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Capítulo 39: El Nacimiento

Ése odioso sonido...

Pip... pip... pip...

Aquí me encontraba, en el hospital, junto con Dexter y Justin quienes parecían estar un tanto nerviosos.

Estos, me habían traído a un hospital cercano, rápido que la fuente se me había roto en la casa. Los médicos, habían dicho que me faltaba todavía algunos centímetros por dilatar, por lo que había que esperar. En tanto, los tres, nos encontrábamos en un cuarto bastante grande, esperando a que él bebe quisiera salir.

Dexter, estaba sentado en una silla justo al lado de mi camilla, mientras que Justin, estaba al otro lado de la habitación, parado en la ventana, comiéndose las pocas uñas que le quedaban.

El doctor había mencionado, que cuando me comenzaran las contracciones fuertes, ahí sería cuando él bebe ya estaría listo para nacer.

—¿Ya han pensado en nombres para el niño? —Pregunté rompiendo el incómodo silencio y la tensión en la habitación.

—No lo sé, ¿qué te gusta a ti? —Dexter me tomó la mano y sonrió mientras Justin se acercaba.

—Puede ser tal vez, Mateo, Joseph, Henry, sino Samuel. —Les miré esperando su opinión.

—¡Me gusta Joseph! —Respondió Dexter.

—A mí me gusta Mateo. —Dijo Justin mientras cruzaba los brazos.

—Bueno, a mí me gustan ambos. ¿Y si le ponemos Joseph Mateo? —Sonreí mientras los miraba a ambos.

—¡Es perfecto! —Sonrió Dexter.

—Me parece bien. —Justin me dio dos palmadas en el hombro mientras sonreía.

Joseph Mateo sería el nombre de mi hermoso hombrecito lobo. El solo pensar que en cuestión de horas tendría a mi niño en brazos, me hacía suspirar de la emoción. Deseaba tanto ya conocerle y verle su carita.

No puedo negar que sí me ponía nerviosa el no saber quién era el padre, más, ver a los chicos así de nerviosos, me mataba. Sabía, que uno de los dos saldría herido al saber que el niño no era de él, y eso me entristecía.

De repente, veo la enfermera llegar a la habitación.

—¡Hola mamá y papás! Ya vamos a ir preparando todo para el parto, cuando el niño nazca, le haremos la prueba de paternidad al instante. Estará lista en treinta minutos a una hora, no es nada complicado. —Sonrió mientras verificaba mis signos vitales. —Ya veo que las contracciones han estado subiendo, así que es cuestión de algunas horas más para que empiece la labor. Vuelvo luego, ¿sí? —Asentí con la cabeza mientras la enfermera se marchaba.

La enfermera, ya le había tomado las muestras de sangre a Justin y a Dexter rápido que le pedimos la prueba de paternidad. Solo faltaba, tomarle una muestra al bebé cuando naciera para saber quién era el padre.

Justin, comenzó a ponerse nervioso nuevamente, lo podía notar por el constante caminar de un lado de la habitación hacia el otro.

Por otro lado, Dexter parecía estar bastante tranquilo. No se alejaba de mí ni un solo segundo.

—¿Dónde será la habitación del niño? —Miré a Dexter.

—Puede ser en mi antigua habitación en el tercer piso, pero mientras crece, tendrá que estar en nuestra habitación por un tiempo.

—Sí, me gusta la idea.—Suspiré, mientras pensaba si pregúntale a éste lo que tenía en mente. —Dexter, ¿te puedo hacer una pregunta? —Le miré nerviosa.