Capitulo 32

19 4 13
                                        

Venganza:

El día tan esperado había llegado, los Lorant se han preparado para actuar. La tensión era clara dentro de la casa, estaban conscientes del riesgo que implicaba el involucrarse con los hermanos Almeida, pero ¿Acaso había alguna otra manera de acabar con el caos? Ellos eran los encargados de terminar con lo que estaba sucediendo en la ciudad.

El gran reloj en la pared marca las 10 AM, la hora en la que inicio todo. Iván, Mauro y Amelia salen de los suburbios en una camioneta negra, vestidos con los trajes que habían robado, preparados para acabar con un ejercito entero. ¿Sonaba como una locura, cierto? En cierto modo lo era, si no fuese porque los Lorant tenían un as bajo la manga.

Infiltrarse entre los guardias-conejos no fue difícil, al fin, nunca habían visto su cara entre ellos. Al parecer el único que sabia quienes estaban entre sus soldados era Braulio, y con razón, reclutaba a cada uno de ellos vendiéndoles el sueño de ser inalcanzables, invencibles y todopoderosos. Algo que era imposible claramente, pero ellos estaban tostados de la cabeza y no lo entendían.

La alcaldía se alza ante la camioneta de los Lorant y el ambiente comienza a ponerse tenso. Pueden entrar y acabar con los hermanos Almeida o entrar y terminar muertos. En cualquier caso de peligro, Iván había dejado todo un reporte en su computadora, para que sus compañeros pudieran encontrar los registros y acabar con la locura de estas personas.

Sabían perfectamente que debían hacer, estacionan su camioneta cerca de la plaza, en una calle ciega. y comienzan a bajar el armamento, no era mucho, el equipo que cargaba cada guardia y algunas armas extra que facilitaran su trabajo.

-Bueno, hijos- exclama Iván- Comenzaremos con lo que podría acabar en el final de este pueblo. Haremos un trabajo impecable como siempre, y recuerden seguir el plan a pie de la letra, en caso de algún inconveniente actúen de la manera en que lo haría un Lorant.

-Si, padre- responden Mauro y Amelia al unísono.

Con esto cierran la compuerta de la camioneta y se dirigen hasta la alcaldía. En cada acera había un guardia idéntico a ellos, su traje, sus armas y su inexpresión corporal.

Al entrar en el edificio notan que esta un poco desordenado todo el lugar, y los empleados han sido remplazados por agentes con mascara.

Mientras Iván y Amelia estaban en la recepción, Mauro había entrado silenciosamente a la sala de control que habían instalado, tenían cámaras en sitios estratégicos y claro que también había un sujeto con mascara manejándolas, el cual se torno agresivo al ver a Mauro entrar allí y este termino noqueándolo con la parte de atrás de su arma. Y procedió a apagar la mayoría de las cámaras, excepto la del despacho principal.

Al finalizar les envió una señal a su padre y hermana a través de unos dispositivos que previamente habían conectado.

Mauro se dijo a si mismo en voz alta.

-Todo esto lo hare por ella, y valdrá la pena después.

Con esto abandonó la sala de control para iniciar con su parte del plan. Cuando se une a su padre y hermana un anuncio suena en los altavoces.

-Atención todos, hoy tendremos reunión especial en la sala de conferencias, por favor asistir todos a las 2pm- la voz de Braulio resuena en todo el espacio- Ah, y bienvenidos mis queridos Lorant, los estaba esperando.

RELEVIUMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora