Glass Heart

Capítulo 2

—Me presento. Hola, soy Cho Kyuhyun —le había escuchado decir, era la primera vez que un chico se presentaba tan cordialmente como lo hacía él. Estaba tan sorprendido que ignoró por un momento su presentación— ¿Cuál es tu nombre?

¿Su nombre? ¿De verdad lo estaba preguntando? Todos lo evitaban, pero esta persona estaba interesada en conocerlo.

—Yo... lo siento. Soy Lee Sungmin, primer año, es un placer, hyung —saludó con vergüenza. Se mordió el labio luego de escuchar la risita proveniente de aquel joven de cabellos castaños.

—¿Hyung? Pareces confundido, también estoy en primer curso, soy de la clase "A" —Min se sintió más avergonzado, decirle a ese chico hyung lo consideraba su peor torpeza hasta ahora.

—Lo siento. —Se disculpó de nuevo e inclinó su cabeza pidiendo disculpas, eso hizo que se golpeara con el cuerpo de Kyu pues los dos aún continuaban en el baño.

Kyuhyun abrió la puerta con precaución y salió al ver que no había nadie. Le hizo señas a Minnie y pronto él también estuvo fuera del cubículo. Ahora que tenían más espacio, Min se percató de la diferencia de estatura, su compañero de la clase "A" era más alto que él y más formado, claro que Minnie no hacía demasiado ejercicio por su condición, eso lo frenaba mucho.

—No te molestarán por ahora, ¿pero qué pasará mañana? Deberías informar a los profesores, no está bien que dejes que te molesten así, ¿por qué los dejas? Tienes derecho a ser tratado con respeto, si no les haces frente a los problemas como este seguirán atacándote, claramente necesitas ayuda —dijo mientras caminaba por el baño tal como si diera un discurso presidencial.

—Lo siento —repitió una vez más—, lo haré mañana.

—Lo siento, lo siento, ¿es la única palabra que conoces? Ellos deberían pedir perdón, tú no tienes la culpa de nada —lo tomó de la mano, esto hizo que Min se sobresaltara—. Vamos, te llevo a la sala de profesores para que levantes la queja.

Sungmin se soltó de su agarre, no deseaba por ningún motivo levantar una queja en contra de esos abusadores por el simple hecho de perder la escuela, sus padres no le permitirían volver si alguno de los maestros les llamaba para informales de la situación. Negó con su cabeza de inmediato, no era una opción.

—No, no quiero —caminó a paso apresurado para salir del baño, se detuvo antes de salir y volteó para mirarlo—. Gracias por ayudarme —volvió a girar y se marchó dejando a Kyuhyun confundido debido al poco interés en castigar a los malvados.

***

Sungmin se dejó caer en su cama, su vista estaba fija en el techo de color blanco mientras su mente revivía los últimos acontecimientos suscitados en la escuela. No podía creer que un chico de su misma edad, aparentemente, lo hubiera defendido de los grandulones que lo fastidiaban todos los días. Se sentía agradecido pero a la vez deprimido, era probable que ese joven no supiera quién era él. Cuando se enterara el día de mañana lo ignoraría como el resto, era lo que siempre sucedía. Le preocupaba que por su culpa fuera acosado por el grupito de bravucones que tanto lo querían al él como saco de boxeo.