Por fin está aquí.
Mierda.
¿Salgo ahora?
¿La hago esperar?
¿Le hablo feo?
¿Le hablo bonito?
¿Corro a Lucía?
Mierda qué hago.
Mi corazón late tan rápido, siento como mi estómago se contrae.
¡¿POR QUÉ HACE TANTO CALOR?!
-._¡ALICE!._vuelvo a escucharla.
Miro a Lucía esperando a que me ayude a decidir que hacer. Ella sabe que a la perfección que no se que hacer ahora.
-._Deberías de salir y hablar con ella de una vez._ me dice con una voz que me resulta demasiado tranquila.
-._Me siento como una adolescente.
-._Así nos sentimos todos cuando estamos enamorados independientemente de la edad.
-._¿Cómo puedes decir cosas tan geniales cuándo las necesito?._al fondo puedo oír un "Alice abreme ya" pero suena mas a súplica.
-._Ni yo sé._se ríe.-saldré por atrás tú encárgate de tu chica. Luego me cuentas._me dice esto último guiñando me un ojo.
No me deja responderle y se va como toda una diva.
Dios estoy tan nerviosa, puedo sentir mi corazón tratando de huir de mí.
Decidida, me encamino hacia la puerta deteniendo me a un paso de ella. Por alguna razón siento impotencia y unas terribles ganas de llorar pero no de tristeza. Abro la puerta y por fin después de tanto tiempo vuelvo a verla, tan hermosa, tan perfecta. Es en este momento en el que dejo a un lado mi orgullo y me abalanzo hacia ella, abrazándola y presionando la contra mi cuerpo. Dios, la extrañé tanto. La necesité tanto. No logro contenerme y la beso, ella no me corresponde al momento y aborto la misión, pero en mi intento de huir ella vuelve a juntar nuestros labios poniendo algo más de intensidad. La extrañaba. extraña esto. extrañaba sus besos. Es tan linda. Siento que he vuelto a casa. Una lagrima traicionera se resbala por mi mejilla, quiero limpiarla pero no quiero dejar de besarla. Puedo sentir su lengua acariciar la mía. Puedo sentir como mi cuerpo comienza a reaccionar a ella, pero si no paro aquí no podré hacerlo después.-._¿Quieres subir?. _digo susurrando contra sus labios.
Ella no me responde, solo me mira y me resulta la mirada más tierna que haya visto, ella me empuja de a poco hacia dentro de la casa cerrando la puerta tras de sí.
Ya no tengo escapatoria.
Perdonen que sea corto, tenía ganas de escribir algo hoy.
Los quiero. ❤️
Escribí este pequeño capítulo escuchando "Dreaming - Leighton Meester"
ESTÁS LEYENDO
Profesora Homofóbica
RomanceAsco, repugnancia y odio. Eso era lo que le causaba. Placer, jadeos y gemidos. Eso fue lo que le causó después.