Carry On

O5 "De compras"

Ahora que me doy cuenta, era yo la que me hacía a un lado. Ahora que lo comprendo mi vida siempre ha estado en soledad o aislamiento por mi culpa, después de pensarlo mejor no estaría tan mal asistir a la fiesta de James, después de todo ellas estarían conmigo y yo podría conocer a más gente, me gustaba hablar y reír, no debía tener miedo…no, él no tenía poder sobre y asentí a mis adentros, observándolas a lo lejos charlar con los chicos y yo sentada en la jardinera esperando a que se desocuparan. Sonreí para mí al tener en mi mente un atuendo perfecto para el sábado por la noche, imaginaba en mi mente algo que pudiera llamar la atención de los muchos y los pocos…estaba tan entusiasmada que no me di cuenta en qué momento ambas me miraban con una cara llena de picardía.

—     ¿En qué tanto piensa, señorita Brooks?

—     Oh…en nada…solo que am…tengo hambre – mentí

—     Bueno…vámonos…además tenemos que buscar la ropa para la fiesta – Natalia no cabía de tanta emoción

—     Si…vámonos – dije entusiasmada…

A ambas les pareció extraño mi comportamiento, pero es que de verdad estaba emocionada por ir y llegar a ese momento donde todos vieran a la chica rara vestida de manera sexy…sé que puedo hacerlo, y hasta a Matt se le van a caer los calzones al verme.

Por suerte para todas, Victoria ahora tenía el auto de su madre, le daban mucha libertad a veces con el auto, pero ella conducía bastante bien y además solo éramos tres. Llegamos a una plaza realmente enorme, había más tiendas de ropa que de comida, Voctoria bajó del auto como una diva y nos sonrió.

—     Les encantará este lugar…pero primero…¡¡vamos a tragar que muero de hambre!!

Natalia y yo reímos de lo lindo al caminar por aquellos pasillos con azulejos blancos, tiendas de ropa por aquí, por allá…era increíble que se gastaran el dinero en cosas que podrías encontrar en un tianguis o de segunda mano, pero obviamente ellas no comprarían en ese tipo de lugares, no es que yo lo haga todo el tiempo…pero a veces encontrabas cosas geniales en esos lugares que en estos jamás encontrarías a un precio razonable.

—     Pide lo que quieras, linda…va por mi cuenta

Caminé para ver los diferentes pequeños restaurantes unidos que había en esa área de comida. Sushi, carnes, pizza, hamburguesas…hummm…en realidad se me antojaba algo más…a mí estilo, y al fin encontré algo de pollo con salsa agridulce, ensalada y un poco de arroz, verduras salteadas con salsa BBQ, olía tan bien que la saliva se me salía por la boca. Por fin me dieron mi plato y caminé a una mesa donde estaban ellas dos, Victoria con su enorme plato con sushi y muchas otras cosas raras más y Natalia con una pizza con carnes frías y soda. Me senté a su lado y comenzamos a comer.

La manera en que ellas eran, sus risas y su presencia me ayudaban mucho a no sentirme sola, a no meterme en mis fantasías y sufrir por ello…quería imaginar que esta era mi mejor realidad, pues quedé un tanto traumada con aquellas imágenes de una familia con el arrogante Matthew Sanders.

Al caminar por los pasillos, me dejaba guiar por donde ellas quisieran irse, yo no sabía mucho de ropa…mucho menos de vestidos, no solía usarlos porque imaginaba que no se me veían bien…pero ahora que lo pienso espero que uno me entre, tragué tanto que en cualquier momento el botón de mis jeans saldría volando.