cicatriz sobre ella, supongo que una herida que fue bastante preocupante para los doctores

—Me duele todo — exclamó en un exagerado suspiro al tirarme de nuevo a la cama, gruñó por el dolor y por mi voz que no parece real, es una voz más ronca que me maltrata los tímpanos, la cabeza me sigue doliendo mientras mis oídos emiten murmullos que maltratan todo mi cerebro

—Tuviste una pelea muerte, que no ganaste — exhaló con pesadez, apretando la mandíbula al notar lo cierta de sus palabras — pero tampoco perdiste

»—Fue un justo empate — expresa con algo de burla, me vuelvo a levantar viéndolo con furia creciendo en mis iris, el suelta una pequeña risa

—¿Cuanto tiempo estuve inconsciente? — pregunto, para no caer en su estúpida provocación, levanta dos dedos y lo miro con una ceja arriba — ¿Dos días?

—Dos meses — trago en seco, viendo de nuevo el espejo donde solo queda un vago reflejo de mis golpes, intento ponerme de pie pero el mareo me detiene, mientras Cristóbal me mira, se acerca a mi y el me ayuda a poner de pie — abre la boca

Pone dos píldoras en mi boca cuando lo hago y pasa de nuevo el vaso de agua que había dejado a un lado para pasarlas, me hace salir de la habitación, mientras guía todo el recorrido, y llevando mi peso también

Bajamos al sótano, y observó desde afuera la caja de cristal, Giana trenza el cabello de Violet que lo tiene más largo, más sedoso y un poco más brillante, mientras está última juega con Viktor

El maldito perro está con ellos, acostado a un lado, descansando, tranquilo

Y como salió del infierno, y entre demonios nos conocemos se levanta, tensando los músculos de sus piernas, y mira atraves del cristal justo hacia mi dirección

Violet, también mira hacia donde estoy aunque no puede verme, y mira al perro

¿Que sucede bebe? — pregunta en ruso, Cerbero ladra mientras sacudo la cabeza con ira

Viendo la imagen completa

Gianna, recuperó a su hija, y está teniendo con ella lo que nunca me dará a mi

—Tenemos que movernos, en cualquier momento nos encontrarán — murmura Cristóbal sacándome de mis pensamientos

—Quiero matarla — susurro despacio, Cerbero sigue ladrando a mi dirección

—Te dije que no ganaste pero tampoco perdiste — murmura de nuevo Cristóbal — ella también perdió — señala a Violet, lo miro enarcando una ceja, se señala el vientre y se ríe — tuvo un aborto a causa de los golpes

Miro a Violet que le habla en ruso al perro que deja de ladrar, y camina hasta el, ya con su cabello trenzado para acariciarlo, no sufre.

Y hago una mueca

—Ella eso le interesa tanto como a mí la veterinaria — expreso en un tono cansado y con un alto índice de sarcasmo, Cristóbal me mira confundido — ¿La ves sufriendo?

Vuelvo a señalar la, Violet acaricia a Cerbero que se mantiene alerta hacia la dirección donde estamos pero que se deja consentir por su dueña, y el único sufrimiento que veo, son las líneas marcadas de su rostro, seguramente tramando algo para salir de ahí y liberar a nuestra madre y hermano

—Era un hijo de Murphy y viste como se puso al verlo en el piso casi muerto — murmura como si no creyera mis palabras — claro que está sufriendo

—Por Gianna y Viktor, seguramente por Alexey en el suelo con un charco de su propia sangre y sobretodo por James Murphy, siendo débil — expreso, mirando su actitud relajada, jamás toca su vientre o lo acaricia como si eso le afectará

Pero yo sé que no le afecta

»—¿Cuando acaricia su vientre? — murmuró la pregunta, Cristóbal gruñe

—Tal vez ella no, pero Murphy lo hará cuando se entere — refuta y me río sin gracia

—Si, pero no cambiará que ella siga sin sufrir la pérdida, gano con todas las letras — expreso con rabia disfrazada de sarcasmo — pero solo es una batalla y la guerra aún no termina, así que tienes razón, debemos salir de aquí

Y el asiente con ira, presionó mi mano sobre la puerta, dejando que está abra, Cerbero gruñe mientras ladra y empieza a correr hacia nosotros, Cristóbal saca su arma, rodeando mi cintura para evitar que caiga

Calma, bebé — murmura en ruso Violet, viéndome con burla luego de darme una mirada de pies a cabeza, Cerbero gruñe de nuevo, todavía con sus patas hacia adelante como si fuera atacarnos — aquí bebé, eso no es cena decente, te hará mal

Ruedo los ojos, Cerbero hace lo que Violet le dice, mientras bufa, y mantiene los dientes fuera como una amenaza

—La gran familia feliz — escupo las palabras con ira, Violet lleva a su hermano detrás de su cuerpo

Se que Cerbero nos atacará si yo intento hacerlo, así que solo les doy una mirada de indiferencia como si no me doliera lo que sucede, y doy media vuelta

—Fuera más feliz si no estuvieras entre los vivos, pero de eso ya me encargaré, así que no te preocupes, hermanita — habla Violet, no caigo en su provocación. Y salgo, tirando la puerta

—¿Y cual es el maldito plan para irnos de aquí? — pregunto, no me interesa estar débil por el tiempo que estuve inconsciente, necesitamos irnos si queremos ganar la guerra

Y tenemos a nuestro favor que la Reina del bando contrario está encerrada en el sótano

Estamos en Jaque

La Equivocada ¥ [LM#0] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora