Capítulo 8

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                                                                           Ahogado

Tal como lo suponíamos las muertes no cesaron, se intensifican. Este caso fue el turno del papá de Ángela. Uno de los políticos del pueblo, gran pérdida sin duda.

Esta vez el patrón fue diferente, lo ahogaron y luego apuñalaron repetidas veces en el estómago.

Otra visita al cementerio, era lo que le esperaba a Frycity.

El cuerpo policial aísla el cadáver y la señora Parker entra seguida de Ángela quienes desbordan en lágrimas. Un esposo; un padre, un político, una figura importante. El señor trabajaba para el concejo.

Casi no estaba en casa debido a eso.

Pero nadie sospechaba del secreto que guardaba Ángelo Parker, pues no solo era político, si no, algo mas...

Sara

El cementerio comienza a convertirse en el lugar que pasó la mayoría del tiempo luego del instituto y mi casa.

Veo a mi amiga de la infancia llorar desconsoladamente sobre el hombro de su madre. En estos momentos desearía ser un poco más expresiva. No sé cómo consolarla o ayudarla.

Así que solo me acerco a ella y cuando me ve comienza a llorar enterrando la cabeza en mi hombro. La abrazo y acaricio su cabello, le repito que todo estará bien pero...

¿Realmente lo estará? Hay un asesino suelto por las calles de Frycity y nosotros seguimos sin hacer nada, pero conseguiré a ese desgraciado a como dé lugar. No habrá Dios que pare nuestra venganza hacia ese sujeto.

Flora y Sophi se acercan silenciosamente y me dan una sonrisa triste la cual yo devuelvo. Separó a Ángela de mi cuerpo y ella saluda a las chicas. Las dejo hablando y voy en busca de Cris a quien no veo por ningún lugar.

Llevo días sin ver a mi mejor amigo, y me empiezo a preocupar un poco. Seguro estará ocupado con la elección de su padre. Que por cierto se postula para alcalde.

La misa transcurre en lo que siento que alguien se para a mi lado. Miro con el rabillo del ojo y Mauro está ahí, me da una sonrisa pícara y vuelve la vista al frente.

<<Que tipo tan raro>>

Terminamos, todos se acercan a dejar rosas blancas y darles sus condolencias a la señora Parker y a Ángela.

Me alejo y tengo la intención de quedarme de nuevo hasta tarde, quiero ver si los sujetos del otro día aparecen de nuevo. Me adentro en lo profundo del cementerio, donde la vegetación se torna más espesa, reviso que no haya nadie siguiéndome y cuando vuelvo la vista al frente me sobresalto.

-¿Qué carajos haces siguiéndome?- es Mauro, otra vez.

-No te estoy siguiendo, solo me aseguro que todo esté bien contigo. Te noto inestable últimamente- habla con un tono serio.

-Con que ahora eres psicólogo ¿Eh?- volteo los ojos

-¿Qué planeas hacer?- evade mi pregunta

-Nada y tú deberías volver a tu casa.

-No me das órdenes, Almeida- dice con aire de superioridad- Te acompañare, puedo ser muy buena compañía si me lo propongo- me guiña un ojo.

Ruedo los míos ante su comentario

-Ok, iremos pero en silencio y discretamente- le digo

-¿A dónde iremos exactamente?- me sigue

Le cuento todo el plan mientras nos adentramos más y más en la vegetación hasta llegar a las primeras lápidas que tuvo este lugar.

Paseo entre ellas, me siento en más confianza con los muertos que con los vivos.

-Y dime- Mauro rompe el silencio- ¿Por qué tienes tantas ansias de encontrar a esas personas?- vestido de negro y sentado sobre una tumba parece un asesino. Su cabello oscuro cae desordenado a los lados de su cara y sus mejillas tienen un tono rosa intenso a causa del frio.

-Creo que tienen algo que ver con los últimos asesinatos-digo y tragó saliva- Digo, nadie se queda hasta tan tarde en un cementerio, armados hasta la medula y con mascaras-

Ríe ante mi comentario, y es una risa ronca y sexy.

¿Qué dices Sara? Te has vuelto loca.

-Como sea- dice con aire despreocupado-¿Vendrás al cumpleaños de mi hermana? Espera verte ahí- dice jugando con los pulgares sobre su regazo.

- No lo sé, tal vez asista- salto un par de tumbas y me siento a su lado-¿Te gustaría que fuera?- me animo a jugar su mismo juego.

-Claro que me gustaría- dice cortando el espacio entre nosotros- Siempre hace falta alguien a quien molestar ¿No?

-Eso te gusta, molestarme- digo y ahora soy yo quien acortó el espacio.

-Depende, a veces digo las cosas sinceramente- lame sus labios- Como cuando digo que eres rara y extremadamente fascinante-

-Oh vaya, don arrogancia piensa que soy fascinante- acorto aún más el espacio- Es un gran honor-

-Sí que lo es...

Intenta reducir el espacio entre nuestros cuerpos pero en eso me levanto de un golpe.

-Vaya, sí que me has arruinado la jugada- me dice

-Cuando quiera majestad- reviso la hora han pasado alrededor de veinte minutos. Ya deben haberse ido todos.

-Vamos, ya se han ido- digo emprendiendo fuera del espacio de espesa vegetación.

-Con que no puedes andar por ahí y quedarte quieta- dice y me sigue

Lo ignoro y sigo caminando, llegó a la capilla de en medio con Mauro detrás.

***

Me frenó al escuchar voces familiares. Llevo mi vista al lugar del otro día y efectivamente hay figuras, de la misma manera que la vez anterior, solo que esta vez en vez de túnicas rojas tenían túnicas negras, las armas y las mascaras.

-Hemos terminado, ha sido un dolor de cabeza. Pero nos hemos librado de Ángelo Parker- dice la misma voz robótica.

-Esta reunión ha concluido- se despiden.

Tengo mil preguntas en la cabeza, esas personas realmente habían matado al señor Parker

¿Por qué? ¿Con qué tipo de personas trabajaba? Y lo más importante de todo ¿Estaba Ángela envuelta en todo esto o estaba en peligro?

Mauro me agita el cuerpo y vuelvo a la realidad.

-Una respuesta a la vez, Almeida- me dice pareciendo notar la confusión en mi rostro.

-Es que... no, no lo entiendo- arrugó las cejas- No entiendo quienes son estas personas y porque asesinaron a Ángelo-

-Yo tampoco, pero lo podemos averiguar juntos- dice con una sonrisa picara en el rostro.

-Ya quisieras, engreído-

Sonríe de medio lado.

-Te dije que seríamos buenos amigos, Sara-

Y ahí, en ese cementerio lleno de secretos bajo tumbas, mientras el cielo se teñía de rosa. El monstruo de Frycity volvió a atacar, esta vez llevándose por delante a la política. Lo que quería decir que él era más poderoso.

Y que no cesaría hasta que todos se inclinaran a sus pies, y lo alabarán como Dios.

Él creía ser Dios, lo que no sabía es que el diablo es más poderoso.

Y ese diablo estaba en su cuarto, escuchando 5SOS. Sin darse cuenta de lo que le avecinaba 

RELEVIUMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora