RELEVIUM

Capitulo 31

¿Tenemos un plan?:

Todo ha estado de cabeza en la ciudad, nadie sale de su casa con temor a que en la calle pudiese pasarle algo y no ver de nuevo a su familia, todos estaban aterrados. En cada vivienda de Frycity un guardia vigilaba en la puerta, observando, evitando las salidas y entradas de habitantes a sus hogares.

Amelia:

Nuestro plan ya estaba en marcha, habíamos completado el primero de nuestros pasos. Secuestrar a los sujetos con mascara, los cuales podrían considerarse una especie de guardias en esta bizarra situación.

La primera noche, esperamos a que oscureciera, cuando la niebla suele tocar las aceras y todas las luces están apagadas, raptamos al primero. Revisamos su traje por si traía algún tipo de rastreador o comunicador y no había nada, lo atamos y llevamos al ático.

Robamos su traje y su máscara e intentamos sacar información, pero parecía estar en una especie de trance, no se movía ni mucho menos pronunciaba alguna palabra.

La segunda noche hicimos lo mismo, raptar, amarrar, preguntar. De nuevo no obtuvimos más que el traje y la máscara. ¿Nuestro plan? Infiltrarnos lo más cerca posible, asesinar tantos guardias como podamos y luego acabar con los hermanos Almeida.

Parece algo fácil ¿no? Y para mí nada es imposible. Tengo mis trucos.

Hoy es la tercera noche, y sí, hoy enviarán otro guardia. Nos extraña que nadie haga preguntas sobre los desaparecidos, pero así es mejor.

Bajo hasta la cocina, donde está Mauro, sentado de espalda con una taza de café.

-Te ves terrible- menciono al llegar cerca de él. Sus ojos cubiertos por medias lunas moradas y el tono pálido de su piel, más de lo común. Realmente me preocupa Mauro, sus muñecas están cubiertas de rasguños y no sé por qué clase de cosas este pasando mi hermano, pero realmente es frustrante verlo en ese estado.

-Gracias- musita.

-No puedes seguir así- exclamo, me estresa mucho esta situación, porque sale de mi control y Mauro es realmente irritante.

-Ok- es lo único que responde.

-Sigue matándote si quieres, pero ella no va a volver. Maldición Mauro, de verdad deberías asistir a terapia, tienes una fuerte dependencia- expongo.

-No me importa, solo quiero que Sara esté bien. Necesito ir a buscarla.

-Es estúpido Mau, estas actuando como un real imbécil- hablo- Es obvio que iremos a buscarla, pero si sigues con toda esta idiotez vas a causarnos problemas.

Él solo se queda en silencio, viendo su taza de café, con la mirada perdida.

-Di algo, por favor, defiéndete.

-Amelia, esto es solo por ella. Tienes razón, debería ir a terapia, pero que ¿Debería salir ahora, en mitad de toda esta locura. Ir, buscar un terapeuta y tomarme una taza de té contándole mis problemas, mientras todos aquí se matan? ¡¿Eso debería hacer, Amelia?!- grita- ¡Respóndeme!- exclama más alto- ¡Respóndeme, maldición!

-¡Cállate!- le grito- ¡Cierra tu maldita boca por una vez!- exclamo perdiendo la compostura- ¿Crees que para todos es fácil lo que está pasando? Eres más egoísta que yo Mauro, pero no lo haces por ti, lo haces por Sara. Por Satán, la conoces hace un año y un poco más- logro relajarme gritándole a mauro, por lo que una vez dicho eso bajo el tono de voz- Sabes que tendremos que irnos después de esto- él niega con la cabeza una y otra vez- Sabes que lo haremos, y has pensado en eso, solo que no quieres aceptarlo.