❛ RED QUEEN ❜ ❝la reina roja era significado de evolución y poder.❞
Kim SeokJin, un simple estudiante
universitario, decide disfrutar de una
noche libre en un club junto a sus ami-
gos... pero la noche se vuelve de terror
y él termina herido...
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red queen treinta y ocho
SEOKJIN FRUNCIÓ EL ceño cuando vió como AhReum se encorvaba hacia adelante y tosía fuertemente en seco, el pelinegro haciendo una mueca desagradable al escuchar el sonido de la tos seca.
SeokJin había decidido pasar el día en el penthouse de AhReum ante la insistencia de la susodicha para que se quedara con ella, y él tampoco quería irse, así que no puso mucha resistencia.
—¿Quieres que te traiga agua? —SeokJin preguntó, mirando a AhReum preocupado.
Pero frunció el ceño cuando la pelinegra negó.
—Estoy bien, tranquilo, es una simple tos repentina —AhReum le quitó importancia al asunto.
Pero SeokJin supo que esa tos era seria cuando notó la mancha de sangre en la palma de la mano que AhReum había utilizado para cubrir su boca.
—No creo que no sea nada si estás tosiendo sangre. —SeokJin miró a AhReum serio, para luego levantarse de su lugar e ir hacia la cocina para llenar un vaso de vidrio con agua natural.
SeokJin regresó con el vaso de agua en mano, tendiéndoselo a AhReum quien lo aceptó resignada. El susodicho notó que la mujer mayor estaba evitando su mirada mientras bebía el agua a lentos sorbos, haciendo que el bufara.
AhReum finalmente dejó el vaso sobre la mesita delante de ellos y se volteó hacia SeokJin para enfrentarlo.
—Probablemente tenga cáncer de pulmón —AhReum soltó con una expresión en blanco, como si no fuera nada serio o algo sin importancia.
SeokJin aseguró que si él estuviera bebiendo el vaso de agua que le dió a AhReum ese momento lo hubiera escupido en la cara de la pelinegra, lo que hubiera sido bastante vergonzoso, si era sincero. Pero, más allá de eso, estaba sorprendido. AhReum se veía sana, ella se veía como el tipo de persona que podía tirarse de un barranco y salir ilesa de eso.
Era demasiado increíble para él que aquella mujer tuviera cáncer, una enfermedad que podía acabar con su vida de manera definitiva. Y, encima, ella no parecía asustada, no parecía importarle y seguía viviendo como si nada.
—¿Y lo dices así? ¡Puedes morir! —SeokJin se exaltó en su lugar, mirando enojado a AhReum cuando ella se rió de él—. Por eso nunca es bueno fumar, mucho menos por tantos años.
AhReum rodó los ojos.
—Deja el drama, SeokJin. Iba a morirme de algo de todas formas. —AhReum se encogió de hombros sin mucha importancia.
SeokJin seguía mirando a la mujer con incredulidad, sin creer que ella fuera tan insensible con su propio problema que podía llevarla a la muerte.
—¿Si sabes que puedes morir, no? —SeokJin jalarse de sus cabellos cuando AhReum se encogió de hombros—. ¿Al menos te vas a someter a alguna ayuda? —SeokJin preguntó desesperado.
AhReum se burló, como si la mención de la terapia fuera graciosa para ella.
—Me gustaría conservar mi cabello, no, gracias. —AhReum se levantó de su asiento para tomar una copa y llenarla de vino en el mini bar que tenía en su penthouse.
