2O "Bonita sorpresa"

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Luego de dejar a Sophie y a Zack en la casa de este último, Matthew manejaba tranquilo rumbo a mi hogar. La noche ya había caído de lleno, eran apenas las once de la noche y bueno, las calles públicas estaban prendidas.

—     Te veo el lunes entonces – dije tranquila tomando mi bolso de mano

—     Así es...rayos, encima tengo un examen y no estudié

—     ¿De qué es?

—     Anatomía ¿Te gustaría ser mi modelo mañana? Digo...para que se me grabe bien todo

—     Si claro – sonreí cuando llegamos a mi casa

Apagó el motor y puso el freno de mano, salió del auto sin más y ayudó a cargar mis maletas. Llegamos a la entrada y parecía estar muy tranquilo adentro. Me sentía como niña de secundaria al recibir su primer beso, sus ojos estaban fijos en mí y el calor en mis mejillas subió de repente. Se acercó tomando mi nuca y presionó mis labios contra los suyos.

Ese embriagante sabor suyo, del cual jamás me hartaría, si pudiera vivir de ellos lo haría sin pensarlo. Se separó de mí de una manera suave y me quedé algo disparada...reaccioné poco a poco al mirarlo de nuevo. Por suerte el tema del restaurante no volvió a salir a relucir...eso era bastante bueno... ¿Cierto?

—     Nos vemos el lunes...bonita

—     Adiós, Matt...gracias...pues por todo

—     Fue un placer – guiñó el ojo y mi piel se erizó por completo

Al entrar a casa, las luces estaban apagadas. Mamá, supongo, estaba dormida así que subí como pude hasta mi cuarto. Dejé las maletas y como una pequeña prendí la computadora para pasar todas las imágenes de mi celular y cámara. Jamás me hubiera imaginado que esas jodidas vacaciones forzadas hicieran que mi relación con Matt cambiara y que conociera a gente tan extraordinaria. De verdad...fue como una bendición.

Pronto caí rendida en la cama, me costaba ver la hora pero por suerte era domingo. Escuché la puerta abrirse y unas delicadas manos acariciar mi cabello algo despeinado por el rodete en mi cabeza.

—     Llegaste, mi amor – besó mi frente

—     Hola, ma – dije somnolienta

—     Anda, vamos a desayunar

Asentí suave al sentir que se fue y me estiré sobre la cama. Me saqué la ropa de ayer, me di un baño rápido y coloqué lo primero que vi. Unos mino shorts ajustados al cuerpo, una blusa holgada de tirantes con una bien entallada abajo, sandalias y mi cabello suelto para dejar que se seque. Bajé las escaleras y llegué, como solía hacer, a la cocina...pero me quedé helada al ver a un hombre con camiseta negra holgada, bermudas verde militar y un cuerpo de putamadre.

—     Buenos días, Lois

Mis ojos se abrieron tan grandes, que parecían salirse de las órbitas. Poseía barba de candado, cabello algo revuelto y largo hasta los oídos, enormes brazos tatuados, mantenía un físico atlético pero que no se mataba en el gym, tenía ojos azules y piel morena. Mi mamá se había conseguido todo un modelo...

—     Hija...él es Thomas...estaba ansiosa porque llegaras y lo vieras - *si mamá, gracias por avisar....y yo usando shorts cortos*

Carry OnWhere stories live. Discover now