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Capítulo 23: Un Corazón Roto

Justin se había metido al lago mientras yo estaba desnuda en el agua.

—Justin, ¿qué haces aquí? —Murmuré mientras me tapaba.

—Me desperté y vi que no estabas con nosotros y ahí fue cuando te vi en el lago. No pude evitar desnudarme y entrar al agua contigo. —Se me acercó.

—No, yo no puedo estar aquí contigo Justin, tienes que irte. —Me sumergí hasta que el agua cubría mi barbilla.

—Hay Alejandro, ¿es por esa manía que tienes que no quieres que nadie te vea desnudó? —Rió.

—Sí, es por eso, tengo complejos. —Mentí.

—Venga, de seguro tienes un cuerpo muy bonito. Estas siendo muy duro contigo mismo. —Sonrió.

Justin se acercó aún más a mí mientras me colocaba sus manos sobre mí cintura.

Yo, no podía soltar mis brazos para empujarle porque vería a mis queridas amigas nadando bajo el agua cristalina.

—Justin, por favor, no lo hagas, solo sal del agua. —Supliqué.

—No voy a ir a ningún lado Alejandro, además, ¿qué te tapas con los brazos, las tetillas? ¿Vamos por favor, quién le da miedo enseñar hasta las tetillas? —Rió.

Justin, comenzó a acercar su rostro a mí mientras que yo le huía.

Éste, me agarró con más fuerza por la cintura mientras que sus manos comenzaban a recorrer mi cuerpo.

—Justin, no hagas esto más difícil. Solo sal del agua.

—Mira Alejandro, te mostraré que tu cuerpo es hermoso y no tienes que avergonzarte de él. —Me puso sus manos sobre mis brazos y haló fuertemente de ellos haciendo que mis niñas salieran en todo su explendor.

Justin se quedó perplejo mirando a mi niñas en el agua mientras que sus ojos parecían que se le saldrían de las cuencas.

Rápidamente, me tapé con los brazos nuevamente mientras los dos nos quedamos en silencio.

—¿Eres... chica? —Preguntó con asombro.

—Claro, ¿por qué crees que tengo tetas? —Respondí molesta.

—Pero es que tú....

—Lo se —Interrumpí.

—No entiendo nada. —Se llevó las manos a la cabeza.

—Es complicado Justin, solo... no le digas a nadie ¿sí? —Solté a mis niñas y lo tomé de los hombros.

—No, no le diré a nadie. Pero, si no eres Alejandro, ¿Quién eres?

—Me llamo Emily, vine en lugar de mi hermano Alejandro porqué estaba muy enfermo. —Suspiré. Por eso actuarás como siempre, porqué nadie se puede enterar, no quiero que me saquen y traigan a mi hermano hasta acá. ¿Me comprendes? —Le miré a los ojos.

—Si, si, no diré nada lo juro. Ahora todo hace tanto sentido. Por eso no dejabas que te vieran. Por eso siempre actuabas tan raro. Pero, ¿tú y Dexter? ¿Es que acaso él...?

—Sí él lo sabe, sólo ustedes dos. —Interrumpí.

Justin se quedó sin palabras mientras que éste solo se llevaba las manos a la cabeza.

—¡Esto es increíble! —Se acercó a mí.

Justin, comenzó a mirarme de arriba a abajo, bueno, lo que se veía a travez del agua. Éste tocó mi rostro delicadamente con su mano mientras que comenzaba a bajarla por el cuello.