Megan ahogó un grito.-¿Qué...qué pasó? .- Fueron las palabras que alcanzaron a salir de mi boca.
-Todo salió mal…en algún momento las perdimos. Alguien robó mi señal. Después de que Thomas les hablara perdimos el contacto con ustedes, nos dimos cuenta y fuimos hacia ustedes y esto salió justo ahora.- Daemon señaló la pantalla con su dedo.
Mis pulmones aún ardían, mire el rostro horrorizado de mi amiga. Alguien había asesinado a dos seres humanos inocentes por nuestra culpa, pero a los chicos no parecía importarles, al menos no mencionaron algo al respecto. Y no solo eso, si no que sabía que su objetivo no eran ellos, si no nosotras. Si él nos hubiera alcanzado estaríamos igual que ellos. Ahí entendí la magnitud de la situación en la que nos habíamos metido o yo había metido a Megan. Ameon recibió una llamada.
-Aquí están. Están bien las dos. Si.- Y colgó.
-Las páginas perdidas y esto no son coincidencias.- Mencionó Aemon.
-Y quien sea que sea sabe que tenemos los diarios.- Mi voz era un susurro pero audible.
Una vez los cuatro en la casa, escuchamos la puerta abrirse de golpe. Thomas venía a paso veloz hacia nosotros.
-¿¡ Me pueden explicar qué diablos fue eso!?.- Dirigió la mirada a cada uno de nosotros como un padre reprimiendo a sus hijos.
-No lo sé Tom.- Daemon habló nervioso.- La señal fue interceptada.
Michael apareció en la escena, corrí a sus brazos, unos que me recibieron y tomó mi rostro en sus manos.
-¿Estás bien? .- Examino mi cuerpo, mi rostro y cada parte de mi buscando alguna herida.
-Si. ¿Tu?
-Ahora sí.- Me sonrió tranquilo, como siempre. Esa sonrisa me dio la tranquilidad que necesitaba.
-Y tu.- Thomas se acercó a mí a paso decidido.- ¿Por qué diablos te quedaste pasmada como gato escurridizo? .- Lo fulmine con la mirada y si quería desquitar el miedo y el enojo con alguien ese era el momento.
-¡Ah, claro! De nada por salvar tus estúpidos diarios.- Le lancé la mochila, una que agarró con agilidad.- ¡Arriesgamos nuestras vidas por esos estúpidos libros y lo que obtenemos es tu estupida ira!.- Las fosas nasales de él se inflaron, sus puños se cerraron con fuerza y sus nudillos estaban blancos.
-¡Tenían que correr, por una mierda!. Ah no pero decidiste quedarte petrificada como gato.- Intentó nivelar el tono de su voz pero fue en vano.
-¡Bueno si yo soy un gato estoy muy segura de que tu eres un gusano rastrero! .- Thomas estaba equivocado si creería que me quedaría callada.
-Los dos basta.- Michael se interpuso entre nosotros.- Si peleamos entre nosotros, él habrá ganado. Y tú.- Se dirigió a Thomas.- Deja de gritarle.- Eso pareció volver a encender a Thomas.
-¿O qué harás? ¿Necesita de su novio para que la defienda? .- La furia se disipó en mi por un segundo, alterne la vista en cada uno. Michael se giró hacia él que era unos centímetros más alto. Todos notamos la testosterona en el ambiente y juro que me llegó un olor a corrida de toros.
-¿Podemos enfocarnos en lo importante? .- Hablo Daemon al ver que ninguno de los dos cedería.- Dejen su papel de gladiadores tratando de salvar a la chica y concentrémonos en lo importante. Necesitamos saber que tienen esos diarios.
Los tres miramos a Daemon y nos comportamos como los adultos que éramos, o casi adultos post- adolescentes.
Thomas se tranquilizó y Michael se mantuvo aún más calmado que de costumbre. Todos caminamos hacia el sótano de la casa Mikaelson con el ambiente tenso y nerviosismo de cada uno, dejando su rastro en los pasillos de la enorme casa.
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Los Hijos de Anfield (#1)[Completa✔]
Fiksi RemajaEl olor me sacó de mis pensamientos. Un olor inundó mi nariz, el olor de un cigarrillo. Giré para ver de dónde venía el olor y mis ojos se abrieron como platos. Thomas Mikaelson estaba ahí, en la oscuridad, su traje impecable, con un vaso medio vac...