Disclaimers: Los personajes son propiedad de J.K. Rowling y son utilizados sin ánimo de lucro alguno.
Este drabble/viñeta forma parte del Drinny-Con 2021, organizado este año por la página de facebook "DrinnyZone".
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La sonrisa incómoda de Ginevra fue confundida con una de amabilidad por los invitados durante lo que llevaba en aquella velada. Ya la habían felicitado por lo feliz que se veía acompañada de su prometido, y por la sonrisa del chico a su lado y la risa amable significaba que no pensaba desmentir aquello publicado por el periódico con más lectores del país. No es como si fuese a culparlo por aquella decisión era mejor mantener aquello así a tener que explicar de uno por uno a todos los invitados porqué The Sun; había sido tan impreciso con esa noticia oficial.
Llevó su mano a su rostro y se abanicó un poco; no sabía si era su imaginación o hacía demasiado calor en aquel salón, que para colmo era el mismo del que se había escapado y había sido fotografiada con Malfoy en el corredor detrás de aquella puerta, teniendo relaciones sexuales. Tampoco ayudaba que el susodicho hubiese asistido a aquella fiesta. Para colmo; acompañado de Astoria Greengrass.
Por supuesto que estaba enfadada, su reputación podía ser manchada en cualquier momento y él se dejaba ver con una bonita morena que para colmo era toda sonrisa y perfección. No la culpaba. Siempre había sido así de adorable, habían sido compañeras en el colegio. La chica salía del patrón de los chicos ricos y populares. Contrario de la hermana.
Se disculpó con Harry, haciendo una señal de que saldría en dirección al área de fumadores, pero una vez ahí desistió de la idea y fue a un balcón más alejado y para nada concurrido así que se recargó en la balaustrada, sin ánimo alguno, encendió su cigarrillo y se giró en dirección al jardín.
—No te ves muy alegre, Weasley.
Ginny apretó la quijada cuando la voz suave de Malfoy se escuchó a sus espaldas, lo que le faltaba, lanzó la ceniza de su cigarrillo al vacío y se giró de nuevo hasta él.
—Déjame en paz, mejor regresa con tu acompañante –bufó.
—Oh ¿es que estás celosa acaso? –Se burló de ella.
—Celosa ¿por qué tendría que estar celosa?
—Lo mismo pregunto, digo tú viniste con tu prometido –se acercó a ella sujetándola de la cintura –aunque puedo mirar que el fuego en tus ojos y ese brillo, solo son por mí ¿o me equivoco?
—Fuego ¿no quisiste decir ceniza? Digo, es lo que queda después de que el fuego se apaga ¿no es así?
—Normalmente quedan brazas entre la ceniza –le sonrió fanfarrón, provocando que la piel de Ginny se erizara con algo tan simple –y según dice el dicho, donde hubo fuego, cenizas quedan.
—No estoy segura, pero creo que te estás contradiciendo.
—Más bien es algo persiste de un enfado o de un afecto del pasado, especialmente si es agradable.
—Agradable –se burló Ginny –creo que solo para ti y sin duda estás entendiéndolo mal.
—No, creo que también da a entender que, aunque se haga de forma oculta las obras ilícitas, siempre queda algún rastro que las descubre. Y no olvides que el rescoldo es la ceniza que conserva algo de brasas.
Ginny observó los ojos de Draco, esos sin duda eran color ceniza, pero en ese momento podía comprender lo que estaba diciendo por la lujuria con que la estaba mirando, y sin duda quería que sus manos hicieran lo que su vista estaba haciendo, desnudarla por completo.
—No creo que sea una buena idea –murmuró observando a otro lado.
—Solo dime si estás dispuesta a esto y encontraré una forma de hacerlo posible.
—Pero... yo...
—No me interesa que estés comprometida, y por lo visto, a ti eso también te tiene sin mucho cuidado, Weasley, los dos sabemos lo que está pasando por nuestras mentes, puedo sentirlo en tu cuerpo también.
