Once in the Red Moon

EXTRA: Una conferencia

Se va acortando la fila de personas invitadas a esta conferencia. Todas ellas, al igual que yo, tenemos una invitación con un sello especial en la mano para poder entrar. Muchos tienen una gran expectativa del expositor, ya que muchos dicen que es una joven promesa y no puedo estar más de acuerdo que eso. No puedo evitar sonreír al ver el nombre de esa persona que va a exponer su investigación en el cartel colgado al lado de la entrada. Esta es una de las más importantes de mi vida, hasta ahora. Lo conocí en la escuela elemental, y han pasado tres años desde que me enseñó a utilizar mi magia.

Él vino desde la ciudad de Elstow a la ciudad arcana de Chealey, mucho antes de haberlo conocido, para estudiar Investigación Mágica y, según lo que nos ha contado, también para ser profesor luego de obtener su título. Él es bastante agradable y lindo. Pareciera ser cercano a mi edad, pero es mucho mayor. Es decepcionante. Él ya tiene a alguien en su vida, mientras que a mí me ve como un niño, aunque este año entro a la academia.

—¿Usted es? —pregunta la persona que resguarda la lista de invitados.

—Regi Alves —respondo mostrando el sello de la invitación.

Inspecciona el sello y me deja pasar indicándome mi lugar correspondiente, la zona uno del lado derecho. Entro al lugar y veo el salón de exposiciones. Los asientos y mesas están ubicados alrededor del lugar de exposición, formando círculos que se hunden de manera escalonada. Bajo hasta el primer piso, el más cercano al expositor y tomo asiento. Al lado mío ya estaba sentada una chica, mi compañera de clases, Walda Nirbi.

Ella también era otro objeto de estudio, como yo, con la diferencia de que ella es una noble, parte de los aquelarres principales y familiares de la misma emperatriz. Es dos años menor que yo, pero con los trajes que siempre viste y peinados sencillos, pero elegantes, pareciera que fuera de mi edad. Desde un principio, no congeniamos bien; sin embargo, nos soportamos ya que queremos estar cerca de la misma persona.

—Atum —saludo luego de sentarme. —¿Lo has logrado ver?

—No —resopla. —Pero traje lo que acordamos, ojalá que el otro tipo no nos gane.

Cuando se refiere a "traje", significa que su empleada lo tiene; y con "tipo", nos referimos al... novio de nuestro profesor. Mi compañera saca de su bolso una pequeña libreta y una pluma para entretenerse dibujando. Ha agarrado ese hábito desde que vio los hermosos dibujos de nuestro profesor. 

—¿Va a venir? —pregunto con disgusto y ella asiente con una mueca.

—Ayer lo vi de casualidad por la plaza principal mientras estaba de compras —comenta. —Estaba solo, entrando a una librería.

—¿Librería? ¿Le va a regalar un libro? —cuestiono en forma de burla.

—Tal vez —se encoje de hombros y acomoda uno de sus cabellos rubios detrás de la oreja. —Pero, si es así, nuestro regalo es mucho mejor. Mil veces mejor.

Me quedo pensando apoyado sobre la mesa. Es verdad que nuestro regalo es mejor, a comparación de un libro; sin embargo, esa persona lo conoce más tiempo que nosotros. Tiene mucha ventaja. Quizás sea un simple libro, pero puede haber un significado en esa acción.

A nuestro alrededor, se iba llenando de varios invitados relevantes, sobre todo de investigadores y profesores reconocidos en el área de conocimientos mágicos básicos. También, hay algunos alumnos de último año de la academia que conocimos durante nuestro entrenamiento. Y, al frente nuestro, estaba ese tipo de ojos azules brillantes, con el cabello negro amarrado en una coleta corta. Cuando su mirada se encuentra con la mía, saluda con una sonrisa mientras bajaba levemente la cabeza. En respuesta también hago una pequeña venia y dirijo mi mirada hacia otro lado. Seguramente ya va a empezar.