Sungmin estaba enfermo y solo. Una amistad adolescente podría convertirse en el amor que ha estado esperando, pero también en una enfermedad mortal para el corazón.
Pareja principal: KyuMin
Pareja secundaria: EunHae
Género: Fanfic, drama, romance, y...
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Sungmin observó la expresión en el rostro de su tío, no lucía molesto, pero sí serio, estaba claro que para él no era lo correcto irse de la casa con Kyuhyun. Estaba dolido con él por el engaño pero seguía siendo su tío, la persona que lo cuidó como a un hijo luego de que sus padres murieron, así que no sería grosero, simplemente sería sincero.
—Sí, viviré con Kyuhyun. Quiero estar con él. —Min tragó saliva antes de decir sus siguientes palabras—. Recuperaremos el tiempo perdido, y no me hará cambiar de opinión, tío.
El hombre no dijo nada, entonces Kyuhyun tomó la mano de Sungmin, como pensando que en cualquier momento el señor se lo quitaría, pero no fue así, el tío suspiró resignado y asintió lentamente.
—Está bien, si de alguna manera eso te hace feliz no te detendré, sobrino. Tal vez actué injustamente con los dos, pero quiero que sepas que no lo hice con la intención de dañarte, eres como mi hijo, lo único que me queda, y por eso me preocupo por ti. —Min lo escuchó con atención, su tío no era una mala persona, simplemente lo cuidaba demasiado y en ocasiones pensaba que hacía lo correcto—. No es necesario que compren un departamento, pueden usar el mío. Viví un tiempo ahí antes de mudarme contigo a esta casa. Sé que los dos necesitarán su espacio, así que pueden vivir en él si lo desean.
Eso era perfecto. Sungmin mostró una pequeña sonrisa de agradecimiento, al parecer intentaba remediar el daño que les había hecho. Minnie se acercó y le dio un abrazo, hacía tiempo que no lo hacía ya que lo veía por poco tiempo durante el día.
—Gracias, tío.
***
—¡Henry! —el grito proveniente de una mujer alteró al joven que en esos momentos regresaba de la escuela, eran aproximadamente las tres de la tarde.
—Aquí estoy, mamá, ¿qué necesitas? —preguntó el chico dejando sus cosas en una silla y yendo al encuentro con su madre, que en esos momentos estaba tirada en la cama completamente borracha.
Henry la miró con desilusión, hacía bastante tiempo que no veía a esa mujer como una madre, simplemente la llamaba así por costumbre, en realidad su hermano Hyukjae había tenido el rol de madre y padre en esa casa, su alcohólica mamá solo servía para beber, gritar y ordenar. Hacía tres meses que la habían corrido del trabajo y desde ese momento no se preocupó por buscar otro. Debido a ello su hermano sufría las consecuencias.
—Ve y cómprame otra botella, se terminó —dijo la mujer sacudiendo la botellita color verde oscuro.
—Mamá, sabes que yo no tengo dinero, mi hermano regresa más tarde —le respondió intentando suavizar sus palabras para que ella no lo tomara a mal.
—¡Necesito otra! —gritó y fue suficiente para Henry, odiaba esa situación.
—¡Pues tendrás que esperar! —salió azotando la puerta de su casa, todavía tenía el uniforme escolar, pero a la mierda, no quería volver ahí hasta que Hyuk regresara.
