Todo comenzó en la cárcel.
•SARAWAT - TYPE - THARN - TINE•
Ser el culpable de un asesinato le cambiaría la vida a cualquiera, haber estado en una de las pandillas más peligrosas no llenaría de orgullo a cualquiera. Estar en la cárcel por ser un atr...
Wat, Win y Tharn llegaron casi al tiempo a la vieja casa donde se estaban quedando, Type estaba descansando en la habitación.
- ¡Ey! Chicos... ¿Como les fue? - Preguntó Type levantándose de la cama con curiosidad.
- Logramos conseguir dinero, tenemos que irnos de esta casa. - Respondía Wat.
- ¿A donde se piensan ir? - Pregunto Tharn.
- Estuve pensando y creo que nos podemos ir los cuatro a un mejor lugar, esta casa está que se cae a pedazos. - Respondió Wat.
- Pero... Type y yo no tenemos el dinero suficiente. - Respondió Tharn con desagrado. - ¿De donde vamos a sacar más dinero?
- ¡Trabajando! - Dijo Wat con tono serio. - Yo no salí de una cárcel para vivir en este lugar, ¿Como has podido vivir acá? - preguntaba Wat.
Los chicos mantenían una discusión por un momento, Wat estaba decidido irse de aquel lugar y llevar a Win, todo sería mejor si los otros chicos aceptan irse con ellos, pero Wat no los obligaría y sabía muy bien como encontrar dinero para sobrevivir. Al siguiente día Wat saldría decidido a buscar a un nuevo lugar para vivir, por el momento se acercaba la noche y los chicos volverían dormir los cuatro en la cama.
- Ey Wat... Esta noche cuando volvamos a dormir ¿podrías acostarte a mi lado? - Decía Win con un poco de vergüenza haciendo que sus mejillas se ruborizaran. - Contigo me siento seguro por ahora, prometo no incomodar.
- Ahí voy a estar para ti. - Respondió Wat acariciando el cabello del menor.
Llegada la noche los chicos se volvieron acostar de la misma forma que la noche anterior, Wat volvió a tomar a Win de la cintura para asegurar que no cayera al piso. Mientras abrazaba al menor sus ojos se volvían un pequeño mar de lágrimas, sus recuerdos regresaban, había pasado tanto tiempo desde la última vez que había dormido dos noches seguidas abrazando a alguien; nunca olvidaría aquellas noches cuando celebró sus dieciocho años.
- Eres un chico bueno Win. - Decía Wat con un suspiro y un susurro.
•••
Los chicos comenzaron a empacar las pocas cosas que tenían en la casa, Sarawat ya había encontrado un pequeño apartamento donde podrían vivir los cuatro. Todos se fueron a aquel barrio de estrato bajo pero eran mejores condiciones, Tharn había aceptado ir a vivir a la nueva casa con la condición de que los cuatro seguirían unidos. Luego de una mañana de mudanza, Type decidió salir a un centro comercial cercano a comprar algo de almuerzo para todos. Mientras estaba en el pasillo de cereales Pete lo tomó por sorpresa.
- Ey Type, me da gusto verte de nuevo. ¿Cómo estás?
- ¡Shh! - Puedes hablar más bajo ¡por favor! - Suplicaba Type. - La policía me está buscando.
- Lo siento, pero ya que te encontré acá quiero hablarte de las pastillas de Tharn.
- ¿Pastillas? - Pregunto Type intentando dejar a un lado a Pete, pues su presencia era molesta. - No se de qué me estás hablando.
- Las Droga que vende Tharn en la universidad... Ae le estaba comprando y yo estaba decidido en ir hoy a la policía.
- Tu estás acostumbrado a hablar de más así que es mejor que te calles. - Anuncio Type acercándose al menor y lo comenzó a amenazar con una navaja que cargaba para su defensa. - Te vas a quedar callado y me vas a esperar, voy a pagar esto y vas disimular sin que las cámaras nos vean, si intentas hacer algo no te lo voy a perdonar. Y no me importa si regreso a la cárcel. !oíste! - Type pago las cosas que había tomado y salió junto con Pete de aquel centro comercial, en la calle volvió a sacar la navaja y lo comenzó a llevarlo a la casa donde estaba Tharn.
- Ey Type... No me hagas nada prometo no decir nada a la policía. - Repetía el menor mientras caminaban a la casa.
Cuando llegaron a la nueva casa todos los chicos estaban ahí, Type le pido a Wat y Win salir un momento de la casa para poder hablar. Type no sabía de el negocio que Tharn tenía con la venta de drogas en las universidades, y le molestaba que no le haya dicho.
- ¡Ey Tharn! - Grito Type cuando entró y empujó a Pete hacia adentro.
- ¿Que pasa? ¿Que hace Pete acá?
- Aquí el niño iba denunciarte a la policía por una venta de drogas, ¿Me puedes decir que drogas?
- Type... No te había dicho porque sabría que ibas a estar en contra y... Era lo único que tenía para sobrevivir mientras estabas en la cárcel. - Decía Tharn intentando calmar a Type.
- ¡Eres un idiota! - Grito Type acercándose y empujando a Tharn, saliendo de la casa y golpeando la puerta, dejando a Pete y Tharn solos.
- Ya ves lo que haces por estar en lo que no te importa. - Decía Tharn mirando con un poco de odio a Pete. - Me conoces desde hace tiempo y me haces esto. Tharn comenzó acercarse a Pete lentamente sin quitar la mirada de sus ojos. - ¿Cómo crees que vamos arreglar esto? - Dijo Tharn hasta tomar por la espalda a Pete. - ¿Te estás poniendo nervioso? - Decía mientras susurraba en su oído.
El mayor tomó a Pete con su brazo pasándolo por el cuello hasta llevarlo a una de las habitaciones que estaba llena de algunas cajas, y empujó contra una pared al menor dejándolo de espalda.
- ¿También vas a ir a decirle a la policía de esto? - porque yo puedo decir que tú te insinuabas, que yo te gustaba sexualmente hasta que llegó Ae. - Siempre me deseaste. - Susurro el mayor en su oído. - Yo tengo todo lo que a ti te gusta.
El mayor abrazo por detrás a Pete, sus manos grandes comenzaron a pasearse por el pecho del menor, haciendo que las nalgas de Pete se acercarán a la entrepierna de Tharn y provocarán una erección en él. - ¿Puedes sentir eso? ¿Eso es lo que siempre has deseado?
- Ey Tharn... - Susurro el menor con los ojos cerrados mientras el mayor lo mantenía contra la pared sin dejarlo moverse.
Tharn se desabrochó la camisa que tenía en ese momento, quedándose solo en un jean negro que tenía. El mayor giro a Pete para que estuvieran frente a frente. - ¡Tócalo! - Dijo el mayor tomando una mano de Pete y poniéndola en su erección y la otra mano en su pecho.
- Es grande. - Anuncio el menor con un poco de deseo. - Pero déjame ir... Prometo que no diré nada. Por favor dejame. No le voy a fallar a Ae. - Suplicaba el menor mientras sus manos acariciaban aquel deseo que Tharn siempre había provocado en sus sueños y fantasías.
Tharn tomo del cuello a Pete con una sola mano, sus venas en su mano se marcaban y aquellos anillos que siempre se ponía, lucían muy bien con la cara de placer que tenia el menor. - No lo vuelvas a hacer si no quieres fallarle a Ae. - Dijo Tharn en tono de amenaza acercándose hasta rosar sus labios y traspasar su aliento con el de Pete y luego pasando su lengua por el labio inferior.
- Recuerda que los chicos buenos como tú también se pueden portar mal aveces... Y si eso quieres ya sabes dónde encontrarme. Ahora vete, tu chico te debe estar esperando.
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