Quinn volvió a su cuarto una vez que terminó con el almuerzo que su madre había preparado. No todo había salido como pensaba, y dentro de todo, no podía enfadarse con su hermano por la discusión que tuvieron minutos antes de sentarse en la mesa. Sebastián le había dejado en claro que estaba en un absoluto desacuerdo con lo que estaba haciendo pero, muy a su pesar, ya lo había hecho. Solo le pedía que cuidara su imagen y que por supuesto cambiara rápidamente la información que en su muro aparecía. Quinn se limito asentir a todo lo que pidió, aliviándose mentalmente por haberlo hecho con anterioridad.Quinn, mentir está mal y hacerse pasar por otra persona, mucho peor. Demonios, ella lo sabia pero no tenía la valentía para conocerla siendo Quinn Fabray.
La confesión hacia su hermano no fue lo primero en la lista de sus alivios, el haber confesado que le gusta una mujer fue lo primero sin excepción. Todo el día Quinn se había preguntado acerca del mensaje en Facebook que había enviado. ¿Lo habría recibido? ¿Ella mirará su Facebook? ¿Lo habrá leído? Todas esas preguntas tenían respuestas, solo tenía que abrir la cuenta de su hermano y verificar si allí había un tic marcando el visto. Intentó por todos los medios alargar aquella duda que se convertía en tortura, pero por diferentes motivos aún seguía encerrada en su habitación evitando a que llegase el momento.
Cerró la puerta del cuarto apoyando su espalda en la puerta de madera. Un suspiro marcó el comienzo de su decisión sobre echarle un vistazo a la red social. Ella tenía pensado revisarlo antes de dormir, pero había dos posibles situaciones. Si no obtenía respuesta estaría toda la noche sin poder dormir preguntándose el porqué, pero, si en su bandeja había un mensaje de Rachel tampoco podría dormir por controlar la ansiedad en su cuerpo. De todos modos era un caso perdido.
La maquina ya la esperaba encendida, solo basto con tomar asiento en su silla y hacer varios clics para cerrar ventanas y abrir otras. Usuario: SebastianContraseña: ********. Se echo hacia atrás mientras la página cargaba con los nuevos datos que había puesto con anterioridad. "Sebastian Fabray" desapareció completamente, dejando solo "Sebastian" como nombre de usuario. De ninguna manera Rachel debía asociar su apellido. Su mente vagó momentáneamente. ¿Qué pasaría si Sebastián le contara su secreto a su padre? Probablemente esta vez su padre tendría las excusas y motivos suficientes para correrla de casa. Pero ya había tomado una decisión, había dado el primer paso en reconocer que una mujer le atraía, no se echaría atrás tan fácilmente.
El inicio con noticias del muro de Sebastian apareció brillando contra su rostro, se inclino hacia delante y vio dos mensajes en su bandeja de entrada junto a varias notificaciones. Guio la flecha del mouse hasta la pestaña y aguardo unos segundos hasta hacer clic allí. Su respiración se había vuelto errática y el sudor en la palma de su mano no demoró en hacerse presente. Comenzaba a sentirse incomoda, ¿En qué momento de su vida se le cruzó por la cabeza actuar así con una extraña? ¿Por qué escribirle a alguien que solo la atrapó por su mirada? ¿Por qué insistir con alguien que puede ser todo lo contrario a sus gustos personales?. Despejando aquellos pensamientos hizo clic y la pestaña se deslizo hacia abajo. Me respondió.Abrió sus ojos sorprendida y tragó saliva con el temor de haber sido descubierta sobre su perfil falso.
Se acomodó frente a la maquina y leyó al menos unas dos veces el mensaje antes de suspirar y acomodar un poco sus ideas. Lo había visto la noche anterior alrededor de la 01:23am. Por supuesto a Rachel le aparecería la hora en que Quinn lo había leído, lo cual iba a resultar insultante si no respondía el mensaje, teniendo en cuenta que ella fue quien inicio la conversación. Muy bien, respondería, pero ¿Qué le diría?
Rachel Berry
Lamento profundamente leer que no has podido dibujar como corresponde en tu clase en el día de ayer pero, debo decirte, que tus carbonillas están en perfectas manos y aun no he oído ninguna queja de ellas al respecto. Tal vez, solo tal vez, ellas no la estén pasando tan mal en mi hogar bajo mi responsabilidad. A todos les viene bien tomarse unas vacaciones de vez en cuando ¿No crees? Respecto a cuando las has perdido, no podría decirte con exactitud la fecha, pero fue una fría mañana donde la noche anterior había llovido con intensidad, por eso, algunas de ellas se dañaron al mojarse al igual que tu dibujo.