Aún no estoy lista.

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Cada parte de su cuerpo que va siendo liberada de sus prendas se ve simplemente magnífica. Su abdomen está ligeramente marcado, sus piernas son perfectas a su cuerpo. Cada parte es perfecta a su cuerpo.

Ahora está completamente desnuda encima de mi.

¿Cómo es qué esto es posible?

Me besa, me acaricia, juega con mi cuerpo.

Sus caderas comienzan a moverse por sobre las mías. Un vaivén que comienza a gustarme, casi como un baile. Yo sólo puedo gemir por lo bajo y aferrarme a su cintura.

Pero algo en mí aún no quiere entregarse.

Un sentimiento extraño.

¿Y si sólo es un engaño de ella para poder tener sexo conmigo?

Espera ¿cómo es que accedí a esto?

No puedo con esto.

-._No puedo-._susurré

Ella se detuvo.

Me mira, la miro, pero aún está encima mío.

-._No puedo-._dije mirando a otra parte que no fuera su mirada.

Se bajó de encima mío poniéndose a un lado de la cama.

-._Esta bien, no se preocupe. Puedo  esperar.

Cree que aún puede tener otra oportunidad.

-._No esperes-._dije levantándome de la cama-._esto no se repetirá.

No dijo nada. Me vestí y salí de allí.

Sé que esto está muy mal.
Sé que es mi alumna.
Sé que soy su maestra.

Creo que mi "homofobia" se ha ido.

Creo que ahora me gusta. Bueno, no creo. Esto me gusta.

Nunca pensé que el tacto de los labios de una mujer sería tan suave y delicado.
Nunca pensé que sería así.
Nunca pensé que una mujer pudiera dar placer a como un hombre puede dar a su pareja.
Esto es tan confuso.



Un mes después.

Desde aquella vez, ella a estado diferente. Sus notas no han bajado, continúan intactas. Solo que ya no es la chica perversa que conocí cuando ingresó al Instituto. No la he vuelto a ver en la cafetería con chicas, ni seduciendo a otras en la escuela. Sólo que en clase no me mira, después de lo que pasó esa noche no me ha vuelto a hablar, sólo lo hace para participar y cuando algo no sabe, pero solo son contadas las veces.

Creo que sólo hace lo correcto. Al fin comprendió que lo que hacía estaba mal, y aveces, sólo aveces pienso en su suave toque.

No he vuelto a tocar a Eliot; no hemos vuelto a hablar del tema de ese día que perdí "el control" y agradezco eso.
Sólo somos una pareja que casi ni se habla.
Sé que me engaña no es necesario investigar. Lo hace desde antes que yo lo hiciera con ella. Y sí, para mi lo que hice con ella lo tomo con un engaño, aunque no debería sentirme culpable por ello.
Prácticamente estamos esperando a que uno dé el paso. Ese en que decimos que ya no queremos estar juntos, pero ninguno de los dos se atreve.

.

Hoy es lunes. El receso apenas comienza por lo que comienzo a caminar hacia mi oficina. No tengo ánimos de hacer nada, sólo me limito a mirar la pequeña planta que adorna el escritorio, pero mi concentración no duró mucho, porque a los segundos una hoja de papel fue deslizada por debajo de la puerta.

Pues como dicen "la curiosidad mató al gato"

Me levanté de la silla y fui en busca de la hoja de papel. Este era de un color rosa opaco y está doblada. La abrí encontrandome con algo escrito en ella. No lo dudé y leí el pequeño párrafo que estaba escrito.

1 de febrero del 2016

Cuando el sol sale anunciando el inicio de un nuevo día, me gusta contemplarlo por un largo rato. El paisaje que crea cuando se está ocultando es más que hermoso. Cuando miro su hermoso cabello me recuerda al sol, el color amarillo que tiene no puede hacerle competencia porque el sol sabe que perderá ante su deslumbres.

T.

Tiene una hermosa caligrafía en cursiva, y sin faltas de ortografía, no es tan emotiva pero... ¿QUÉ?
¿Qué quiere decir con la "T" al final.
¿De quién rayos es esto?
Sólo una "T" no hace de gran ayuda.
¿Alguien me ha estado observando?
¿Esto es como una especie de declaración? ¿puede que sea la "T" de Thompson? No creo, no se le ve cara de ser "cursi".
Me aterra la idea de saber que alguien me observa, pero me trae intriga del por qué lo hace ¿le gusto? Creo que si es más que obvio. Le gusta mi cabello.

El receso termina, voy al aula al que me corresponde impartir clases, pero voy alerta para ver si alguien me mira más de lo normal.
Entro y miro a todo el aula buscando a alguien sospechoso pero no, hasta ahora nada.

No, nada sospechoso, los miro a todos tratando de encontrar a la persona que  haya mandado aquella hoja, pero no, nadie.

Voy a la siguiente aula y hago lo mismo. Pero nadie.
Veo a alguien mirarme, intento creer que es él, pero ni su nombre ni su apellido llevan una "T"

¡MALDITA SEA!

¿Por qué Dios no me dio el don de leer mentes y saber quién piensa en mí?

Todo estuvo normal, nadie sospechoso. Tal vez no debería de darle tanta importancia al asunto. Sí, creo que es mejor olvidarlo.

Es mejor olvidarlo.

Profesora Homofóbica Donde viven las historias. Descúbrelo ahora