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Te estaba ayudando a comprar la despensa de esta semana. Me pediste ayuda por esa vez, así que fui.

Mientras comprábamos lo de esta semana, vi algo que me llamó mucho la atención: una cuerda trenzada de colores, que es un juguete para perros. Mis mascotas ya tienen bastantes juguetes para ellos de por sí, por lo cual ellos no necesitan algo nuevo: pelotas y cuerdas, eso es lo que tienen para jugar. Pues en realidad, yo quería la cuerda para mi solo. Casi nunca puedo tener cosas propias porque van destinado a mis perros, o a mis seres queridos, y por esa razón casi no tengo para mí; lo único que tuve para mí fue mi ropa característica de color azul, el cual ahora es mi uniforme diario.

Cuando pasamos en frente del juguete en oferta sólo te lo comente, aunque de todos modos no esperaba comprarlo. Igual no tengo dinero.


...


Mientras me ayudaba a comprar la despensa de aquella semana, me comentaste que querías un juguete para perros en oferta. Era una cuerda trenzada de colores muy llamativos, resistente y muy suave; dijiste que sería genial tenerla, así podrías usarla como antidesestresante o un calmante. Refutaste que de todos modos no tenías dinero para ello.

Te pedí que te adelantaras unos pasillos más adelantes y averiguaras por una avena. Mientras tanto, metí el juguete en el carro de compras.


...


Cuando regrese de averiguar precios, ya estabas en la caja registradora pagando todos los productos. Una vez que salimos de ahí, me mostraste entre tus manos el juguete que yo tanto quería, para dármelo. Te doy tanto las gracias.

🌾;; Flufftober Marindy | 31 MinutosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora