Blinded by childhood, friendship and love

「 XLV 」

⚘ Quédate ⚘

Se miraron entre sí debatiéndose. Era tarde y mañana sería un día importante, además era el móvil de Hawks.

El mayor sabría lo que haría el alado y efectivamente intentó esquivarlo para llegar al móvil, siendo mas aprensado contra la pared en el intento. No era un buen momento para el menor al encontrarse ahora desnudo, más para Dabi que se le comenzaban a resbalar los pantalones hasta las rodillas.

—Quédate así— Dictó Hawks entonces, sorprendiendo al mayor y tapándo a ambos con las alas.

Vio cómo unas plumas fueron a por el teléfono acercándoselo a los dos hasta que Hawks pudo sacar la mano y cogerlo.

—Es Norikage-san.

—Joder, no se lo cojas.

—Deja de refunfuñar, ya sé que no te cae bien pero esto es importante— El mayor bufó, notando ahora cómo comenzaba a hablar.

Aprovechó para quitarse por completo los pantalones caídos, quedándose en boxers y mirándo a Hawks.

Este, notó lo que hizo e intentó no mirar demasiado, no sabría bien cómo se encontraba Dabi pero el alado desde luego estaba muy sensible.

—¡Hawks! ¿Qué pasó? ¿Hablaste con tu madre? ¿Y Dabi? Mañana definitivamente todo será mostrado, espero que puedas manejarlo— Norikage estaba emocionado, oyendo simples ruidos externos a través del teléfono y un sonido gutular preocupado por parte del menor.

—Norikage-san, será mejor que hablemos mañana, estoy muy cansado— Se excusó de golpe, haciendo sonreír al mayor, quién juntó sus caderas de nuevo. Hawks tapó sus labios con la otra mano por notar el acercamiento tan profundo, preocupando a Norikage.

—¿Hawks? ¿Estás bien? ¿Estás con Dabi?

—Qué pesado... tantas preguntas. Lo estás haciendo bien pajarito —Casi dijo aquello cómo si ronroneara, cerca del oído del alado y causándole más escalofríos. Intentaba no seguir jadeando por algunos minutos ahora aunque Dabi quisiera lo contrario.

—Sí, estoy con él y todo está bien Norikage-san, mañana te contaré los detalles— Quiso terminar el alado, aunque a Norikage esto solo le molestó, no se llevaba bien con Dabi aunque quisiera y también le recorría cierta envidia.

—Baja tu voz pajarito, comienza a volverse aguda— Avisó el mayor en otro susurro, haciendo parecer su voz más grave y aumentó la fricción de sus caderas. Por suerte Norikage no escuchaba la voz de Dabi pero sí encontraba a Hawks más extraño.

—¿Dormirá allí de nuevo? —Interrogó.

—Se quedará por ahora a vivir conmigo, Norikage-san — Este se sobresaltó, logrando que Dabi sonriera y le recorriera cierta emoción.

—¡¿Cómo?!

—No tendrá a dónde ir si no. No puede estar ya en el Frente y menos en su antigua casa— argumentó el alado, haciendo suspirar a Norikage.

—Cómo te haga algo que no deba te juro que yo me encargaré personalmente de él— Dabi rió orgulloso y en bajo.

—Que lo intente, eres mío ahora— Hawks le echó una mirada fulminante a pesar de haber adorado lo que le dijo y con una de sus manos, el mayor acarició su cuello, besándole de nuevo para que ahora le costara más respirar al menor, aumentando el ritmo de sus caderas para que perdiera fuerza en el agarre del móvil.