La Equivocada ¥ [LM#0]

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Victoria

«—Hija debo contarte algo — papá me señala la silla frente a el y me siento estirando las manos para que mis dedos tamborileen sobre la mesa, el se ve preocupado, nervioso...

Ayer estuvo fuera todo el día, lleva fuera casi dos días o tres pero mis entrenamientos ahora son más fuertes y casi no me percató si está, aún cuando lo extraño mucho

—¿Qué paso papá? — pregunté, despacio con miedo a alterarlo, se veía así y aprecie en sus ojos grises cuando los levanto para verme culpa, dolor algo que jamás había pasado

Papá no era una mala persona, cobraba deudas como parte de su trabajo, era mafioso, así que muchos lo veían mal, pero esa vida me hacía sentirme poderosa, o por lo menos disfrutar mucho...

—Hace 14 años me desligue de mi familia y me mudé a Rusia, quería ser independiente, quería una vida mejor de la que me brindaban mis padres, así que aproveche que mi padre me pidió buscar a mi hermana, la cuál se había escapado con un tipo inglés, y fui tras ella, cuando la encontré tenía una bebé en brazos

»—Ella había quedado embarazada y por eso había huido, no quería saber nada de la vida de mi padre ni las consecuencias de aquello, así que al ver la en unas condiciones no dignas del apellido Russo le ofrecí irse conmigo a Rusia, pero ella se negó, también le pedí que me entregara a su hija

»—Pero se negó, así que por brindarle una vida mejor a esa bebé, se la quite en brazos y me fui, ella me pedía que le devolviera a su hija, pero ya me había marchado y llevando la bebé conmigo...

—No entiendo porque me cuentas eso papá — susurro sin entender y rascando mi sien

—Tu eras esa bebe Victoria, no eres mi hija, y todas las historias que he contado acerca de como veniste al mundo fueron solo mentiras, eras hija de mi hermana, mi sobrina — carraspea y baja la vista — tu cadena venía con tu nombre, y una hora, que no entendía de que se trataba hasta que ví esto — me pasa la foto de una persona idéntica a mi, en sus ojos se ven matices de grises como los que tiene papá — estaba cobrando una deuda y la vi

»—La muerte me sonrió al ver que mi deuda tenía el rostro de mi hija — traga en seco y me observa, pero no sé que decir o pensar solo sigo viendo a la persona que me muestra — al investigar, descubrí que mi hermana había tenido gemelas, un embarazo múltiple con niñas en la misma bolsa, pero que estaba con su padre de visita en Australia, y no se llevó a ambas porque una era más fuerte que la otra, tenían una enfermedad congénita

»—Al nacer prematuras, y la bebé que se había quedado en casa estaba débil y no podía viajar, y por eso solo traje conmigo a una de ellas, y jamás supe que eran dos hasta ayer, que abuse de mi propia sobrina

Cierro los ojos y me permito pensar, pero nada pasa por mi cabeza, solo la idea que tengo una hermana

»—No se si quieres que venga a vivir con nosotros o si...

Abro los ojos lentamente ante la probabilidad que se pinta en mi rostro pero no lo sopesó y lamo mis labios, sacudiendo la cabeza, podrá ser mi hermana pero no quiero compartir la vida que ahora es mía, y que es una buena vida»

* * *

En Londres hay una prisión bastante famosa y antigua, la prisión de Belmarsh, recluida con presos malos, aquellos que tienen lo peor de la ley y gracias a la influencia de mi padre encuentro frente a mi a hombre rubio de ojos verdes, no hay que ser adivinos para saber que fue el, el que hizo posible que este frente a el

Me observa con detenimiento aún cuando no es la primera vez que me ve, pero siempre se sorprende, me perdió hace 20 años, pero soy su reflejo, soy la firma indeleble de su personalidad

Creo que por eso jamás deja de asombrarse, aún cuando no soy la niña que tuvo por 14 años

Ni jamás lo seré

—Ya estamos cerca, estoy trabajando mucho en sacarte de aquí — murmuró, Jacob sonríe de lado

—Dijiste eso hace un mes — susurra tétrico, se ve como una amenaza y me gusta el desafío que eso implica, porque papá siempre cede a lo que le pido, pero Jacob no

—Si, pero no eres perseguido por el rey de la mafia y el poder de tu padre flaquea — expreso despacio, estirando la mano para observar mi manicura — por lo que es complicado, así que no te preocupes que en menos de lo que canta un gallo estarás respirando el dulce aire de la libertad

Asiente no muy convencido y aún cuando no he terminado de hablar se regresa por dónde vino y ruedo los ojos levantándome yo también de mi asiento, Alexey espera por mi, y abre la puerta de auto para que suba

»—¿Que has sabido de ella? — se encoge de hombros con indiferencia antes de encaminarse a la puerta de piloto — hice una maldita pregunta

—Si, pero no soy tu portador de noticias, solo soy la mano derecha que usas a conveniencia — comenta sátiro y me dan ganas de clavarle un puñal por estúpido, a lo que el sonríe, de lado — no he sabido nada de ella porque eres tan envidiosa y cruel que me prohibes verla, así que no he sabido nada de ella desde la gala

No le creo ni mierda así que volteo los ojos y observó la ventana enviándole un mensaje, nuestra comunicación se ha limitado a esto pero es tan necesario como todo lo que planeo