Todo comenzó en la cárcel.
•SARAWAT - TYPE - THARN - TINE•
Ser el culpable de un asesinato le cambiaría la vida a cualquiera, haber estado en una de las pandillas más peligrosas no llenaría de orgullo a cualquiera. Estar en la cárcel por ser un atr...
Tharn había salido rumbo a las universidades para hacer la venta de las drogas, el mayor iba un poco tarde y seguramente varios de los chicos lo estaban esperando. Uno de los chicos era Ae que lo esperaba en la entrada de la facultad, aquel chico tenía su bicicleta en la mano y estaba un poco apurado pues sus clases ya iban a iniciar.
Luego de unos minutos llegó Tharn y le dió el pedido de siempre; dos pastillas energizantes y una para poder dormir. Ae se tomaba una pastilla energizante antes de iniciar la primera clase, la otra la guardaba para las clases de la tarde, el menor guardo las pastillas en su bolso y le pago a Tharn cuando en ese momento llegó Pete.
- Ae... ¿Que estás haciendo? - Preguntó el chico con curiosidad. - ¿Por qué le estás entregado dinero a Tharn?
- Pete... Solo es un favor que le debía a él. - Respondía Ae nervioso, mientras volvía a tomar su bicicleta y tomaba de la mano a Pete para darle un poco de calma hasta retirarse. Tharn se hizo a un lado donde luego se encontró con otros chicos más y se iría a otra universidad donde lo esperaban otros chicos.
Antes de entrar a clases Ae entro al baño a lavarse las manos, antes de entrar le entrego el bolso a Pete para que se lo sostuviera, mientras que Ae salía del baño Pete miró por dentro del bolso, una pequeña caja de color verde con rojo le llamo la atención al chico, la tomo con la mano y la abrió.
- ¿Ahora tomas medicamentos? - Pregunto Pete cuando Ae salió del baño. - o talvez Tharn ahora es tu médico personal.
- Pete no es lo que tú crees. - Respondió Ae prevenido. - Devuelve eso al bolso por favor.
Pete arrojó el bolso de Ae al piso, y salió enojado del edificio donde estaban, el chico corrió hasta donde estaba Tharn con tal de enfrentar a Tharn. Cuando llegó al lugar el mayor ya no estaba, su venta en la facultad ya la había hecho y ya estaba de camino hacia otra universidad, al momento llego Ae corriendo intentando calmar a Pete, pero era casi imposible. El chico estaba decidido en buscar a Tharn y de no ser capaz iría hasta la policía con tal de denunciarlo.
•••
Bright seguía apuntando con el arma a ambos chicos, Win se comenzaba a poner nervioso al punto que un dolor de cabeza lo comenzaba a atormentar y lo hacía quejarse.
- win... ¡Win! ¿Estás bien? - Pregunto Wat acercándose sin bajar las manos.
- Bright yo solo vine por un poco de comida y mi ropa, déjanos ir por favor. - Suplicaba Sarawat.
- De rodillas los dos, ¡Contra esa pared! - Gritó Bright. - Es mejor que no intenten hacer nada. - Decía el mayor que seguía apuntando a los chicos que se habían arrodillado aun lado de la sala sosteniendo sus manos en lo alto. Bright paso hacia el antiguo cuarto de Wat, y comenzó a buscar la ropa hasta botarla al piso y luego arrastrarla hasta la sala donde estaban los chicos. - Llévate tu mugrosa ropa y te vas, en mi puta vida quiero volver a verte. - Gritaba el mayor sin bajar el arma.
Sarawat recogió la ropa que había traído su hermano y luego tomo a Win por la espalda para guiarlo hasta la puerta y así cuidarlo para que Bright no le hiciera nada. Los dos chicos salieron de aquel edificio, Wat había encontrado una bolsa donde guardo la ropa que había sacado del apartamento, Win se siguió quejando de dolor de cabeza.
- Sarawat me siento mareado, ¿podemos sentarnos un momento? - Decía Win suplicando antes de que pudiera desmayarse.
Sarawat lo tomo de la cintura y en un pequeño parque por dónde iban pasando los chicos se tomaron asiento en el césped.
- Tranquilo, todo va a estar bien, respira. - Decía Wat. - No te va a pasar nada malo mientras estés conmigo. Yo te voy a cuidar.
El mayor intentaba calmar a Win al punto que el menor se acostó en las piernas de Wat para poder cerrar sus ojos e intentar calamar el dolor de cabeza. Un arma de fuego color negra se comenzó aparecer en su mente, en medio de la calle alguien apuntaba en su frente.
- ¡Win! ¡Win! ¡Despierta! - Decía Sarawat moviendo a Win con tal de hacerlo despertar de ese sueño, el menor se estaba quejando muy fuerte e intentaba hablar desde dormido.
- Me querían matar. - Grito Win cuando despertó de aquel sueño.
- Tranquilo, respira... Nadie te va a matar, yo estoy acá. - Decía Sarawat mientras acariciaba su espalda.
El menor seguía sin recordar por completo que había pasado antes de llegar al lago, los sueños borrosos que tenía lo dejaban más confundido. Por ahora su dolor de cabeza había disminuido, cuando se estaba poniendo de pie metió la mano en el bolsillo y recordó que había podido tomar algo de aquella casa.
- Se me había olvidado decirte que pude tomar esto de dinero. - Decía Win entregándole a Wat dos rollos de dinero. - Los alcance a guardar cuando ví a tu gemelo. El mayor abrió sus ojos al ver la cantidad de dinero y abrazó a Win de inmediato sin pensarlo.
- Win eres lo mejor, esto es suficiente para sobrevivir por unas semanas. - Decía con emoción Wat. - Esto también es para ti, yo te voy a cuidar hasta que estés bien.
- No quiero ser una molestia para ti. - Decía avergonzado el menor.
- ¡Qué! ¿Molestia? - Dijo con una carcajada. - No lo eres, y si ese fuera el caso serás mi mejor molestia.
•••
Bright había regresado al apartamento para buscar su celular que se le había quedado, cuando entró fue cuando encontró a Wat y Win. Lo que más podía odiar es que lo confundieran con su hermano gemelo, ambos chicos se tenían resentimiento, las últimas semanas antes de que Sarawat entrará a la cárcel la relación con su hermano se había vuelto mucho más conflictiva.
Una cadena bañada en oro, con un dije en forma de rombo y unas letras habían destruido las ilusiones de Bright. Quizá su hermano le estaba quitando lo que más quería.
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