Mansión Lombardo, dos días después.
Victoria llamó nuevamente a Hernán con el corazón acelerado. Su miedo porque el bebé tenga algo no cesaba. Hernán fue y Victoria le dijo que quería hacerse la prueba de descarte, que programe la fecha y le avise. Luego Victoria lo llevó a la salida con una sonrisa más tranquila.
—Gracias Hernán por venir, espero tu llamada —le dijo Victoria con gratitud.
—No estoy muy de acuerdo en tu decisión, sería bueno que le digas a Fernando —le aconsejó Hernán con seriedad.
—Como te dije voy a buscar el momento. Primero quiero saber los resultados —le respondió Victoria con nerviosismo.
Felipa ingresó levantando la ceja por la sorpresa.
—Buenos días doctor, Hernán —los saludó Felipa con ironía.
—Buenos días, Felipa —le devolvió el saludo Hernán con cortesía.
—Ya me imagino para qué vino—llevó sus manos a su cintura—. Así que lo único que pienso es que es un error por un tonto miedo de la señora y usted está apoyando su tarudez —le reprochó Felipa con franqueza.
—Felipa ¡qué te pasa! —la reprendió Victoria con molestia.
—¿Miedo? —preguntó Hernán con curiosidad.
—Se refiere al miedo que te comenté... solo que... —intentó explicar Victoria con dificultad.
Fernando llegó y se sobresaltó al ver a Hernán ahí.
—Buenos días, Hernán. Qué sorpresa encontrarte aquí... —saludó Fernando con extrañeza. Se acercó a Victoria, quien no lo esperaba, y la besó.
—No te esperaba tan temprano —dijo Victoria tocándose el cabello—. ¿Qué pasó?
—Me desocupé temprano y quise venir a estar contigo. Como en la tarde tengo tres reuniones vendré muy tarde tal vez... ¿Te sientes mal? —preguntó Fernando mirando a Hernán con preocupación.
—No, estoy bien. Solo quería... quería hablar con Hernán para que me ayude con unas dudas... —se tocó la oreja—. Para el libro.
—Pues qué mejor que Hernán para ayudarte —le acarició el rostro besando su mejilla con cariño.
Felipa movió la cabeza mirando a Victoria mientras Hernán no decía nada solo miraba a Victoria callado.
—Bueno ya cumplí con lo que tenía que hacer, me voy a la clínica —dijo Hernán finalmente con resignación.
—¡Espera! Hernán. Te acompaño a la salida. Quisiera hablar contigo, vamos afuera —le propuso Fernando con interés.
—Vamos por ahí —aceptó Hernán saliendo del lugar con cautela.
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Más allá de lo soñado
RomanceFernando Alanis busca a Victoria Lombardo, a pesar de que ella ya lo había rechazado debido a su diferencia de edad, resistiéndose a sus sentimientos. Pero él no estaba dispuesto a perderla. ¿Qué sucedió después? Es una historia de amor, celos, pasi...