MI ÁNGEL

CAPITULO 18: ÚLTIMA CITA Y HIELO

Naruto y Neji se encontraban hablando en la habitación del rubio, hoy era su semana de cita y el ojiperla estaba algo preocupado por él.

-¿Estás seguro?, Por mi podemos quedarnos y ver algunas películas, no quiero que te arriesgues, ángel- dijo y acarició su mejilla.

-Voy a estar bien, tranquilo- dijo y besó su mejilla- demonos prisa, así tendremos más tiempo, papá quiere que volvamos altes de la una por seguridad.

-Bien, pero si necesitas algo o te duele algo dime, no quiero que les pase nada- dijo y sobó el vientre del menor.

Salieron directo a la sala dónde solo estaban Sakura, Karin y Midori quien veía la televisión.

-¿Se van?- Preguntó la pelirroja.

-Si, volveremos más tarde- dijo el rubio y besó la mejilla de su hija- pórtate bien.

-Si mami, que les vayan bien, y cuiden a mi hermanito- dijo con una sonrisa.

-Cuidaré de ambos, cariño- dijo el castaño y revolvió sus cabellos.

-¡Adiós papi!- exclamó la menor.

Salieron de la guarida y a paso lento caminaron hasta el pueblo donde irían al festival de cine que se hacía cada año.

-¿Quieres que te compre algunos dulces?- Preguntó el castaño.

-Si no es mucho pedir- dijo el rubio con un leve sonrojo.

-Todo por ti mi ángel- dijo y lo besó.

Naruto no tardó en responder, adoraba cuando lo besaban con tal cariño, luego de tanto realmente quería darse otra oportunidad.

Siguieron su camino hasta los puestos de comida y compraron dangos, dulces de leche y gomitas. Tomaron su lugar bajo la carpa y esperaron a que la película comenzará.

-¡Volvimos!- exclamó la pelimorada- Karin, ten tu prueba.

El resto de la asociación había estado toda la tarde de misión, consiguiendo algo de dinero para el nuevo bebé. Karin le pidió a Khonan que en su regreso le comprará una prueba de embarazo para comprobar si su experimento había funcionado.

-¡Gracias!- exclamó y la guardó- me la haré mañana al despertar.

La pelirroja seguido comiendo mientras la pelichicle le miraba con una boba sonrisa.

-¿Dónde está Midori?- Preguntó Kakashi.

-Fue al baño- habló la ojijade.

La pequeña entró algo espantada a la habitación , cosa que notaron todos.

-¿Pasa algo hija?- Preguntó Kiba.

-Es que... No sé que hice papá- respondió e infló sus cachetes- pero te juro que no fue intencional.

-¿Que pasó cariño?- Preguntó la pelimorada.

La menor la tomó de la mano -la cual por cierto estaba helada- y la llevó corriendo al baño.
Los otros cuatro se quedaron mirando a dónde se fueron ambas en busca de una respuesta.

-Kakashi- habló la pelimorada- Vayan por Naruto y envíen una carta a Madara, necesito que envíe un equipo de investigación a Konoha.

Todos se miraron sin comprender, sin embargo se separaron en tareas.

Naruto reía ante la película y el ojiperla no podía evitar mirarlo con una sonrisa, es que todo le parecía perfecto de aquel bello doncel.

-¿Pasa algo?- Preguntó el rubio.