𝐌𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐒𝐭𝐨𝐧𝐲

No puedo

—Tony.

—¿Hmm? —gesticuló mientras apretaba una tuerca.

—Ya no puedo más.

Tony levantó la cabeza y miró a Steve con una ceja en alto, la incógnita marcando su rostro. —¿Ya no puedes con qué?

Steve miró a la pared y asintió, dándose seguridad. Luego le devolvió la mirada, tan directa e intensamente como le fue posible. —Ya no puedo con las terribles ganas que tengo de besarte.

Tony se levantó de su banco, tomó un trapo para limpiarse las manos y se acercó a Steve. Posó sus manos en los hombros del rubio, usándolos como apoyo para empinarse, quedando a un palmo de distancia del rostro de Steve.

—¿Y qué espera, capitán? —susrró en su boca.